Relato: La Pasion en el Futbol (6)





Relato: La Pasion en el Futbol (6)


Capitulo Seis


El Reparto de habitaciones




Tanto Ra�l como Vicente permanecieron durante varios segundos
mudos de la impresi�n y sin poder apartar la mirada del otro, ninguno de los dos
se atrev�a a romper el hielo, pero tampoco se mov�an de ese rinc�n.



La mirada de Vicente reflejaba mucho desconcierto pero
tambi�n sus ojos mostraban un brillo de deseo mezclado con lujuria producto de
toda la pasi�n que minutos atr�s hab�a presenciado a trav�s de dos de sus
compa�eros de la Selecci�n. Mientras que a pesar de que la mirada del capit�n de
la Selecci�n Espa�ola mostraba mucha sorpresa, el brillo de sus grandes ojos
reflejaban una enorme satisfacci�n por todo lo que hab�a disfrutado minutos
atr�s.



Vicente dej�ndose llevar por sus impulsos y cautivado por la
mirada morbosa de su compa�ero, coloco sus rojos labios sobre la boca de Ra�l y
comenz� a moverlos sobre aquellos labios gruesos y sensuales, Ra�l permaneci�
inm�vil sin saber que hacer.



Ra�l a pesar de sentirse tremendamente sorprendido y
confundido por esta situaci�n comenz� a entregarse al beso que tan
apasionadamente le propiciaba Vicente, quien con sus manos comenzaba a recorrer
el delgado y fibroso cuerpo de compa�ero y capit�n.



A pesar de que fue Vicente quien tomo la iniciativa
sorprendiendo a su compa�ero y as� mismo, Ra�l de inmediato tomo el control del
beso y haciendo gala de toda su experiencia, comenz� a llevar a Vicente a su
antojo.



Ra�l comenz� a deslizar sus manos por el tambi�n delgado
cuerpo de Vicente, comenzando por su bien formada espalda, mientras una de esas
manos se deslizaba por toda su columna vertebral para posarse en el trasero del
valenciano.



De pronto Vicente sufri� un sobresalto cuando sinti� que una
mano de Ra�l se posaba sobre su semirrecta verga y separando sus labios de la
boca del anfitri�n, emiti� un peque�o gemido, mismo que fue reprimido por los
labios de Ra�l que se apoderaron nuevamente de la boca de Vicente.



Por su parte Ra�l manten�a sujetada fuertemente la verga de
Vicente a�n dentro de su pantal�n, cuando de pronto escucharon que alguien
intentaba abrir la puerta y de inmediato se separaron intentando acomodar su
ropa. Despu�s de unos segundos, la puerta se abri� y apareci� la esposa de Ra�l.





�D�nde andas mi amor? �Te distes cuenta que la llave esta
tirada afuera? �dijo la esposa de Ra�l, percat�ndose de que ah� estaba
tambi�n Vicente


Claro que me di cuenta, por esa raz�n no pod�amos salir y
ya �bamos a dar la vuelta para salir por el otro lado.


Bueno, ap�rate que ya se esta comenzando a servir la
comida y el anfitri�n no aparece por ning�n lado-contesto la esposa de Ra�l


Si lo se por eso vine por este jovencito que no puede
estar lejos de una computadora �verdad Vicente? �le interrogo Ra�l


As� es � la computadora ya se volvi� un vicio para m� �
si no fuera futbolista de seguro me hubiera dedicado a programar sistemas o
algo as� �dijo Vicente mientras los tres caminaban y se envolv�a en el
ambiente de la fiesta.





De inmediato Vicente se separo de la pareja anfitriona y se
fue a sentar a su mesa, donde se encontraban Xabi Alonso e Iker Casillas
platicando tan animadamente y para no interrumpir su conversaci�n opto por
sentarse a�n lado del portero Casillas, pero al escuchar que hablaban de
computadoras se incorporo de inmediato a la pl�tica, era su tema favorito.



