Una lucha diferente, un mano a mano increible
En una isla de las costas de Espa�a, en una playa desierta a
la noche se lleva a cabo un encuentro formidable.
La imparable Chun Li Syan, una experta en numerosas t�cnicas de artes marciales
se mide ante la letal Cammy White, una asesina profesional que trabaja para el
M-16, la inteligencia brit�nica.
Las patadas y golpes son de una fuerza casi mortal, no opstante la lucha es solo
entrenamiento. Eso era suave comparado con los combates en las arenas de los
Strret Fighters.
La Srta. White llevaba puesto su habitual leotardo purpura, boina, guantes y
botas escarlatas, sin ovbiar las caracteristicas trensitas en su cabello rubio.
Chun Li tampoco variaba su look, su camisola oriental y debajo sus mayas rosa y
no podemos olvidar sus chonguitos.
El despliegue de t�cnicas era fabuloso, la fuerza y habilidad de estas feminas
era casi sobrenatural, pero a�n nuestras guerreras tienen limites. Ambas caen
sobre la arena presas del cansancio.
Chun Li se quita su camisola y respira ondo para decir:
-Cammy, es suficiente por hoy.-
-Anda, tengo una choza de madera cerca, ven hay que reponer energ�as.-
La rubia se sonrr�e y en tono ir�nico dice:
-Si tu ya no puedes mas, entonces vamos.-
-Quiero darme un ba�o. �Tienes ducha all�?-
Chun Li le responde la sonrrisa y le dice:
La ducha es algo r�stica, |pero sale agua de ella.-
Las dos peleadoras hab�an empesado a tener un laso profundo de amistad femenina,
lo que hac�a posible estos juegos de hiron�as.
Las palabras de Chun Li no eran bromas; la choza era casi un parapeto con un
techo ruinoso, un piso de maderas viejas, pero las tuber�as de agua eran
evidentes y el separado que hac�a de cuarto de ba�o ten�a la "ducha" que solo
era un tubo elevado del cual deb�a salir agua.
Para nuestras luchadoras esto no representaba mayor dificultad, recordemos el
duro entrenamiento de Chun Li y Cammy es un agente secreto acostumbrado a estas
carencias.
Cammy se adelanta a la mencionada ducha, se ba quitando su atuendo. Las botas,
boina y guantes ya quedaron atras. Lo que separa la ducha del resto de la choza
es un remedo de pared de madera, la separaci�n es casi simb�lica.
Chun Li enciende y cuelga al techo una lampara de gas, su tenue luz revela a la
sudorosa Cammy despojandose de su leotardo, naturalmente esta no es una piesa
dif�cil de quitar. Solo un estir�n aqu� y un hal�n all� y Cammy est� con los
senos al aire, la luz del fanal de gas muestran unos pechos redondos,
lijeramente bronceados rematados en unos pezones carmes� no mas grandes que una
cereza.
La escultural inglesa se inclina para terminar de desnudarse. Su esbelto cuerpo
resalta con la luz de la l�mpara a gas.
El agua que sale de la ducha est� tibia, empieza a mojar el cuerpo de Cammy
quien no puede evitar relajarse con el correr del agua c�lida por su anatom�a.
El agua va recorriendo todos sus rincones, ba�ando sus senos, su espalda, entra
en la divisi�n de sus perfectas nalgas, acaricia sus piernas, pero antes pasa
por su entrepierna.
Cammy se llena de la sensaci�n de placer por la relajaci�n que le proboca el
ba�o. Sus manos enjuagan su tersa piel, casi sin notarlo Cammy mas que lavarse
se regala caricias que hacen que sus pezones cereza se erecten y su entrepierna
lata.
Cammy reacciona y se da cuenta adonde est�. Lamenta no poder seguir con su muy
estimulante auto-masaje, hecha mano de una tohallita que a penas le cubre. Chun
Li aparece en sost�n deportivo y unas pantaletitas blancas, casi transparentes,
de hecho dejaban ver una sombra oscura en la pelvis de la luchadora. El sost�n
tampoco era la gran cosa, los senos abundantes de Chun Li casi los rebasaban, el
lijero atuendo le dejaba ver su poderosa, pero sut�l figura, su espalda y
glutios eran como esculpidas en la mas fina y dura madera, las piernas de Chun
Li hac�an alarde de su fuerza con cada sancada.
-Ahora es mi turno, Cammy, all� hay una colcha gruesa, por favor tomala y
exti�ndela en aqu�l rinc�n.-
Le dijo Chun Li a la semi desnuda Cammy.
