Relato: El inicio El inicio.
En este relato, les narrare cual fue el inicio de que mi matrimonio con Elsa se hiciera muy liberal, es decir yo dejaba que se la cogieran y ella me dejaba coger con otras mujeres o bien hac�amos un tr�o, intercambio de parejas u org�as. Cuando cumplimos 10 a�os de casados y por com�n acuerdo sin hijos, nuestras relaciones sexuales se convirtieron en rutinarias y aburridas; realiz�bamos juegos, fantas�as pero luego ca�amos otra vez en la rutina y el aburrimiento, si quer�amos salvar nuestro matrimonio ten�amos que ir m�s lejos y acordamos que ten�amos que salvarlo a cualquier precio.
Un d�a me llevo a mi trabajo, a la escuela superior de ciencias f�sicas, al bajarme del auto vi que se acercaba una camioneta azul, ella identifico al chofer y dijo �mira es Antonio, un amigo de la preparatoria, tengo a�os sin verlo�, nos despedimos y me encamine a mi oficina, pero antes de tomar el pasillo que me llevar�a a esta, me di cuenta que mi esposa deten�a el auto para platicar con su amigo. Mi sorpresa fue cuando ella estaciono el auto y se subi� a la camioneta y salieron de la zona universitaria; ambos tra�amos las llaves del auto por si alguno de nosotros olvidaba o perd�a las suyas; los segu� de tal manera que no notaran mi presencia, el estaciono su camioneta en la calle y se metieron a un edificio de departamentos, los segu� y vi que se metieron a un departamento en el segundo piso, cuando llegue a este, la ventana que daba al pasillo permit�a ver hacia la recamara, al principio solo ve�a la cama, pero un instante despu�s ambos se dirig�an a la habitaci�n, iban abrazados pero �l le iba acariciando las nalgas encima de su falda, se sentaron sobre la cama d�ndose unos besos de lengua mientras que �l le sobaba las tetas y met�a su otra mano debajo del vestido para manosearle las piernas, el se puso de pie para desvestirse, el cabr�n ten�a una verga grande y gorda, ella se hinco para mam�rsela, se la met�a toda en su boca mientras que le sobaba los huevos, ella lo miraba buscando su aprobaci�n, el muy cabr�n la ten�a agarrada de la cabeza dirigiendo los movimientos de la mamada, me imagino que era muy buena, ya que el no aguanto m�s y le echo la leche en la boca, fue tal la venida que se le sal�a por la boca para llegar a sus tetas, ella no dejo de mamar por lo que la verga segu�a parada, la puso de a perrito y se la meti� de una embestida, sus movimiento eran amplios mi vieja mov�a su culo al ritmo de sus embestidas y con sus manos se ve�a que rasgu�aba la colcha de la cama en se�al de que estaba disfrutando la cogida que le estaba dando, despu�s de un gran un n�mero de embestidas; cambiaron de posici�n, ella se acost� boca arriba y se la metieron de patitas al hombro, no duro mucho ya que se vino de tal forma que cuando se la saco, la leche se le sal�a a mi vieja por el burro, mientras que se arreglaban yo me encamine hacia el auto para llegar antes que ellos a la zona universitaria.
En el camino me encontr� a Saday una exalumna, ten�a mas de 8 a�os sin verla y estaba buen�sima, me ofrec� a llevarla y cuando descendimos del auto mi esposa ya me estaba esperando en el estacionamiento, se ve�a molesta y me dijo muy seria �nos vemos en la casa�.
Cuando llegue a casa por la tarde, me estaba esperando muy enojada, me pregunto sobre la mujer con la que me hab�a visto en la ma�ana, le conteste que hab�a llevado clases conmigo y que tenia ganas de cogermela, as� como tu amigo te cogio.
Al verse descubierta, no supo que decir y con voz temblorosa me pregunto, ' como supiste?', le platique todo lo que vi, al hacerlo la verga se me puso bien parada, ella aprovecho la oportunidad y me llevo a la recamara para tener la mejor fornicada de nuestro matrimonio, cuando terminamos nos pusimos a platicar y encontramos el camino para salvar nuestro matrimonio, �ramos libres de coger con quien quisi�ramos, amigos de mucha confianza o desconocidos, con la condici�n de que el 'infiel' le hiciera saber al otro de la experiencia; pod�amos hacer tr�os, intercambio de parejas, nuestra imaginaci�n marcar�a el camino a seguir.
En la pl�tica, me comento que sus amigas Coco y Esther se sent�an atra�das por m�, yo le platique que Sa�l, mi antiguo jefe, se le quedaba mirando las nalgas con una mirada lujuriosa, imaginando que se la estaba cogiendo y que Rolando, su compa�ero de trabajo le tra�a ganas ya que varias veces lo sorprend� mir�ndole el culo.
Y como era de esperarse, me pregunto por Saday, le conteste que le hab�a dado clases hace 8 a�os y que trabajaba en la zona industrial como ingeniera qu�mica y que si quer�a coger con ella. �pues c�getela aqu� en la casa, mientras yo observo�, me dijo y la propuesta se me hizo muy excitante por lo que provoco que se me parara nuevamente, se puso de perrito y mientras se la met�a yo le dec�a que era Sa�l el que se la estaba cogiendo y que estaba disfrutando de su culo; ella se imagino la escena y le gusto ya que la sent� muy caliente y sus movimientos aumentaban de intensidad hasta que se vino en medio de gritos de placer, yo no pod�a venirme, as� que me imagine que la puta que ten�a mi verga ensartada era Saday y empec� a decir � Saday, estas buen�sima mamacita s�came la leche con tus nalgas�. La imaginaci�n es muy buen aliado en estas situaciones ya que me permiti� chorrearme en el burro de mi vieja como en los primeros d�as de nuestro matrimonio.