Por su parte Ra�l llego a la mesa principal con su esposa
donde estaban: Fernando Morientes con su esposa y el entrenador I�aki S�ez
tambi�n con su esposa. Ra�l quedo sentado en medio de Morientes y del
entrenador, apenas se sent� se dirigi� hacia Morientes:





Vicente nos vio� vio todo lo que hicimos �dijo Ra�l a
Fernando en su o�do


�Queeeeeee�? �totalmente sorprendido sin poder disimular
su asombro, tanto que todo los comensales sentados en la mesa de inmediato
se percataron de su actitud. Fernando se puso rojo y muy nervioso


�Qu� sucede? � casi dijeron al mismo tiempo la esposa de
Fernando, de Ra�l y el propio entrenador.





Por un momento tanto Ra�l y Fernando se quedaron sin saber
que decir para salir de esta situaci�n y fue el entrenador quien tuvo que salir
al rescate de sus disc�pulos:





Ahh� el Moro se acaba de enterar que por unas horas nos
quedamos sin sede de concentraci�n en Portugal �explicaba el entrenador a
las esposas � y es que el hotel que ten�amos contratado nos cancelo de
�ltima hora� pero afortunadamente ya tenemos un lugar nuevo y seg�n dicen
los de log�stica esta mucho mejor que el anterior.


As� es� eso mismo le estaba diciendo a mi compadre �dijo
Ra�l en medio de risas disminuyendo la presi�n �pero como luego se precipito
no tuve tiempo de terminar de contarle todo.


Si� que me lograste espantarme �dijo el Moro tambi�n
intentando re�rse para olvidar lo que Ra�l le hab�a revelado, sin poder
evitar sentirse incomodo ante esta situaci�n, por esa raz�n siempre trataba
de ser cuidado y responsable con sus nuevas tendencias homosexuales.





Comenzaron a servir la comida y todo transcurr�a con
normalidad, durante este tiempo Ra�l por fin hab�a logrado olvidar a los dos
jovencitos (Marco y Alejandro) que se encontraban en otra mesa a unos cuantos
pasos y es que con todo lo que hab�a sucedido su excitaci�n, al menos, hab�a
disminuido considerablemente y comenz� a sentirse mas relajado, no as� Fernando
Morientes quien se sent�a confundido y muy apenado sobretodo porque lograba
sentir las miradas insistentes de Vicente.



Mientras que todos los integrantes de la Selecci�n Espa�ola
disfrutaban de los deliciosos platillos que formaban el men� dise�ado por la
Familia Gonz�lez, Marco y Alejandro platicaban ya como dos viejos amigos:





Entonces el que mas te gusta de todos los que est�n aqu�
es Ra�l �verdad? �pregunt� Alejandro


Si� as� es� -dijo Marco comprobando que nadie los
estuviera escuchando - �es muy obvio?


Mmm� un poco� la manera como lo miras� pero no te
preocupes que solo es det�ctale por quienes tenemos las mismas preferencias
�le dijo Alejandro


O sea que aqu� nadie se dio cuenta �dijo Marco
sinti�ndose m�s tranquilo


Eso crees t� �contest� Alejandro en forma sarc�stica


�Qu� quieres decir? �pregunt� Marco intrigado


Bueno� como te lo explico� �a poco nunca te has
cuestionado las preferencias sexuales de tus jugadores o artistas favoritos?
�pregunt� Alejandro logrando interesar a Marco con su platica


Mmm� creo que no� -contest� Marco


Creo que eres muy inocente todav�a y eso me agrada mucho
de ti �le dijo Alejandro mientras jugaba con su boca con el popote de su
refresco, provocando que Marco se sonrojara.


Entonces �t� crees que alguno de los jugadores que esta
aqu� es gay? �pregunt� Marco despu�s de haber superado el comentario
anterior de Alejandro


No necesariamente �dijo Alejandro


�C�mo esta eso? �contest� nuevamente intrigado Marco


Tengo una teor�a respecto a esta situaci�n �le dijo
Alejandro


�Una teor�a? �pregunt� Marco en un tono un tanto burl�n
ante la respuesta de Alejandro


�La quieres o�r o no? �Alejandro con un toque de seriedad


Si, claro� me tienes muy intrigado con tu platica �dijo
Marco


Jijiji� yo creo que un jugador al verse rodeado de tantos
compa�eros con todo tipo de cuerpos poco a poco logran adquirir una especie
de admiraci�n ante la perfecci�n de todos esos cuerpos que los rodean d�a a
d�a, algunos solo observan y admiran pero muchos de ellos van m�s all� de
solo miradas, se atreven a comparar, tocar, acariciar y eso tu lo puedes
comprobar al momento de los festejos cuando meten un gol �si lo has notado
no? �dec�a Alejandro convencido