La rubia hizo lo propio y se tumb� cual larga es sobre la mencionada colcha;
trataba de mantener la sensaci�n erotizante que hay� en la ducha, pero sin sus
manitas amas�ndola era dif�cil.
Chun Li ya estaba en cueros, lo que dejaba ver su calz�n no era irreal, la
entrepierna de Chun Li era una mancha oscura, peque�a y densa que hac�a
contraste con su cuerpo blanco, las �nicas oscuridades eran su ombligo y dos
pesones peque�os, redondisimos, los que eran la punta de dos senos erectos,
blancos y con la redond�s de una toronja.
Ver a semejante mujer desnuda, brillosa y mojada era un espectaculo sovervio, el
cual no pas� desapersivido para la rubia Cammy, por alguna raz�n no pod�a dejar
de ver las nalgas y piernas de su compa�era de entrenamiento. Pensaba en todas
las veces que las hab�a tocado, agarrado, pero no persiv�a la belleza del cuerpo
de esa mujer.
La rubia sinti� algo de pudor por la lujuria extra�a que le probocaban las
tetas, culo y piernas de la absorta Chun Li, quien lavaba su cuerpo con la
suavidad de una bailarina ex�tica, frotaba sus manos sobre sus senos y
ritmicamente segu�a con su cintura, piernas, haciendo de la esena algo de gran
erotismo.
Cammy no quiso seguir mirando directamente, pero siendo una agente entrenada
ella era cap�z de seguir con detalle todo lo que transcurr�a en la ducha solo
mirando de soslayo. Su curiosidad fue premiada cuando Chun Li quiso profundizar
en su aseo; la peleadora hizo gala de su gran flexibilidad y levant� la pierna
hasta la altura de su cabeza, la apoy� en la pared y procedi� a labar su
entrepierna. Cammy solo mir� como Chun Li cerraba sus ojos mientras el agua
tibia y sus manos daban caricias a su sexo oscurecido por la noche y los pelos.
Cammy White se dio cuenta que no pod�a quitar los ojos de Chun Li, se extra��,
pens�:
-El cuerpo de Chun Li es bello.-
Cammy se sonrri� lijeramente al pensar que le atra�a el cuerpo de otra mujer,
sin embargo recordaba los jugueteos en las duchas de la divisi�n femenil de la
M-16; toqueteos y manoseos entre las reclutas, eso no era mas que jueguillos
er�ticos, pero er�ticos al fin.
Tal vez fue la ducha caliente o el cansancio o ambos, pero Cammy casi sin darse
cuenta persivi� unos dedos que rozaban su humeda vulva. Eran los suyos propios,
mientras Cammy se resist�a a su exitaci�n, sus manos la abrazaron y se dieron
rienda suelta en su sexo.
El placer y la autosatisfaci�n volvieron a llenar a Cammy, su espalda tendida
sobre la colcha se arqueaba al toque de sus dedos, al igual que Chun Li, la
rubia guerrera cerr� sus azules ojos para gozar de el est�mulo en su calida
rajita.
Los pezones de Cammmy empezaron a sobresalir de la infima tohalla que mas o
menos la cubr�an, poco le falt� para abrirse toda de piernas para poder
masturbarse mejor, mas, entre una cosa y otra, Cammy, a�n con los ojos cerrados,
derrepente sinti� el roze suave y calido sobre su boca, algo, �Tal vez unos
labios? se posaron sobre los suyos.
Cammy reaccion� de inmediato, abri� los ojos de golpe para darse cuenta que no
era otra cosa que la mism�sima Chun Li, mojada, caliente y desnuda.
Cammy no supo exactamente que pensar, hacer o sentir, a los segundos reuy� a
Chun Li, quien se sonrri� y dijo:
-El agua tibia me exita mucho, y creo que a ti tambi�n.-
-Te ve�a mientras me mirabas y te masturbabas. Verte as� me puso caliente.-
La confundida, pero exitada rubia desidi� dejarse llevar por los latidos de su
sexo y su boca dej� de huir de la de la imponente Chun Li.
Ambas mujeres se obsequiaron un beso profundo, humedo y explosivo.
Usaban sus lenguas como falos mojados y se buscaban el alma la una a la otra.
Como si hubieran dado la se�al para iniciar la pelea,
FIGHT!!!
Chun Li tom� la iniciativa. se levant� un poco, casi arranc� la tohalla de Cammy
y se tom� unos segundos para mirar tal belleza.
-Eres muy bella Cammy, con raz�n Guille y los otros babean por ti.-
-�Alguna vez una mujer te mam� las tetas?-
Dijo Chun Li, pero Cammy no rompi� su silencio. Chun Li volvi� a hablar.
