Como un inocente viaje se transforma en una experiencia
perdurable entre madre e hijo.

Partimos en cazadora desde el interior, nuestra meta ir a la
capital a efectuar compras y hacer algunas diligencias. Yo, siempre estuve muy
apegado a mi madre, ella era para m� un personaje especial, su negro pelo su
blanco rostro, como la nieve y sus rasgados y almendrados ojos negros, unidos a
sus rojos y carnosos labios, con sus senos que se ergu�an provocadores tras de
su blusa la convert�an en una imagen atractiva, esto ocurri� a mi tierna edad de
13 a�os y ella 38.

Luego de arribar a San Jos�, en un viaje de cuatro horas, mi
madre busc� un hotel en el que alquilamos una habitaci�n para pasar la noche ya
que su intenci�n era hacer todas las diligencias al d�a siguiente y pernoctar
una o dos noches en la ciudad antes de viajar de regreso.

Recuerdo que estaba anocheciendo decidimos descansar en el
hotel y al siguiente d�a realizar todas las diligencias posibles.

Que bonito cuarto mema,

Si hijo es peque�o, pero acogedor

Tiene dos camas separadas le dije

Bueno, pero si te gusta m�s las podemos juntar

Yo, no contest�.

Vamos a cenar, ya son las siete y si no bajamos al comedor

Nos quedaremos sin comida

Esta bien mam�, el viaje me ha dado hambre

Bajamos al comedor, recuerdo que nos sirven sopa de fideos,
tamales y caf�.

Comimos no sin comentar lo cansado del viaje, pero lo
pintoresco del paisaje

Las monta�as, los verdes campos llenos de cultivo y ganado,
as� como las flores que brindaban sus vistosos colores al paisaje premiaron
generosamente el agotador traslado.

De nuevo en la habitaci�n, entramos y cerramos con llave

Voy a tomar un ba�o, dijo mam�

Mientras si t� quieres acu�state a dormir

Ella, entro abri� la ducha

Yo pod�a o�r el tintinear del agua en la ba�era

Me sonaba a cascada de aquellas monta�as, que pasamos por la
ma�ana al atravesar la cordillera.

Escucho, el agua, pienso en que mam� estar� desnuda, y
enjabonando todos sus secretos lugares, de repente el agua cesa de o�rse, a los
pocos minutos se abre la puerta y sorpresa, veo el hermoso y provocativo cuerpo
de mi madre desnudo, y al verme dice, sierra los ojos, te cre�a ya dormido

Si, mam�, pero se me quit� el sue�o

Estaba pensando en que

en que mi ni�o

en ti, mam� tienes un cuerpo muy bonito

Te dije que no mires, mientras me pongo mi camisa de dormir

mam�, yo quiero

dormir en tu cama

As�, como lo haces con pap�

sabes en estos sitios, me da miedo dormir solo,

pero si estas conmigo, no pero contigo a mi lado,

los dos juntos

bueno, pero estas camas son un poco peque�as

no importa yo me arrimar� a ti para no caerme dormido

bueno, acu�state

dicho esto salt� r�pidamente a la cama

y luego sent� como mam� se acostaba a mi lado

As� mam�, los dos parecemos novios

si, pero somos mam� e hijo

bueno, bueno, no te enfades

no, no me enfado

Hace calor, en la habitaci�n, no ten�amos ventilador, y solo
una ventana por la que entraba el aire de la noche.

Mam� se acuesta y sobre las sabanas queda tranquila, pero su
dormilona se le sube traviesa mente dejando a mi vista sus muslos hasta donde
empieza su negro sexo cubierto por una espesa y negra selva abundante, su
respiraci�n, hace subir y bajar sus pechos levemente cubiertos por la enagua,
que deja traslucir sus formas voluptuosas y esf�ricas. T�midamente veo que esa
visi�n me ha provocado una mortal excitaci�n por mi madre y decidido avanzo mi
mano hasta ponerla precisamente en ese sitio por donde yo naciera. Al tocar la
abundante y mullida alfombra de pelos que lo cubren, mam�, parece no hacer nada,
ser� que no lo nota o estar� dormida, animado con mi �xito inicial empiezo a
explorar con mi mano el sexo de mi madre y noto una ranura alargada, suave, y
h�meda que est� coronada por una peque�a y gorda carnosidad, como un pene
peque�ito de beb�. Empiezo a meter mis dedos, avanzo los muevo muy suavemente y
noto que mam� sigue dormida, sigo adelante introduzco mis dos dedos todo lo que
puedo y� de repente:

Ah, ah, uuuh, que es lo que haces

Nada, m�s que jugar con tu cosita

Pero no, no esta bien que tu me hagas esto

Soy tu mam� y, ay, no, no sigas, para ya,

No, no, mam� tu y yo solos podemos jugar entre los dos

A pap� y mam�, que mejor momento que este,

No te gusta, ooh, ay, pero que sin si creo que me gusta

Me calientas, y me excita tu mano dentro de mi sexo

no se pero me gusta tu lo haces bien hijo

As�, as�, sigue que estoy caliente,

Mam� te quiero mucho t� y yo vamos a ser felices esta noche

Si hijo, este ser� nuestro secreto para siempre diciendo esto
abre sus piernas y me dice

Ven agarra a mam� entra en mis piernas hijo as�.

