Hola, Mirtha.

Hola, como, tardaste...

Perdona, es que no se dorm�a.

Bueno, contame algo tuyo ahora no?

Mirtha, yo creo que es algo, no digamos usual, pero que
siempre rondo en una noche de calentura de toda madre. S� de un caso que me
cont� un chico, cuando yo ejerc�a en una escuela en la cual daba ayuda
sicolog�a. Mas o menos detalles, me lo relato as�.

Contame como empez�, mi amor.

Una de las cosas que recuerdo, fue un amiguito me presto una
revista er�tica, no me acuerdo el nombre.

Bueno, mi amor, no importa... y que paso. (Se trataba un tipo
vengador, que se disfrazaba de esqueleto, y mataba mujeres, pero antes de
matarlas las desnudaba, las dejaba en bombacha y corpi�o, quiz�s se ve�a alguna
teta, pero nada mas), Pero te imaginas, con doce a�os y ansioso.

Yo me encerraba en mi cuarto y las le�a con una mano sosten�a
la revista y con la otra me tocaba....

Que te tocabas mi amor.

Usted sabe..

Ah! A m� me podes decir, te estabas haciendo una pajita con
la otra mano no?

S�.

No tienes por que avergonzarte... mi amor, pero seguime
contando.

Bueno, fue que un s�bado, por la tarde mi madre me pesc� con
las revistas bajo las sabanas, y en ves de enojarse conmigo me alent� y
estuvimos toda la tarde en mi cama, hasta que a la noche llego mi padre. Le�mos
juntos, ella comentaba alegre las escenas por que le causaban mucha gracia y me
hacia preguntas que a la vez me ayudaban a excitarme, mientras mi mano debajo de
las sabanas, eran reemplazadas por las de ellas, no me voy a olvidar esa tarde
por que entre revista y revista, ella me hizo tres pajas en toda la tarde.

Tres, mi amor...

S�. Desde ese d�a no tuve que pedir le mas revistas al
vecino, pues era ella quien se encarga de comprarla y un s�bado en el mes era
seguro que disfrutaba de su lectura y de las pajas que me hacia mi madre los dos
metidos en mi cama.

Sobre los temas que habl�bamos... ha ella le gustaba que le
hablara cosas de chicas o me preguntaba si me gustaban las bombachitas de las
chicas, esas conversaciones que eran mas preguntas que otra cosa. Como para
saber cuales eran mis gustos, y tratar de complacerme.

Creo que ella se percata de mi necesidad y noche por medio,
venia a arroparme y entre abrazos y caricias, charl�bamos y termin�bamos
hablando de chicas, y momentos mas tarde, ella acentuaba sus caricias, sobre el
slip, despu�s lo corr�a y continuaba, haci�ndome una paja, yo creo que por la
alegr�a de su cara, le encantaba lo que hacia y lo hab�a tomado como una
obligaci�n o costumbre m�s. Por las noches ella deb�a de pajear a su hijo
querido.

Disimulando siempre que su inter�s era con el fin de
ense�arme, dici�ndome que ella siempre estar�a para explicarme todo lo que
quisiera saber sobre eso. Con el pasar del tiempo, ya venia preparada y antes
que acabara sacaba un pa�uelo, previamente preparado por ella para tal fin, y lo
pon�a sobre mi pancita y me dec�a que ya era todo un machito y no quer�a manchar
las sabanas, con mi leche.

Yo, escuchaba y no lo pod�a creer, a la veces me excitaba mas
y m�s, queriendo saber cada min�sculo detalle de cada encuentro o situaci�n.

Cada vez, por las noches cuando venia a mi cuarto, todo iba
torn�ndose un ritual con sus caricias sobre el slip y despu�s me envolv�a con
sus dedos y comenzaba suavemente el movimiento ascendente y descendente, tambi�n
me pon�a un poco de saliva para lubricarme, incluso aveces tra�a crema Hinds y
me la pasaba con sus mano por todo el tronco, era un trabajo muy delicado dec�a
ella, y cuando tomaba consciencia de mi estado, momentos antes sacaba el
pa�uelito y lo pon�a sobre mi el cual yo lo llenaba de leche, despu�s lo doblaba
y se lo llevaba.

Era obvio, que elle se calentaba a mas no poder, con las
pajas que le realizaba a su hijito lindo, y tambi�n lo alentaba por un
fetichismo por las bombachas, y reservaba cosas diferente para d�as de fiestas e
incluso religiosas y sus cumplea�os. El sacaba provecho de eso tambi�n como me
cont� una vez.

Cuando, hab�a visitas, pero descubr� que haci�ndome el
caprichoso, obten�a lo que quer�a, pues mi madre se cansaba y me gritaba y era
una escusa para llevarme de los pelos a mi cuarto y quedarse unos instantes,
para las visitas rega��ndome. Pero en cambio ella, hacia que me retaba en vos
alta. Y yo le dec�a de mi estado y como me sent�a y ella protestaba, me dec�a
que estaba loco, pero acced�a r�pidamente.

