Relato: Adoptamos una ni�a China 3
Claudia mi hija, esa ni�a china que hab�amos adoptado con mi mujer, se hab�a convertido en mi amante, a sus 5 a�os hab�a roto su himen, a los 7 le romp� su ano, y le ense�e a chupar mi mi polla, cuando ya estaba a punto de cumplir los 8, bueno, ya no hab�a nada que no hici�ramos con mi hija, su ano ten�a una dilataci�n tremenda ya que ten�amos sexo por el culo todos los d�as, nos practic�bamos sexo oral todos los d�as, ella se corr�a en mi boca y yo en la de ella y nos trag�bamos todo, ella se tragaba toda mi leche y yo todo lo que de su co�o sal�a, de echo la relaci�n con mi mujer hab�a empezado a caer, ya casi no le prestaba atenci�n, mi dedicaci�n era total para mi hija y mi hija era todo conmigo, nos ba��bamos juntos, ten�amos relaciones en la ducha, yo no se si mi mujer se dio cuanta que la ni�a y yo eramos amantes y se hac�a la tonta, o es que ella al darse cuenta que yo casi no le prestaba atenci�n ten�a un amante y no dec�a nada, no nos busc�bamos en la cama y la rara vez que lo hac�amos era eso, un polvo r�pido y ya, yo quer�a mi leche solo para mi hija, a ella se la daba con todo placer, me volv�a loco llenar su co�o, su culo, o sentir como me tragaba la leche, creo que estoy enamorado de mi chinita, de mi hija, aunque suene monstruoso decirlo. Me encanta estar en la cama con mi chinita, ver ese cuerpo de ni�a, desnudo, mirar como se mueve, sentir cuando entro, cuando la follo, como disfruta siendo follada, una ni�a que a los 8 a�os como tiene, ya es toda una mujer, es mi mujer, abrir sus nalgas y ver lo dilatado que tiene el ano, lo abierto que esta, sentir con que facilidad le entra toda por su culo de peque�as nalgas, el suspiro de satisfacci�n que da cuando siente que ya tiene toda la polla dentro de su ojete, me encanta sentarme a ver televisi�n con ella, sentarla en mi polla y mientras miramos, ella tiene mi polla dentro de su culo y mis dedos entran y sales de su siempre mojado co�o, a nada me dice que no, me deja hacerle todo lo que a mi me venga en ganas, mi mujer se va a trabajar y yo quiero estar a solas con mi hija Claudia, hacerle las cosas que se me vengan a la mente, una tarde nos metemos en el ba�o, la recuesto en la ba�era y la empiezo a orinar, su cuerpo, su cara, su boca, ella abr�a su boca para que le orine dentro, despu�s fue mi turno, ella parada con un pie de cada lado de la ba�era me empez� a orinar a mi, yo quer�a que me orine la cara, y mi boca, cuando termino, empec� a chupar su co�o tomando toda el or�n que pod�a, y le terminaba follando el culo como un loco, y siempre la misma respuesta, "si papi, hazme lo que quieras", siempre humilde, siempre complaciente conmigo, en casa siempre est�bamos desnudos los dos, ella siempre ten�a ganas de dejarse hacer conmigo lo que yo quisiera, jam�s se quejo de nada, follamos con mi hija hasta que se queda dormida de cansada, a ella lo que le gusta mucho es que le folle el culo con sus piernas para arriba, le chupe sus peque�os pies y meta mis dedos en su co�o, que despu�s los limpia ella con su boca trag�ndose sus propios jugos y limpiando mi polla con su peque�a boca, una tarde que ven�amos del colegio, le hice que se saque sus bragas y cuando deje el coche en el estacionamiento de casa, me fui al asiento trasero y la folle ah�, en el coche, sal�amos de compras y cuando regres�bamos, me hice chupar la polla en el ascensor, no hab�a lugar donde no lo hici�ramos, ella estaba siempre dispuesta a complacer todo, absolutamente todo lo que quisiera hacer, me complac�a hasta en mis mas bajos instintos, le met�a mis dedos en su culo, y si los sacaba sucio ella me los limpiaba con su boca, al igual que cuando sacaba mi polla sucia de su caca, ella me la limpiaba sin hacer gestos de asco ni nada, "solo quiero verte feliz, papi", me dec�a. Mi mujer llego una tarde y me dijo que nuestro matrimonio ya no funcionaba, que me ten�a que ir de casa, y yo le dije que la que se ten�a que ir era ella, que yo me iba a quedar con la ni�a, que cuando nos divorciemos, yo iba a luchar por la custodia de Claudia, que ya no era mi hija, era mi mujer, era mi chinita consentida, Claudia le dijo a su madre que quer�a quedarse conmigo, que la quer�a mucho pero que a mi me quer�a mas, as� empezaron los problemas legales del divorcio y la custodia de la ni�a, viv�amos en la misma casa pero casi no nos dirig�amos la palabra, y yo siempre defendiendo a mi hija, le dejaba todo a mi mujer, menos a mi hija, a mi mujer , mi hija siempre que est�bamos en el juzgado le dec�a al juez que se quer�a quedar conmigo, hasta que mi ex mujer se dio por vencida y se fue a casa de sus padres, dej�ndonos solos a mi hija y a mi, una tarde de s�bado est�bamos en la cama mi hija y yo despu�s de haber echo el amor, "papi, cuando podr� tener un hijo tuyo?", me dijo mi hija besando mis labios, y se que cuando pueda le voy a hacer un hijo, estoy perdido, pero no me importa, esa chinita es solo m�a.