Si, de repente se ve cada festejo �contest� Marco
siguiendo muy atento la teor�a de Alejandro, que adem�s comenzaba a
cautivarle su belleza f�sica


Bueno� pero muchos de ellos dan un paso m�s grande� y
supongo que para algunos es dif�cil al principio� se atreven a tener
relacione sexuales con alguien que les guste o que sepan que sean gays�
porque as� como existen gays en la escuela, el trabajo o en la colonia y en
todos lados, no tiene de raro encontrarse con gays en el ambiente
futbol�stico.


Mmm o sea que tu piensas que hay jugadores que est�n
casados y que tienen una familia o relaci�n estable y adem�s les guste tener
sexo con hombres �dijo Marco tratando de entender la l�gica de su
interlocutor


Si, as� es �contesto Alejandro seguro de lo que hablaba


Mmm �Marco meditaba en silencio no muy convencido de la
teor�a de su amigo, a lo lejos alcanzaba ver a Ra�l y se preguntaba si el
podr�a ser uno de aquellos jugadores que le gustaba tener relaciones con
otros hombres y de repente Alejandro lo saco de sus pensamientos


Te voy a poner un ejemplo para que te termines de
convencer� como sabes Iv�n Helguera es novio y futuro esposo de mi hermana�
yo tengo la sospecha de que tambi�n le gustan los hombres �dijo Alejandro
bajo el tono de su voz


�Por qu� lo sospechas? �pregunto Marco


Porque siempre que coincidimos en mi casa o en alg�n otro
lugar, se deshace en atenciones a mi� -dec�a Alejandro


Bueno eso no tiene nada de sospechoso, simplemente se
quiere ganar a la familia de su novia �no? �contesto Marco


Si� pero con mi otra hermana no es as�, adem�s esta la
manera como me ve� hay veces que siento que me quisiera comer con su mirada�
no se pero tengo el presentimiento y es una teor�a que me gustar�a averiguar
pronto� jijiji �dijo Alejandro


�Te gusta tu cu�ado? �dijo Marco


Mmm� no es precisamente mi tipo favorito pero si me
gustar�a pasar un buen rato con el� a mi el que mas me gusta de todos es
David Beckham, a quien por cierto espero pronto tener la oportunidad de
conocerlo en persona, mi cu�ado me ha prometido que presentarme en cuanto
inicia la nueva temporada de f�tbol �dijo Alejandro ilusionado


��rale� que padre! �contest� Marco � a m� Beckham tambi�n
me gusta mucho





El resto de la jornada transcurri� sin ning�n incidente y
todo en calma y armon�a, se hab�a logrado el objetivo del entrenador: la
integraci�n de los seleccionados nacionales. Apenas terminaron de comer la
mayor�a, tanto Ra�l, como el anfitri�n y capital del equipo, y el entrenador
dirigieron unos breves mensajes a toda la concurrencia y la m�sica para bailar
comenz�.



Ra�l continuaba recorriendo cada una de las mesas para
asegurarse de que estuvieran bien y de pronto se tuvo que topar nuevamente con
Marco y al verlo su rostro cambio de inmediato, realmente el chico le encantaba
y no pod�a evitar emocionarse.





�C�mo la est�n pasando chicos? �pregunt� Ra�l al acercase
a Marco y Alejandro, quienes se encontraban de pie un poco alejados del
ruido y de la gente


Nosotros muy bien... �verdad Marco? �contest� de
inmediato Alejandro, quien era el mas aventado de los dos.


Si... as� es.. gracias... Ra�l... por haberme invitado...
�dijo Marco t�midamente


Me da mucho que te hayas divertido... �dec�a Ra�l al
tiempo de que pasaba una de sus manos por su delgada espalda provocando en
Marco un estremecimiento por todo su cuerpo


Adem�s de que todo estuvo muy rico... la verdad el
ambiente esta muy padre, la m�sica... en fin todo �dec�a Alejandro
percat�ndose de lo que sent�a Marco por Ra�l





Y Ra�l no pod�a evitar sentirse nuevamente excitado ante
estos dos hermoso j�venes, se los imaginaba desnudos y su morbo crec�a m�s y
para evitar alg�n contratiempo decido marcharse.