Pero estas loco, hay gente...

Dale, mama tengo muchas ganas me duele.

Bueno, te hago, una s�lita, y t� quedas tranquilo, esta
bien.... despu�s antes de acostarme vengo y si tenes mas ganas te hago otra mi
amor, pero no vuelvas a llamarme sabes.

Si mami, te lo prometo.

En casa ajena, las cosas cambiaban, seg�n las circunstancias
me llevaba a una habitaci�n, que le ped�a a la due�a, pues le dec�a que no me
quer�a avergonzar, ret�ndome, frente a otras personas por mi mal comportamiento,
y lo dem�s se imaginaban que me estaba rega�ando, pero la verdad era que ella
sabia que me tenia que hacer una pajita para calmarme. Ella protestaba como
siempre y enseguida asedia...

Esta bien pero ap�rate por si viene alguien....

Creo que esas escapadas a ella tambi�n le gustaban pues eran
m�s emocionantes incluso por que no iba preparada como ella dec�a, como una
negativa, sin ninguna trascendencia.

Me dec�a te gusto mi amor, yo asent�a y agregaba, esto tiene
que ser un secreto, solo entre vos y yo mi amor sabes.

S�, mam�...

A m� me gustaba mas que ella me lo haga en casa ajena, me
daba mas emoci�n, y yo creo que all� tambi�n, por que implicaba que una vez que
comenzaba a hac�rmela deb�a sacarme la leche r�pido y a toda costa, creo que en
esos momentos su imaginaci�n volada a mil, pues me dec�a cosas que me calentaban
enseguida como si me gustaban las tetas de tal o cual persona de la que estaba
en la reuni�n o que ella me hab�a descubierto tratando de mirarle la bombachas a
alguna se�ora y acababa r�pidamente sobre sus manos, a veces ella hablaba para
exitarme mas y como para ella. Una vez hab�amos entrado a una habitaci�n se
usaba de biblioteca y no hab�a nada con que limpiarnos se levanto la falda y con
las enaguas se limpio ella y despu�s a m� y me dec�a ahora p�rtate bien, me
arreglaba y me daba un beso y sal�amos del cuarto.

Te gusta mucho ver debajo de las faldas de las mujeres..

Si, y esa ves era la primera vez que vi debajo, de las de mi
mama..

Era realmente muy excitante cada vez que estaba con ese
chico, yo me cambiaba las bragas una ves que la secci�n conclu�a.

El d�a de mi cumplea�os fuimos al cine, yo hab�a insistido en
entrar llegamos a la primera funci�n y no hay casi nadie dentro del cine, esa
misma ma�ana compramos mis regalos y a la tarde era la fiesta con toda la
familia, nos encontr�bamos sentados en las ultimas filas y ella al ver que la
pel�cula tenia algunos desnudos, yo hab�a entrado por ir con ella sino no me
hubieran dejado entrar. Bueno, ella se dio cuenta de mi excitaci�n, puso su
abrigo sobre mis piernas, me bajo el cierre, y comenz�, despacio como a m� y a
ella le gustaba. Y me dijo: av�same cuando t� este por llegar la leche, que por
ser tu cumplea�os te voy a hacer un regalito y yo s� que te va a gustar. Cuando
no pude mas, le avise, me viene la leche, inmediatamente se agacho y se la puso
en la boca y me succiono toda la leche, la cual trago y despu�s sin sacarcela de
la boca continuo, hasta limpi�rmela toda. Esto es tu regalo de cumplea�os me
dijo, y continuamos viendo la pel�cula, antes de que terminara, me tuvo que
hacer otra, pues la tenia de nuevo parada no s� si por la pel�cula o por el solo
pensamiento de que hab�a acabado en la boca de mi mama, y que ella no se negar�a
en mi cumplea�os a chup�rmela de nuevo, y no se neg�, pero al terminar, me dijo:
esto te lo hago, solo hoy por tu cumplea�os.

Lo m�s extra�o que la madre era muy recta esos tratamientos
especiales los reservaba, para momentos relevantes una o un evento religioso.
Religioso?

Si, al principio, y tampoco entend�a, pero el me cont�. Que
despu�s que, casi todas las veces que volv�a de la iglesia, se portaba m�s
cari�osa con su hijito, pienso que quiz�s era su forma privada de festejar o
gozas de lo prohibido.

Que historia.... Y vos no sacaste ning�n provecho de todo
eso.

Bueno, las secciones duraron mas de un a�o, y tuve reuniones
a solas con �l y con su madre, y tambi�n reuniones que expresamos los tres
nuestro punto de vista.

Y como fueron esas reuniones.... estoy super caliente.

Como vos lo dijiste esa es otra historia. Ma�ana, veni vos
esta ves a casa y te cuento..

Ah!, los pa�os, se los hiciste hoy...

No, ahora mismo, que est�n todos dormidos, se los voy a
hacer.

Bien, ma�ana, estoy sin falta en tu casa. Un beso.

Chau.. Te espero.

Continuara...

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