-Yo tampoco soy lesbiana, jam�s cre� tenerte aqu� as�, lo que pasa querida es
que despues de follar tanto con Ryu, Ken, Guille una quiere probar algo
diferente. Tu sabes...-
Cammy por fin rompi� su mutismo y dijo:
-Mira, nunca cre� que me pondr�a tan cachonda mirando el culo y las tetas de
otra mujer, por que de que estoy cachonda, lo estoy.-
Con esas palabras Chun Li procedi� a la tarea de lamer y chupar el ingl�s cuello
de Cammy.
Tal vez era la novedad de la experiencia, pero le parec�a que jam�s alguien la
hab�a chupeteado as�.
La brillante lengua de Chun Li se paseaba por el cuello y torso de Cammy, la
rubia sent�a las cosquillas en la vagina, pero eso no la prepar� para lo que
segu�a.
Chun Li acopl� su boca al pez�n del seno derecho de Cammy, lo besaba y lam�a
como si fuera un minusculo pene, sin dudas estaba erecto y Cammy not� el af�n de
su ahora amante y dio un delicioso quejido seguido de jadeos.
Chun Li quiso cambiar de pez�n y a�adir �un nivel mas de placer; Cammy no estaba
lista para ello, ella se estremesi� al sentir los dedos de Chun Li sobre su
inchado cl�toris, su boca se abri� un poco mas para dar una inspiraci�n y
aumentar la frecuencia de sus exitantes jadeos y dejar salir un entre cortado
-�Ay!, �Ay! Chun LI.-
Pero las cosas no se quedaron en el exterior del sexo de Cammy, los dedos de
Chun Li, cual expertos espeol�logos (exploradores de cavernas) se abrieron paso
en la babeante vagina de la rubia brit�nica.
Ser�a l�gico pensar que una experta en artes marciales como Chun Li conoce todos
los puntos de presi�n para causar dolor y tambi�n placer como el punto G o algo
as� o solo ser�a por el placer de meterle los dedos a Cammy, la cuesti�n es que
le estaba dando dedo a ella y ambas mujeres gozaban en grande.
El dedo medio de Chun Li se escap� de la vagina y busc� la raja de las nalgas de
Cammy con el fin de juguetear con su culito.
Podriamos decir que a Cammy le gust� y no le gust�, la verdad es que sinti� algo
de dolor en su rosita trasera, pero la lengua de Chun Li en sus tetas y sus
dedos en su sexo transformaron la sensaci�n en algo indescriptible, tanto as�
que Cammy comenz� a temblar y a medio que decir:
-�Mas....! �Mas..! Dale, dale, As�, as�!-
Chun Li desidi� incrementar su ataque, lami� algo el vientre de Cammy y le puli�
el ombligo para ir a parar en el loto dorado de la poderosa ingl�sa.
De la misma manera que momentos antes, Chun Li se tom� unos instantes para
admirar la hermosa entrepierna de su rubia amiga.
Cammy siempre ha procurado mantener su sexo bien afeitado, le gusta mantener la
suavidad de la piel de su sexo sin nada de vellos, pero el tiempo que lleva
entrenando le ha impedido llevar a cabo su ritual de razurada vaginal y p�bica.
As� pues toda la pelvis y entrepierna de la rubia se hallaban tachonadas de una
delicada e insipiente alfombrilla de pelillos amarillos los que ven�an en forma
de concha desde el pubis y converg�an en el nacimiento de los labios mayores,
los cuales daban forma a una delicada ranura de la cual sobresal�a el delicioso
sexo de Cammy.
La peluza rubia dejaba ver la piel rosa del sexo ahora inchado y mas rosado que
de costumbre, del pliegue genital sobresal�a un cl�toris erecto de color rosado
mas oscuro.
Chun Li ya hab�a sacado sus dedos del co�o y culo de Cammy, el sexo de la rubia
segu�a pidiendo mas batalla y la iba a resivir, Cammy ya sent�a lo que su amante
har�a.
Chun Li tom� a Cammy por la cintura se acomoda entre sus piernas y entierra su
cara en el sexo de la ingl�sa. Cammy pone los ojos de azul a blanco, muerde su
labio inferior y toma la cabeza de su asi�tica amiga con sus manos. Los
leng�etazos de Chun Li son firmes, pero con la suavidad que solo una mujer le
dar�a a otra, recorr�a su raja de arriba a abajo como si el sexo de la rubia
fuera un postre para comer sin cubiertos ni servilletas.