Bueno, cualquier cosa que se les ofrezca... solo
b�squenme �dec�a Ra�l con la intenci�n de marcharse porque no pod�a seguir
ocultando su erecci�n.


Oye... si hay algo que Marco te quiere pedir... �dijo
Alejandro de improviso


Si... dime Marco, �en que te puedo ayudar? �dijo Ra�l
mirando fijamente a los ojos a Marco, quien no pudo sostener su mirada tan
profunda y directa y sus ojos se dirigieron Alejandro para reclamarle por
esta situaci�n.


Bueno.... es que le da mucha pena ped�rtelo...�verdad
Marco? �dec�a Alejandro forzando la situaci�n


Anda... Marco.. dime de que se trata... �dijo Ra�l
colocando nuevamente una de sus manos sobre el cuerpo de Marco, ahora sobre
un hombro y es que a Ra�l le encantaba el contacto con su piel, de alguna
forma de sent�a recompensado.


No... yo... no �era lo �nico que sal�a de los labios de
Marco, encontr�ndose profundamente perturbado


Esta bien yo se lo pedir� por ti... mira Ra�l lo que pasa
es que Marco se muere por una playera tuya ... �dijo Alejandro y que fue
bruscamente interrumpido por Ra�l, quien a pesar de que los dos j�venes lo
excitaban no pod�a ocultar su preferencia por Marco


Ahh... �eso era todo Marco? No te preocupes ahora mismo
voy por ella y te la traigo �dec�a Ra�l sin parar de acariciarle el hombro
al t�mido Marco.


Pero �interrumpi� ahora Alejandro � Marco quiere una
playera tuya de la Selecci�n Nacional, pero una que uses en la Eurocopa





Marco se puso completamente rojo de la verg�enza, no pod�a
creer como Alejandro se hab�a atrevido a tanto.





Claro que si... �dijo Ra�l, un poco sacado de onda � es
m�s la primera playera que utilice en el torno ser� para ti.


Gracias... �Ra�l dijo Marco apenado


Nada m�s la lavo y la guardo y cuando regrese del torneo
te busco en tu casa para llev�rtela personalmente Ok? �dijo Ra�l


Esta bien... �segu�a Marco apenado


Mmm pero... �dijo Alejandro


�Qu� pasa? -pregunt� Ra�l intrigado


Lo que pasa es que Marco quiere la playera sin lavar...
me refiero a que la quiere con tu sudor





Esta respuesta adem�s de que sorprendido considerablemente a
Ra�l tambi�n se sinti� invadido por el morbo y la excitaci�n y perturbado
contest�:





Esta bien, no hay problema... te guardo la playera �dijo
Ra�l


Entonces nosotros te estaremos esperando a tu regreso...
�dijo Alejandro con una sonrisa llena de picard�a.


Gracias... �dijo Marco




Ra�l se retiro un poco sorprendido por la actitud de los dos
jovencitos, por una parte le encantaba la timidez e inocencia de Marco y por
otra parte el atrevimiento y desfachatez de Alejandro le excitaban tremendamente
y en esos pensamientos profundos se encontraba cuando fue interrumpido por el
entrenador de la Selecci�n para despedirse.



La fiesta transcurri� sin ning�n otro incidente. Ra�l segu�a
pensando en los j�venes, Fernando Morientes preocupado por el incidente con
Vicente y mientras este confirmaba m�s sus nuevas preferencias sexuales al
sentirse fuertemente atra�do por sus compa�eros de la Selecci�n.




Dos d�as despu�s



La concentraci�n de los convocados iniciaba al medio d�a y
todos, con excepci�n de Ra�l y Morientes, se encontraban ya reunidos en uno de
los salones que ten�a el hotel que fue cerrado exclusivamente para recibir a la
Selecci�n Espa�ola. Mientras esperaban su llegada, los convocados platicaban y
comentaban sobre la fiesta que dos d�as antes hab�an tenido en casa de Ra�l.



