El miembro de Roberto estaba tan erecto y el estaba tan
excitado que tem�a venirse ah� mismo. Sin decir una palabra sed despoj� de su
ropa delante de su madre. Se acerco a ella. Agarr� la teta de su madre con ambas
manos, firmemente y casi bruscamente, y verti� en su boca la leche que emanaba
de sus enormes tetas, y bebi� profundamente.
"Oh, Roberto.," Gimi� cuando relev� la presi�n de su pecho.
Roberto o�a los sonidos que provocaba al chupar esas enormes tetas, Roberto casi
salt� para fuera del cuarto cuando sinti� la osada mano de su madre agarrando su
a su verga. Ella suave y como toda una experta lo acarici� como a el le gustaba,
pero ahora era en la verga. Con esto el casi eyacul� en la mano de su madre,
pero ella se detuvo. Lo gui� a la fuente de su calor entre sus piernas. Su verga
resbal� en su madre f�cilmente. Ella estaba muy caliente y mojada.
"Oh, Mam�." Gimi� con placer.
. Roberto se alarg� deba de su mam� y encontr� el trasero
firme y redondeado de su madre.
"Vamos, Roberto culeame." Di su madre en un gemido muy
caliente. El se qued� paralizado al escuchar a su madre decir esas palabrotas
vulgares. . Roberto mandaba el movimiento en sus caderas y pronto sus cuerpos
entraban a habitar una casa plagado con unos ritmos acalorados, por ellos
mismos..
"Culeate a mama." Gimi� ella. Roberto tom� los pechos y lanzo
un chorrillo de leche en su boca.
"Mam�. Mam�. Mam�" se oy� gritar involuntariamente. Sus
caderas se encontraron el uno contra el otro como madre e hi, se vinieron juntos
en un orgasmo muy fuerte, casi como un cataclismo.
-"wow, �se estuvo bueno, Roberto".
Su madre sonri�. "Estuvo fant�stico, y no nos debemos sentir
culpables". Roberto agit� su cabeza y no lo pod�a creer. No se sent�a
avergonzado ni culpable. Realmente hacer el amor con su madre era un maravilloso
acto. Para el no hab�a nada malo con hacer el amor a esta bella y amorosa mujer
quien le dio la vida.
"Te amo Mam�." Abraz� a su madre herm�ticamente.
"Yo tambi�n te amo demasiado, Roberto."
"Oh, Roberto, deseo hacerlo una vez m�s, pero tienes que
volver al colegio"...
Su miembro estaba erecto nuevamente..
"Podr�as llamar y decir que tengo fiebre." Sonr�o
maliciosamente a su madre.
"No, Roberto. No podemos permitir que esto, cambie el orden
en nuestra vida. "Adem�s, tenemos esta noche para jugar a." le di a mientras
acariciaba su cabello.
"Esta noche." Record� �l.
En la escuela Roberto estaba en la luna..
Yo realmente culi� con mi madre... mi sue�o se cumpli�..."
." Roberto?" Su maestro le hablaba
"Uh, pod�a repetir la pregunta, Se�or?" Contest�
La clase se r�o, y Roberto s�lo quer�a meterse deba de el
escritorio.
Finalmente, el 3: 00 son� la campana y Roberto se fue
r�pidamente. �l corri� a la salida pero lo detivieron antes de podr�a salir
"Porqu� me evitas?" Le di Camila "hay otra ni�a que te
gusta"?
"No, Camila no. He estado ocupado. Con mi madre. Esta muy
ocupada con el nuevo beb�."
"Por supuesto, Roberto, me siento tan tonta. Como esta tu
madre?"
"Pues, mucho mer. Estoy tratando de ayudarla lo mas que
pueda.
"lo que yo pueda hacer por ti d�melo Roberto"
"Gracias, Camila. Hablaremos m�s tarde, OK."
Al llegar a la casa vio que la alcoba de su madre estaba
oscura. En ella, su mam� hab�a puesto solamente velas, que igualmente marcaban
la desnudez de su madre Hicieron el amor lentamente ba la luz de estas. Roberto
y su madre tomaron su tiempo para explorarse mutuamente Despacio construyeron su
pasi�n en un caluroso abrazo.
M�s tarde cambiaron las t�cticas amatorias que hasta el
momento utilizaban. Ellos culiaron de manera dura y fuere logrando un orgasmo
violento. Durante toda la noche despertaban despiertan y volv�an a culiar. En la
ma�ana se encontraban exhaustos pero de igual forma comenzaron el d�a culiando.
