Relato: CITA FALLIDA AL GINEC�LOGO

Ten�a cita para el ginec�logo pero cuando vi a mi chico esper�ndome a la salida de la facultad no lo dud� ni un segundo, aquel d�a iba a ser el m�o, el de los dos. LLevamos apenas dos meses juntos, no vivimos igual pero mantenemos relaciones cada vez que queremos. Pablo es un hombre hecho, me dobla en edad y estoy loquita por �l. Tengo 18 a�os reci�n cumplidos y pocos o ningun chico me ha llenado tanto como Pablo. Un hombre desea a una mujer completamente pero hay veces en que una es algo reservada o t�mida y en mi caso desde nuestra primera vez me opuse a mantener sexo anal pues no estaba preparada.

Al poco de salir de clase aquel d�a senti la necesidad de su sexo, de com�rselo, de tragarme su semen y me sent� preparada para la estocada rectal. Se lo dije sin cortarme cuando me dijo que me acompa�ar�a al m�dico, "el gine puede esperar, quiero verga!!".

Creo que tard� m�s en procesar mi frase que en llevarme a su apartamento, desnudarme y hundirse entre mis piernas con su lengua �vida de sacarme hasta las hormonas.

Sent� su dedo en mi estrecho orificio marr�n, me excit� y empec� a gemir m�s y m�s fuerte hasta que lo empap� de corrida. Los momentos se dan cuando tienen que darse, se lo solt� sin m�s: QUIERO QUE ME DES POR EL CULO.

Todo chorreante de jugos, su cara un poema de vicio y sus ojos buscando los m�os, una pregunta corta: eh?, dijo.

�QUE QUIERO QUE ME DES POR EL CULO!

Aquello fue el delirio. Su chica pidiendo lo que tantas veces se hab�a negado y lo que tantas veces me lo hab�a pedido.

Pablo tiene la fijaci�n de darme a mamar su polla antes de met�rmela y de correrse en mi boca, dice que as� tiene m�s aguante y que tranquilamente me puede hacer correr un par de veces antes de venirse �l. Es verdad, y lo mejor de todo es que mantiene la erecci�n luego de eyacular y se le pone m�s dura si cabe raz�n por la que sab�a que entrar por mi culito estrecho, virgen y mojadito adem�s del placer que iba a tener como hombre, yo iba a disfrutar m�s que echar diez polvos.

Pero fue todo tan brutal, morboso y lleno de pasi�n que ambos perdimos el control y queri�ndolo o no empezamos a actuar violentamente. �l comenz� a follarme la boca con fuerza, me daban arcadas, vomit� y sigui� foll�ndome hasta que su riada de esperma me inund� la cavidad y el l�quido disparando en mi garganta. Sus manos me sujetaban por la nuca y no pod�a hacer m�s que tragar su semen para seguir tragando. Una enorme corrida que por poco me deja sin respiraci�n. No me dio tiempo a nada. Violentamente me gir� y me puso a cuatro patas en el suelo apoyada la cabeza en el sof�. Se unt� la verga de lubricante y de un golpe me encaj� aquel animal en las entra�as. Chill� y me retorc� de dolor y hasta llor�, pero me gustaba ser abusada por mi hombre. Me tir� del cabello y todo salido empez� a abofeterame por la cara mientras me llamaba de todo. Yo en el furor del acto me estruj� las tetas y me masturb�. Por fin lo ten�a donde no deb�a tenerlo. Pablo me dec�a PUTA, ZORRA, QUE SI TE VOY A ROMPER EL CULO, QUE SI VAS A CAGAR SEMEN TODA UNA SEMANA, QUE SI ERA LA M�S GUARRA DE LAS QUE SE HAB�A FOLLADO, y yo, sumisa y entregada, gimiendo como una perra. Lo agarr� de su culo como pude y lo clav� m�s a mi, estaba excitad�sima.

Sent�a sus huevos en toda la vulva. Sud�bamos y me lami� el sobaco, yo busqu� su boca pero s�lo encontr� un escupitajo que me entr� como agua en el desierto. Sali� de mi y torpemente me hizo echar en la alfombra, me levant� las piernas y me empal� hasta las cachas, chill� y por primera vez lo llam� CABR�N. La bofetada en mi cara cay� con fuerza, tal que me rompi� el labio. No estaba atada as� que le propin� una similar en la suya, empec� a escupirle y a llamarle CABR�N, MARIC�N, TE GUSTA MALTRATAR A LAS CHICAS, ERES UN PERRO, CERDO, F�LLAME EL CULO MARIC�N, ERES UN PUTO CABR�N y seg�a peg�ndolo hasta que nos fundimos en un morreo inusual pero rico, su lengua recorr�a mis enc�as, mis dientes, su saliva bajaba por mi garganta, le mord� en el cuello, lam� su sudor, met� mis u�as en su pecho, est�bamos en pleno �xtasis. Como dos perros amarrados y sin querer salir el uno del otro, quise recibir su semen en mi recto. C�RRETE CABR�N, DAME TU LECHE EN EL CULO, LA QUIERO TODA, LL�NAME DE ESPERMA MARIC�N...

Tard� m�s de una hora en venirse pero le saqu� hasta la �ltima gota de su veneno genital con el anillo de mi culo, lo exprim� todo. Entre bufidos me inyect� su semen y fui receptiva sin dejarlo escapar para sentirlo m�o y sentirme totalmente suya. PABLO, PABLO, ERES MI HOMBRE, AMOR, TE AMO CIELO. Dec�a gimiendo de dolor, de placer de locura.

Su verga no bajaba y a�n empotrado en mi culo reci�n desvirgado encaden� una segunda enculada que casi me lleva directamente al m�dico. Desgarrada en lo m�s �ntimo de mi cuerpo estaba fel�z, plet�rica, deseosa de cont�rselo a mi mejor amiga, de volver a hacerlo, de recibir verga todos los d�as por el culo, de llenarme de leche de macho hasta hacer lo que me hab�a dicho en aquel momento de bestialidad, no CAGAR MIERDA SINO SEMEN TODA LA SEMANA, TODO EL MES, TODO EL A�O Y HASTA EL INFINITO.

De eso una semana y seguimos haci�ndolo a diario en su apartamento, en el suelo, en la cocina, en la cama, en el ba�o, de pie y como s�lo �l sabe hacerlo. Y tanto tiempo sin probar algo tan delicioso... Mira que las chicas somos tontas. Eso de que me abuse mi macho me encanta!!!!

Soy Carla y los espero en mi pr�ximo relato, si os a gustado dadme vuestra opini�n en mi correo: Os espero.

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