Despu�s del relax, suger� que me quer�a coger a Coco pero en un tr�o, ella estuvo de acuerdo y esperamos el momento para llevarlo a cabo.
A mediados del mes de diciembre se llevo a cabo la cena de fin de a�o en la escuela donde trabajan Elsa y Coco, cuando llegamos al casino nos fuimos a una mesa donde estaba Coco, Rolando y Willie otro compa�ero de Elsa, despu�s de los saludos de cortes�a mi esposa se sent� junto a Coco y se pusieron a platicar; cuando empezaron a servir la cena Elsa me dijo �dice Coco que vienes muy guapo, creo que es el momento que est�bamos esperando�, yo asent� pero me preocupaba que los otros 2 se pegaran con nosotros, quer�a que fu�ramos solamente ellas 2 y yo. Invite a Coco a bailar y Willie hizo lo mismo con Elsa, la m�sica era muy suave, por lo que se bailaba muy pegadito y despacio, sent�a las tetas de ella en mi pecho provocando que mi naturaleza reaccionara y haci�ndose sentir sobre mi pantal�n bajo la sorpresa de mi pareja, ve�a que a mi esposa tambi�n la ten�an bien sujeta de la cintura tal vez sintiendo la verga de Willie. Despu�s de bailar y regresar a la mesa, Coco comento que la fiesta estaba muy aburrida, Elsa la invito a que fu�ramos a nuestra casa solo los 3; nos escabullimos de la fiesta sin que los dem�s lo notaran.
Ya en casa, Elsa abri� una botella de vino blanco, mientras yo encend�a el estereo con m�sica suave para bailar con Coco, la ten�a de la cintura para pegarla a mi cuerpo y sintiera nuevamente mi verga bien parada; sub�a y bajaba mi mano por toda su espalda, hasta tocar levemente sus nalgas, sorprendida me miro y me dijo �ah� esta Elsa, nos puede ver�. Lo que ella no sab�a es que nos estaba mirando, eso provoco que yo la acercara m�s a mi cuerpo tom�ndola de su culo, Elsa se acerco a nosotros tomando la cintura de ella sorprendi�ndola y dici�ndole, �disfrutemos el momento�, mi esposa le besaba el cuello, le mord�a las orejas provocando en Coco se calentara, yo aproveche para desabotonar su blusa para que Elsa le quitara el brassiere y sus hermosas tetas quedaran al aire para ser manoseadas, besadas y mordidas por mi, poni�ndola bien mojada; decid� ir a sentarme en el sill�n para observar la escena de mi esposa gozando el cuerpo de otra mujer, ambas quedaron desnudas se besaban, se acariciaban sus pelud�simos panochos, esta escena me puso m�s caliente de lo que andaba, me saque mi grande verga para masturbarme, temiendo venirme, les hable �mujeres, vean lo que tengo para ustedes�, Coco exclamo � b�rbaro, Elsa todo eso te cabe?�, ambas se acercaron, se hincaron y empezaron a mam�rmela, alcanzaba para las 2, Coco era la m�s golosa ya que nunca hab�a tenido una verga tan grande en su boca, Elsa ten�a que quit�rsela para poder mamarla; alguna de ellas pidi� que nos fu�ramos a la cama, ambas me tomaron de la verga y me encaminaron a la recamara, acostamos a Coco y mi esposa y yo empezamos a besar sus tetas al mismo tiempo a la vez que dedeabamos su cl�toris provocando una gran excitaci�n que se manifestaba con una serie de gru�idos y gritos de placer, sus caderas las mov�a de arriba abajo para que le entraran bien nuestros dedos; luego nos fuimos deslizando poco a poco hacia su debajo hasta que nuestras lenguas se encontraron en su vagina, lam�amos sus labios vaginales, su cl�toris mientras Elsa le met�a poco a poco un dedo, luego le meti� 2 hasta llegar a 3 dedos; Coco estaba loca de placer, alzaba la pelvis para que los dedos le entraran mas. �ya no aguanto, meteme tu vergota papacito�, fuimos obedientes, mi esposa se trepo encima de ella tal que su burro le quedara justo en boca de ella y sus tetas frente a mi, le met� mi verga poco a poco hasta que mis huevos sintieran sus nalgas; mis movimientos fueron lentos al principio para que la mamara el burro a Elsa y yo pudiera chuparle las tetas, cuando est�bamos acoplados, mis movimientos crecieron en intensidad, la cabeza de mi verga rozaba con la pared vaginal provocando una sensaci�n riqu�sima que nunca hab�a sentido, si agregamos la emoci�n de mi primer tr�o, todo esto me puso a punto de chorrearme, por lo que detuve la acci�n y les ped� que se hincaran y frente a sus caras me masturbe hasta venirme vaci�ndoles mi leche, les dije �desde ahora son hermanas de leche, pueden compartirme cuando quieran�. Ambas se lamieron la cara para limpiarse la leche y se la tragaban; �acaso ya hab�an tenido alguna relaci�n?, desde que llegamos de la cena ambas actuaban con mucha naturalidad, �realmente Elsa estaba hastiada del sexo conmigo y anduvo buscando nuevas experiencias?; las respuestas las desconozco, pero lo que era cierto es que ambos est�bamos disfrutando estas experiencias por el bien de nuestro matrimonio.
Coco nos sugiri�, en caso de que continu�ramos con estas experiencias, no us�ramos la casa que lo mejor ser�a rentar o comprar un departamento, le hicimos caso y todas nuestras aventuras fueron hechas en un bonito departamento.
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Relato: El inicio
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