La tienes dura y fuerte, te la siento caliente

Quieres t�mame y penetra a tu madre hazla gozar

Quiero venirme de placer contigo y sentir tu leche nueva
entrar en m� sexo

Quiero ba�ar tu pene con mi ag�ita caliente

Tom� mi miembro y con gran experiencia, lo coloca en todo el
medio de su maravillosa gruta encantada, siento los pelos cosquillear la punta
desnuda de mi pene, y siento la h�meda y caliente suavidad exterior de sus
labios sexuales.

Ahora hijo, empuja con todo

Penetra, con tu barrena a tu madre

Ay, ay, sigue, quiero m�s

Empujo, entonces con toda mi fuerza y enseguida la siento
todo mi pene dentro de ella

Hay, mami, siento el calor de las paredes de tu sexo

Est�n ardiendo, suavecitas y resbalosas

Hay, hay, hay, late dentro de m� sexo, te siento como late

Mam�, que rico te mueves, siento como si tu sexo me la
chupase, y me pones loco

Mu�vete as�, s�cala y cl�vame duro hay, as� as�, ya me tienes
cogida soy tuya

Sigue, nene, r�pido m�s r�pido,

yo estaba loco de emoci�n al ver lo caliente y emotiva que mi
mam� estaba, la ten�a pose�da debajo de m� y yo dentro de ella, y adem�s
pensando lo que estaba disfrutando con mi miembro dentro del orificio por donde
sal� a dar mi primer grito de vida. Esto �nicamente se puede sentir penetrando y
realizando el acto sexual con su madre.

Me coloqu� entre los muslos de mi madre, blancos como la
leche, adelant� mi cara. Introduje la lengua entre los labios de su roja grieta,
la muevo en torno al endurecido cl�toris le produzco un cosquilleo tan
exquisito, que mam� dif�cilmente pod�a contener sus gritos,

oh, Dios m�o que me haces, me chupas la vida oh estoy, voy a
venirme me vengo, empuj� fuerte su sexo contra mi. Activa lengua, se vino
abundantemente y lo recib� lo m�s que pude en mi boca con gran deleite.

Mi pene, estaba nuevamente erecto estaba en terrible
excitaci�n, viendo a mi madre dispuesta y desnuda a�n con las piernas abiertas
en la cama destac�ndose su tois�n negro que coronaba entre sus piernas el sexo,

ahora tengo que penetrarte le dije te deseo, te necesito para
calmar mi excitaci�n, te voy a penetrar contempl� un instante su cuerpo
palpitante por el deseo a�n me arroj� entre sus piernas, ella bajo su mano y
gui� mi pene a su grieta, te lo clavar� hasta los test�culos, le dije

La caliente cabeza de mi miembro estaba abri�ndose paso a
trav�s de los h�medos labios de su rosada rendija, el cuerpo de mam� con sus
suaves piernas entrelazadas en mi espalda recib�a mis caricias y ella daba
comienza a sus lascivos movimientos hasta terminar por corredse con estas
palabras:

Oh Dios m�o como me penetras,

Me est�s descuartizando

No puedo aguantare m�s tus embestidas oh s�calo ya, ya, que
embestida me das

Ay que empujones ay no puedo soportar m�s, no puedo,

Empuj� sin piedad dos o tres veces

Mam�, parece que me est�s sorbiendo la pipa,

Ella empujaba, empujaba al mismo tiempo que se contorsionaba
alrededor de mi pene con su sexo,

Ahora por fin te estoy cojiendo madre,

J�deme, respondi� mi madre abri�ndose m�s todav�a

J�deme bien, m�s duro

Y con un hondo gemido de placer inund� todo mi pene, con una
abundante lluvia de placer, proveniente de sus entra�as, al mismo tiempo que
arqueaba su cuerpo, para recibir mi formidable embestida,

Las piernas de mam�, se flexionaron espasm�dicamente, y se
mezclaron con algunos suspiros,

Te voy a echar toda mi leche, toda

Oh que placer, toma mi leche

Toda dentro de tu ardiente sexo madre

Toma mi leche, es tuya, te amo.

Hijo, me enloqueces, me partiste en dos

Soy tuya, toda tuya, me penetrantes

Con tu pene por el camino que saliste

Y me inundas con tu leche mi gruta

Que dichosa estoy de hacer esto contigo