Unos d�as m�s tarde llego a la alcoba de su madre. Roberto y
su madre no pod�an estar separados mucho tiempo el uno del otro. Ellos hac�an el
amor cada cuatro horas por lo cual necesitaban experiencias nuevas. Probaron de
todo y estaban constantemente en el hallazgo de maneras nuevas de excitar al
otro. Entonces introdujeron el sexo oral. Roberto se puso como loco en cuanto su
madre tom� su verga y la puso en su boca. Mam� lo chup� con su lengua hasta que
el disparara su carga en su boca, en un orgasmo chill�n. Roberto tambi�n prob�
el sexo oral en su mam�, cosa que no disfrut� particularmente, pero le gusto ver
como se excitaba su madre ante esto.
Roberto y su mam� tambi�n disfrutaban a la hora de ponerse
lociones. Su madre deb�a usar una loci�n especial para evitar las estr�as del
embarazo en su cuerpo. El se dedicaba amablemente durante horas a frotar la
cremosa loci�n en sus pechos hinchados, caderas cada vez mas redondas y trasero.
Acababan siempre culiando despierto durante estas sesiones. Una vez su madre
engras� el glande de su verga con gran cantidad de la loci�n. Luego ella se puso
en cuatro patas para que el pudiera penetrarle su ano. Roberto hab�a o�do acerca
del sexo anal pero lo consideraba un poco brutal y pervertido. Pero el realmente
no imaginaba el placer exquisito del ano firme de su madre. Cuando �l empuj�
verga por el esf�nter de su madre y penetro a su recto., el parti� despacio para
evitarle dolores a su madre, pero ella comenz� a gritar groser�as que excitaron
mas a Roberto que comenz� a culiar mas fuerte a su madre. Finalmente entr� un
orgasmo intenso en que bombe� todo el ano de su madre con su semen. Despu�s de
esa primera vez, el sexo anal lleg� a ser uno de sus favoritos. Supo que a mama
le dol�a esa practica, pero ese dolor era m�nimo si comparaban el inmenso placer
que les provocaba a ambos.
Su madre disfrutaba calentando a su hi. Sabia de su
fascinaci�n con su ropa interior. Ella se pon�a la ropa interior y se paseaba
frente a su hi hasta que este la tiro a la cama Ahora las tetas de su madre eran
dos tazas mas grandes lo que por supuesto reforz� el efecto por Roberto.
El inesperado juego con las tetas de su madre era una parte
regular de su repertorio sexual. Frecuentemente Roberto estaba acostado y con
madre se sentaba encima de el con sus pechos colgando como p�ndulos encima de
�l. En esta posici�n ellos pod�an culiar c�modamente y as� Roberto chupaba las
tetas hinchadas de su madre. �l terminaba usualmente empapado en de la leche de
su mam�. Cuando Roberto y su madre descubrieron los deleites de sexo anal, se
dieron cuenta que podr�an usar la misma posici�n. Roberto pegar�a su verga
arriba del ano firme de su madre mientras chupaba la leche de sus pechos. A ella
tambi�n le gustaba mucho esta posici�n.
Tambi�n en su eterna b�squeda del placer, la madre le di a
Roberto que se sentara encima de ella y pusiera su pene entre sus tetas.
"Mmmm, a m� me gusta esto, Mam�
"Dios, Mam�." Apret� sus pechos herm�ticamente alrededor de
su verga. La leche comenz� a salir en chorritos por el aire y en su abdomen.
Con ambas manos amas� sus pechos y se masturbaba en su
hendidura. Sus pechos eran pesados, llenos y con un calor moderado que era grato
para su verga. Roberto no sobrevivi� a este �xtasis por mucho rato porque pronto
vino a orgasmo. Alarmado de repente, trat� de mover su verga les de su mam�;
pero era demasiado tarde cuando dispar� la ola de semen blanco en la cara de su
.madre
Roberto estaba muy avergonzado por lo que paso
"Disculpa, Mam�,."
"No, Roberto." Le di con una sonrisa que calent� su coraz�n.
"Ha de ser bueno para la piel." di cuando frot� el semen en
su cara.
D�as despu�s, Su madre fregaba los platos cuando el entr� la
cocina.
"Hola, mi ni�o." Di ella.
Sin decir ni una palabra abrazo por detr�s a su madre y
agarro sus pechos Por encima su vestido. Alarg� su mano hacia el frente del
vestido de su madre y resbal� su mano hacia de su sost�n, sintiendo el calor del
pecho desnudo de ella.
"Mmmm. Subamos a la alcoba, Roberto."
"No. Tengo una idea mer, Mam�"
Pellizc� la pez�n de su madre y extra una gota de la leche,
mientras dio un tir�n a los calzones de sus madre dejando entrever la humedad de
su concha.
"Oooh, Roberto.," Gimi� ella..
Roberto tomo un poco de detergente para vajilla y se lo puso
en su verga erecta. El resto sobrante se lo puso en su dedo �ndice y luego
penetro el ano de su madre.