Vicente se encontraba muy animado y despejado, quien a pesar
de encontrarse a�n lleno de miedos y deseos frustrados hab�a decidido mantenerse
muy relajado. Por su parte, Iker Casillas se encontraba demasiado entusiasmado,
hab�a decidido divertirse y sacarle mucho provecho a cada uno de los d�as que
durara su participaci�n dentro de este gran torno Europeo. Xabi Alonso tambi�n
se sent�a muy contento, como todos sus compa�eros, y uno de sus objetivos era
probar el culo de Casillas, a quien segu�a con la mirada a todos lados donde el
joven portero se dirig�a. Cuando todos se encontraban platicando o sumidos en
sus pensamientos, el capit�n de la Selecci�n entr� junto con su amante y amigo
Fernando Morientes pidiendo disculpas por su retraso .



De inmediato el entrenador y el capit�n se subieron a la
mampara para tomar el control de la reuni�n y el entrenador fue el primer en
tomar la palabra:





Me da gusto verlos a todos... Buenas Tardes... el motivo
de esta reuni�n es primero para felicitarlos a todos ustedes porque el d�a
de hoy inicia una nueva oportunidad de hacer algo por nuestro pa�s y de
todos los posibles candidatos para hacer historia, solo ustedes fueron los
elegidos por lo Dioses, (risas) as� que no la desaprovechen y vamos por
todo. �dijo el entrenador y despu�s se escucharon fuertes aplausos y
palabras de todos los convocados.


Buenas tardes... disculpen la tardanza pero tuve un
peque�o inconveniente ante de llegar... �dijo Ra�l mirando a los ojos a
Fernando Morientes al terminar de decir esas palabras -y bueno como dijo el
master hoy tenemos una oportunidad y vamos aprovecharla. Bueno siguiendo con
la pol�tica del mister y con el objetivo de integrarnos mejor como
compa�eros de un mismo equipo, hemos decidido junto con el entrenador que
por esta vez el reparto de habitaciones ser� de manera aleatoria, es decir a
la suerte, de tal manera que nuestro compa�ero de cuarto ser� alguien con el
que regularmente no tenemos mucha convivencia, de tal manera que con esto se
podamos conocernos mejor y as� rendir como un equipo perfectamente integrado
�termino Ra�l de pronto por todo la habitaci�n se comenz� a escuchar muchas
murmuraciones y comentarios, algunos conformes y otros no tanto.


Silencio por favor... �dijo el entrenador tomando la
palabra � aqu� ya tengo en este botecito los nombres de cada uno de ustedes,
yo sacare un papel y Ra�l el otro, si salen los compa�eros del mismo equipo
los volveremos a meter al botecito.





Entonces el entrenador meti� su mano y el primer nombre que
sale es de: IVAN HELGUERA y Ra�l toma el papel y saca el nombre de XABI ALONSO y
las parejas se van formando de la siguiente manera:



HABITACI�N UNO: IVAN HELGUERA � XABI ALONSO


Xabi Alonso no pudo ocultar su frustraci�n cuando escucho su
nombre junto con el de Iv�n Helguera, hubiera querido que su compa�ero fuera
Iker Casillas, ya que de esa manera su tarea de conquistarlo ser�a mas f�cil,
pero a�n as� no desisti� en su objetivo.


HABITACI�N DOS: IKER CASILLAS � VICENTE RODRIGUEZ


Vicente por un momento se sinti� un poco preocupado pero al
final se alegro que su compa�ero fuera alguien tan agradable como Iker, quien
por su parte le fascino la idea, ya que le parec�a que aunque Vicente no era muy
guapo, si le parec�a muy varonil.


HABITACI�N TRES: RUBEN BARAJA � FERNANDO TORRES


Cuando Ra�l tomo el papel que le correspond�a, al abrirlo se
percat� que el nombre era Fernando Morientes, pero inmediatamente su papel lo
volvi� a doblar y dijo que el mister se hab�a colocado un papel en blanco e hizo
como si lo volviera a meter al botecito cuando en realidad se quedo con el
ocult�ndolo entre sus dedos y tomo un segundo papel que pertenec�a a Fernando
Torres.