Cammy pareci� despertar cuando deside tomar parte activamente en la lucha
carnal. Le pide a Chun Li que se detenga un momento, la poderosa guerrera se
extra�a de la petici�n de su rubia acompa�ante,
-�Que pasa Cammy? �No te gusta?-
Cammy dice,
-Espera, por favor pon tu co�o cerca de mi boca.-
La asi�tica comprendi� de inmediato, se volte� poniendo su culo mirando hacia
Cammy, Chun Li se recost� algo sobre el tronco de Cammy y de inmediato aterriz�
su lengua sobre la intimidad h�meda y c�lida de la Srta. White.
Cammy ten�a ahora en frente el sexo de su amante, sent�a el irrefrenable deseo
de com�rselo y as� lo hiso. El co�ito de Chun Li estaba tapizado por la densa
peluza negra formada por pelitos cortos, pero compactos los que hac�an un solo
camino desde el poblado pubis hasta perderse entre la raja de las nalgas, los
labios y pliegues estaban cubiertos por ese terciopelo negro entre el que sal�a
como una isla alargada la raja y la piel tersa y lampi�a de la vulva de Chun Li,
su cl�toris y labios menores eran de un tono caf� brillante, seguramente debido
a los fluidos que manaban de ella por lo exitada que estaba.
La lengua de Cammy se estir� para tocar la entrepierna de Chun Li, al primer
roze la mujer mas fuerte del mundo dio un jemido profundo. Esto si era realmente
nuevo para Cammy, el sentir el aroma y el sabor de una hembra, pero no hubo
mayor dificultad. Ambas mujeres pod�an sentir el palpitar de sus sexos y se
hallaban disfrutando de un 69 de lujo.
Cammy quiso retribuir a las travesuras que el dedo de Chun Li hiso en su culito,
as� que meti� los dedos entre las duras nalgas de su contraparte, con el �ndice
busc� la abertura del ano de Chun Li, no sin dejar de lamer y besar su co�o; el
dedo encontr� su objetivo. Cammy record� las veces que Guille, Bee Jay y otros
hombres de grandes penes le han penetrado por el culo. Ellos le propinan un
masajillo con el dedo para dilatar su ojete antes de empujarle la daga de carne.
Cammy hiso lo propio con Chun Li, acarici� las arrugas de su ano con la suavidad
nesesaria para relajar el culito de la asi�tica, as� Cammy le meti� un dedo en
el culo aChun Li, lo mene�, sac� y volvi� a meter, pero la rubia no estaba
conforme as� que le encaj� un segundo dedo y un tercero.
Chun Li respond�a haciendo con mas fuerza a Cammy, sus u�as laseraban las nalgas
y muslos de la rubia de trensas.
Cammy sent�a todo el peso del escultural cuerpo de Chun Li, pod�a sentir sus
tetas en su vientre sin contar que pod�a saborear su femeneidad con toda
libertad.
Ambas mujeres empesaron a sentir los preludios org�smicos una en la otra. Chun
Li aceler� sus lamidas, besos y chupeteos en el sexo de Cammy, la rubia empes� a
tener temblores y oleadas del mas salvaje placer que pod�a haber sentido, en una
maniobra digna de un gran peleador, Cammy atrae con su lengua el cl�toris de
Chun Li hacia sus labios, y lo empiesa a chupar como si fuera una rica aceituna
a la que hay que sacarle el jugo.
Los dedos de Cammy en su culo y su cl�toris inmerso en la boca de la rubia
desataron la reacci�n en el cuerpo de Chun Li, desde su pelvis empesaron a
irradiar ondas de placer hacia todo su ser. Cammy ya pose�da por la fuerza
org�smica temblaba y abrasaba a Chun Li con una fuerza enajenada, por un momento
meti� toda la longitud de sus dedos en el culo de la bella asi�tica.
En el momento cr�tico ambas mujeres no pudieron mas, estiraron sus cuellos y de
manera un�sona dieron un jemido brutal, sus ojos se blanquearon y compartieron
un potente orgasmo simult�neo que las consumi� como una llamarada de placer y
olor a hembras.
Chun Li se tumb� junto a Cammy y la tom� por el torso y la bes� y as� ambas
gladiadoras culminaron su experiencia l�sbica saboreando sus propios sexos
atraves de la boca de cada una.
Las guerreras a�n ten�an varios d�as de entrenamiento en la isla, ahora
aprovechar�an los d�as para luchar y perfeccionar sus t�cnicas y las noches para
explorar y sentirse como mujeres, hembras de gran poder en el mundo de Street
Fighter.
FIN