Su madre se retorci� de placer. "Brrr, esta fr�o, Roberto."
"Lo calentar� para usted, Mam�."
Su dedo hall� el ano de su madre.
"Roberto, hazlo" Hazlo por el culo de tu madre.". Di ella muy
caliente
Roberto puso su verga en el hoyo del culo de su madre. Empuj�
y resbal� con una peque�a resistencia en su ano. Bes� a su madre cuando la
penetraba.
"Oh, Mam�." Di el .
Mordi� su oreja ligeramente cuando comenz� culiar su ano.
"A Usted le gusta esto, Mam�." Empujaba m�s duro ahora.
"Oh. Oh. Oh!" Gru�� ella al sentir la enorme verga en su ano.
�l sinti� el cuerpo de su madre, que se aprieta y relaja deba de su abrazo.
Ambos se derrumbaron en la fr�a. Cocina.
Sus vidas cambiaron para siempre, estaban tranquilos. Ahora
ellos eran madre, hi, amantes, meres amigos y confidentes. La intensidad de su
relaci�n sexual los hab�a asustado al principio. Ellos estaban siempre
dispuestos a hace el amor, en cualquier momento. Quiz� esta intensidad es
puramente del sexo entre una madre e hijo y son el origen real del incesto
prohibitivo. Era una obsesi�n; una afici�n sexual pod�a seguir cambiando sus
vidas.. Roberto y su madre sab�an que deb�an controlar las pasiones Roberto
sigui� en escuela y con meres notas, ya que sabia que cada d�a su madre lo
esperaba como un premio por su agotadora jornada.
Le leche de mi madre 5
Su mam� insisti� que tuviera relaciones con otro muchachas.
Ella le record� que se cansar�a de ella cuando ella estuviera vieja y fea. De
mala gana, estuvo de acuerdo y llam� por tel�fono Camila, estaba feliz por la
llamada y quedaron de salir a comer algo el s�bado en la noche. La relaci�n de
Camila con Roberto era nada comparada a la profunda relaci�n de esta con su
madre. Y Camila no se daba cuenta de esto.
El S�bado por la noche Camila llev� a Roberto a una colina
cercana a la ciudad. �l empez� inmediatamente a manosear las tetas de camilla
por debajo de la ropa. Sus pechos, aunque eran grandes, jamas llegar�an al nivel
de las tetas de su madre. Roberto la bes� su profundamente mientras ligeramente
acariciaba su pez�n con su mano. Luego le quito la blusa a Camila quedando esta
en topless. Estudi� su cuerpo mientras Camila estaba roja de verg�enza. Luego de
estar un mes acost�ndose con su madre, Camila no le llegaba ni a los talones a
su madre. Los pechos de Camila, no eran tan exuberantes como los de su madre de
esos de su madre. Sus pezones eran de un ligero caf�, y sus areolas era m�s
redondeadas. Hicieron el amor debajo de unos arboles, mientras Roberto pensaba,
que con su madre el era un alumno, per con Camila, el era el maestro.,
."Roberto, estas cambiado, como si hubieras madurado mas", �
no habr�s estado con otra ni�a?
"S�lo mi madre." Sonri� ante su chiste privado.
"Estaba asustada de que estuvieras con otra"
El la beso en la frente.
Al volver a su casa su madre lo esperaba lleva el camisa de
dormir. Sus pechos grandes destacaban de inmediato.
"Pues, c�mo estuvo la cita?"
"Estuvo bien, Mam�." Dijo el de manera muy tosca.
�"Le hiciste al amor verdad?"
"S�, Mam�, pero yo no quiero hablar de eso ."
"Ella es tan buena como yo?",
"Nadie es tan buena como usted, Mam�."
Salto a la cama mientras agarraba el culo de su madre para
lubricarlo. Su verga resbal� en el recto de su madre con suma facilidad. Agarr�
sus pechos llenos de leche e inmediatamente gotearon en sus palmas. Su peque�a
aventura con Camila los excit� ambos, e hicieron el amor como dos perros. Su
madre era una vulgar una perra en celo deseosa de ser penetrada por su hijo cada
vez que fuera posible.
"Nadie podr�a reemplazarla, Mam�." Dijo �l mientras jugaba
con los pechos de su madre
Roberto siempre hab�a estudiado el cuerpo de su madre con
mucha dedicaci�n. Sus enormes tetas, su curvil�neo culo, ahora estaba algo mas
gorda, pero no por eso era menos sexy.