HABITACI�N CUATRO: ALBERT LUQUE � CARLOS PUYOL


HABITRACI�N CINCO: SANTIAGO CA�IZARES � JOAN CAPDEVILA


HABITACI�N SEIS: CARLOS MARCHENA � RA�L BRAVO


Varias veces Ra�l sacaba su propio nombre y lo ten�a que
volver a meter porque al �nico compa�ero que aceptar�a ser�a a su amigo Fernando
Morientes y entonces como ve�a que la situaci�n le pod�a no favorecer, se dio
cuenta que ten�a que provocar la habitaci�n triple de una vez, antes de que su
nombre volviera a salir y todos aceptaron sin chistar.










HABITACI�N SIETE: JOSEBA ETXEBERRIA � JOAQUIN
S�NCHEZ � JUANITO GUTIERRES










HABITACI�N OCHO: DAVID ALBELDA � CESAR MART�N


HABITACI�N NUEVE: GARC�A GABRI � DANIEL ARANZUBIA










HABITACI�N DIEZ: XABI HERN�NDEZ � JUAN CARLOS
VALERON











Y por �ltimo el entrenador saco el �ltimo papel perteneciente
a Ra�l y este tuvo que hacer la finta de meter su mano, cuando realmente el
papel ya lo tra�a entre su dedos y dijo:





Bueno el �ltimo papel pertenece a �dec�a Ra�l seguro de
si mismo y con toda la tranquilidad �Fernando Morientes.





De inmediato algunos comenzaron a emitir algunas quejas y
silbidos de inconformidad y algunos no mostraban mucha atenci�n, ya que conoc�an
la intenci�n de Ra�l y les era indiferente. Por su parte Fernando Morientes se
mostraba muy avergonzado por la situaci�n provocada por su amante Ra�l y m�s a�n
con el comentario de Iker Casillas, que se encontraba a su lado:





(Risas) Por lo visto no te quiere soltar para nada
�verdad? �dijo Iker Casillas en voz baja a Fernando, quien no tuve nada que
decir y solo emiti� algunas risas





Como varios comenzaron a reclamarle al entrenador por la
trampa de Ra�l, inmediatamente el entrenado, solapando a su capit�n, termino por
convencer a los inconformes y todo termino ah� sin mas problemas, quedando Ra�l
totalmente satisfecho de haber hecho voluntad.



Sin estar totalmente de acuerdo con la designaci�n de las
habitaciones, cada uno de los convocados comenzaron a retirarse a sus
habitaciones con el entendimiento de que el entrenador hab�a programado una
comida de bienvenida en punto de las tres de la tarde.



Ra�l satisfecho por su triunfo se acerco a Fernando
Morientes, quien se encontraba a�n confundido por su actitud:





Vamos a la habitaci�n �dijo Ra�l con su cara de
satisfacci�n


A�n no puedo creer lo que acaba de pasar �dijo Morientes


No te preocupes... no paso nada... solo que no iba a
permitir que te quedaras en otra habitaci�n... quiero disfrutarte todo el
tiempo posible �dijo Ra�l con una voz muy sensual


Esta bien... yo tambi�n quiero estar contigo �dijo
Fernando Morientes al escuchar el tono de voz de su amado compa�ero � pero
al menos hubieras sido mas discreto adem�s si me hubiera quedado en otra
habitaci�n de todas maneras �bamos a encontrar la manera de estar juntos.
Porque con lo que acaba de suceder hacemos mas evidente nuestra relaci�n y
ganamos mas enemistades


Tranquilo, mi amor �dijo Ra�l �lo �nico bueno es que
estaremos juntos y es lo �nico que ahora debe de importarnos.





Apenas entraron a su habitaci�n y de inmediato Ra�l se lanzo
sobre Fernando Morientes llen�ndolo de besos, recorriendo sus mejillas rasposas
por su barba media crecida, sus labios y para bajar poco a poco por su cuello,
por su parte Fernando permanec�a quieto disfrutando de las caricias y besos.



Ra�l se desprendi� del cuerpo de Morientes, quien ya
comenzaba a sentir excitado, para comenzar acomodar toda la ropa que tra�an en
sus maletas. Pero Ra�l deseoso de mantener excitado a Fernando y consciente del
poder sexual que en �l despertaba, lentamente comenz� a desnudarse: primero se
quito los zapatos y de inmediato su pantal�n, dejando al descubierto sus
delgados piernas y su delicioso trasero, ese rico trasero que tanta veces ha
usado su amado Morientes.