El cuerpo de su madre siempre lo excito, y provocaba que su
miembro creciera duro. Desde que era un ni�o utilizo cada oportunidad fortuita
en que pudiese ver el cuerpo de su Mam�. En su adolescencia comenz� a
masturbarse para liberar la tensi�n de ver en secreto a su madre Ya adultos
ellos liberaron esa tensi�n juntos, en un acto caliente y maravilloso. Todas las
otras relaciones palidec�an ante la ardiente relaci�n con su Mam�. �Nada se
compara a culiar con su propia madre.! Pese a eso deb�an ser cuidadosos por que
el mundo no aceptar�a su relaci�n. �l habitaba la casa con su madre, donde tenia
su pieza, pero en la realidad, ellos compart�an la misma habitaci�n, donde se
ocultaban de la mirada castigadora del mundo. La diferencia de edad entre ellos,
(22 y 38), se estaba achicando y a ninguno de los dos parec�a importarles. En
lugar de que su pasi�n disminuyera con el tiempo, esta crec�a hasta niveles
insospechados. Lo que m�s provocaba a esta pareja era romper el tab� impuesto
por la sociedad, la relaci�n madre e hijo. "Tengo que ir al trabajo." dijo ella
El no hizo caso y empez� a acerc�rsele lentamente
"Voy a llegar tarde." Dijo molesta.
�l ignor� su comentario y comenz� a besar su cuello. Sus
manos subieron hasta el sost�n de su madre
"No. Voy a llegar tarde, a la noche jugamos"
Trat� de salirse del abrazo de su hijo pero no pudo
"Oh." Gimi�. Su boca estaba abierta ahora. "Entremos la
alcoba." Dijo ella en total excitaci�n.
"No. Aqu�." Dijo Roberto.
� "Delante del cuarto de ba�o? Esto es nuevo." Dijo ella.
Dio un tir�n haciendo que su madre cayera al suelo.
"Ouch. Espera un minuto."
Agarr� por el lado sus caderas y resbal� hacia su ano. La
coloco frente al fregadero. Estudi� la abundancia carnosa del trasero de su
madre Corri� su palma ligeramente encima de su encorvados gl�teos.
"voy tarde al trabajo as� que hag�moslo r�pido"
Alz� la mano y comenz� a darle palmadas en el culo. En el
espejo podr�a ver l�grimas del placer de su madre, mientras ella se mord�a los
labios del dolor. Bes� su cuello y toco su conchita que estaba empapada. Ahora
estaban explorando t�cnicas cercanas al sadomasoquismo casero en la frontera
entre el placer y el dolor. Jug� con su cl�toris y ella grito. Mir� a su madre
en el espejo, mientras segu�a tocando su concha. Empuj� su verga de manera ruda,
hacia la concha de su madre, buscando el calor dentro, mientras continu�
tecleando su cl�toris.
"No cari�oooooooo. Estoy todav�a herida de la ultima vez. Por
favor."
El no hizo caso. Tomo un poco de jab�n y lo enchastro en su
dedo �ndice introduci�ndolo en el ano de su madre.
"Est�s como una perra caliente Mam�."
Quito si dedo y su madre gui� la cabeza p�rpura de su verga a
su ano. Encontr� una leve resistencia cuando comenz� a empujar m�s en el ano de
su madre.
"Dilo puta, dilo " Dijo cruelmente mientras pellizcaba su
pez�n.
"Culeame, culeame, por el culo ." Dijo su madre. Era un nuevo
juego que ambos ten�an.
Podr�a ver a su madre haciendo una mueca de dolor. Sinti�
como un guante del terciopelo agarraba su verga. Supo que no va iba a durar
mucho adentro.
Comenz� a empujar ligeramente y oy� que su mam� gem�a de
placer. ... y de dolor.
"Ohm."
Empuj� m�s all�. �l daba golpes m�s largos..
"Mam�. Usted es una perra"
"Ohm." Gem�an ruidosamente al un�sono. Bruscamente agarr� una
nalga en cada mano y las pellizc� duramente. Estaba cabalgando el ano de su
madre
� "Oh! Oh! Eres un hijodeputaaaaaaaa. Oh."
Su madre s� venia en una ruidoso orgasmo.
"Ahhh." El orgasmo fuerte de su madre hizo que descargara el
semen en el ano de su madre.
Luego de besarse apasionadamente dijeron:
"Te amo Mam�." Susurr� �l "Yo te amo demasiado, cari�ito."
Se abrazaron mutuamente sintiendo un amor de madre e hijo que
no se pod�a romper con nada del mundo.
Ella despert� y se dio cuenta de que su pecho todav�a colgaba
fuera de su sost�n.
"No te hagas ideas. Ahora si que voy tarde al trabajo."
Despu�s de un leve forcejeo Roberto la tir� el cintur�n al
suelo y comenz� a manoseara.
"Qu� voy a decir en mi trabajo?"
"S�lo diles que estabas haciendo el amor con tu hijo." Dijo
Roberto en broma.
"Esa excusa no sirve hijo...pero es muy ingeniosa de tu
parte"
"Oh, Mam�. . ."