Entonces Ra�l continuaba acomodando su ropa dentro de los
cajones del ropero, caminando de un lado a otro con mucha seguridad, mientras
Fernando permanec�a sentado en una cama sin poder apartar sus ojos de su cuerpo
y con total indiferencia (todo parte de su juego sensual) pregunto:





Y tu �a que horas vas a acomodar tus cosas? �dijo Ra�l
sin siquiera mirar a Fernando


Este... si en un momento comienzo... estoy... �dec�a
Fernando visiblemente excitado, le encantaba la manera tan natural y coqueta
de su amado Ra�l


Ok. Como tu quieras... �dijo Ra�l entrando al ba�o para
dejar ah� sus utensilios cosm�ticos





Cuando Ra�l sali� del ba�o lo hizo ahora con su abdomen
totalmente desnudo, ahora solo llevaba puesto solo su b�xer negro ajustado
dejando al descubierto todo su delgado y fibroso cuerpo y de inmediato los ojos
de Fernando se fueron a clavar en su parado trasero y mientras una de sus manos
comenzaba acariciar su miembro por encima de su pantal�n.



Ra�l disfrutaba provocando a Morientes y por eso en varias
ocasiones dejaba caer alg�n objeto de sus manos con el fin de inclinarse a
recogerlo y de esa manera mostrar su trasero. En la �ltima ocasi�n, Ra�l dejo
caer otro objeto precisamente frente a Fernando, de tal manera que cuando se
agacho su trasero quedo a escasos cent�metros del rostro de Morientes, quien sin
poder seguir aguantando su excitaci�n reacciono ante tantas insistencias
provocativas.



Entonces Fernando Morientes totalmente excitado toma
fuertemente con sus dos manos la cadera de Ra�l para acercarlo a su rostro:





Espera... que haces... �dec�a Ra�l con un tono totalmente
meloso e intentando fingir indiferencia ante lo que deseaba desde hace un
rato �tengo que terminar de acomodar las cosas


�No era eso lo que quer�as? �dijo Fernando mientras que
con sus manos bajaba fuertemente el b�xer hasta abajo dejando al descubierto
las morenas nalgas de Ra�l


Ahh... �por qu� ... piensas eso? �suspiro Ra�l al sentir
como salvajemente Fernando lo desprend�a de su ropa interior y sobre todo al
sentir como sus fuertes y �speras manos le acariciaban el trasero
desesperadamente.


Mmm... mira que par de nalgas... tan ricas... �dec�a
Morientes mientras las acariciaba �tienes amor... �quieres que me las coma?


Ahh... mmm... si... pru�balas... son tuyas papi... �dec�a
Ra�l inclinando su cuerpo hacia delante con la finalidad de facilitarle mas
la tarea a su amante





Entonces Fernando Morientes con sus dos manos abri� las
nalgas para dejar al descubierto el culo moreno y rasurado de Ra�l y de
inmediato dirigi� sus labios hacia una de las nalgas para llenarla de besos. As�
como Ra�l estuvo jugando con Fernando, este decidi� ahora jugar con el,
prolongando el inicio de la mamada de culo m�s tiempo.



Mientras Fernando jugaba con el ano con uno de sus dedos, con
sus labios recorr�a lentamente cada una de las nalgas, las besaba, las mord�a,
incluso llegaba a marcar sus dientes, de la boca de Ra�l solo se escapaban
peque�os gemidos de placer :





Ahh... ahh... �qu� esperas para comerme el culo? �gem�a
desesperado Ra�l


Tranquilo bebe �dec�a Morientes mientras mord�a
fuertemente la nalga izquierda


Ahh... ahh... ahh... �grito fuertemente Ra�l cuando
sinti� clav�ndose los dientes de Ra�l en su nalga





Morientes reacciono cuando escucho los fuertes gritos de Ra�l
y que alguien tocaba la puerta y de inmediato aparto sus labios, mientras Ra�l
corri� a esconderse al ba�o.



Entonces Morientes se levanto y de inmediato de dirigi� hacia
la puerta para abrirla y cuando lo hizo descubri� que eran Iker Casillas y
Vicente Rodr�guez que se dirig�an a su habitaci�n:





�Sucede algo? �pregunt� Iker Casillas con una linda
sonrisa en su rostro �Es que �bamos caminando y de repente escuchamos un
fuerte grito de tu habitaci�n


Ahh... ese grito... este... fue... lo que pas�... �dec�a
perturbado y confuso Fernando, quien aun no se acostumbraba a tener que
mentir cuando se enfrentaba a cualquier situaci�n referente a su lado
homosexual � es que Ra�l estaba acomodando su ropa en un caj�n y el caj�n
cayo sobre uno de sus pies y pues por eso grito, fue mas el susto que lo que
sucedi�... porque afortunadamente no le sucedi� nada


Ahh... que bien... �dijo Casillas obviamente sin creer lo
que Fernando le dec�a, ya que sab�a perfectamente lo que realmente hab�a
sucedido -�por qu� no lo llevas a la enfermer�a para confirmar que no es
ninguna factura?


No creo... que sea algo as�... pero seguir� tu consejo
�dijo Morientes admirando el bello e inocente rostro de su antiguo amante, a
quien a pesar de tiempo segu�a recordando cari�osamente






Por su parte Vicente hab�a permanecido totalmente callado
recordando lo que hace unos d�as hab�a visto en la biblioteca de Ra�l y pens�
que seguramente estaban haciendo algo parecido, por un momento sinti� celos y
deseos de estar en una situaci�n parecida, pero su miedo a�n pod�a m�s que su
nuevo deseo sexual.





Bueno... cualquier cosa "nando" �dijo Casillas en un tono
muy sugestivo y cari�oso �nuestra habitaci�n esta por aqu� cerca


Nos vemos al rato en la comida �fue lo �nico que alcanzo
a decir Vicente





Fernando sinti� una extra�a sensaci�n al escuchar la manera
en que Iker Casillas lo llamo, recordando aquel inolvidable tiempo que vivi� a
su lado y llen�ndose de repente de melancol�a por el pasado.



Por su parte Vicente e Iker siguieron caminando arrastrando
su maleta y con una mochila al hombro y de repente Vicente comenz� a re�rse y
sin pensarlo dijo en voz alta:





Yo no me trague ese cuento �dijo Vicente en voz alta sin
pensarlo


�C�mo? �pregunt� Casillas �estas diciendo ese grito que
escuchamos fue por otra cosa


Bueno... eso creo yo... no es nada... mejor no me hagas
caso �dec�a Vicente, quien supon�a que Iker Casillas no sab�a nada de la
relaci�n que exist�a entre Ra�l y Morientes, sin imaginarse siquiera que
Casillas ya ten�a un pasado con Fernando.


Mmm... ahora aclara mi duda y dime cual es tu teor�a
�dijo Casillas par�ndose frente a su habitaci�n haciendo el intento de abrir
la puerta


Bueno... pero es algo que ya se sabe y supongo que tu por
ser del mismo equipo lo debes saber mejor que yo �dijo Vicente entrando a la
habitaci�n


No se a que te refieres �dec�a Casillas


Esta bien... pues he estado escuchando... muchos rumores
de que Ra�l y Fernando son algo m�s que excelente amigos... �dec�a Vicente
un poco nervioso tu sabes... son


�Son qu�? �forzaba Casillas al observar la t�mida
reacci�n de su compa�ero y con la intenci�n de saber hasta donde lo pod�a
llevar esta situaci�n con Vicente


Pues... que son amantes �dijo Vicente


Ahh.. eso... por supuesto que ya lo sab�a... lo sabe todo
el mundo �dijo Iker Casillas rest�ndole importancia al hecho


�Entonces tu ya lo sab�as? �Desde cuando? �Siempre han
sido pareja? �Y sus esposas? �Sabes de alguien m�s que sea gay? �dec�a
Vicente apresurado y nervioso por el tema


Tranquilo... �a poco tu nunca hab�as hablado o escuchado
de estos temas? �contest� Casillas


No... la verdad no... y es que... en estos �ltimos
d�as... me he estado enterando... de muchas... cosas... que...
nunca...antes... hab�a experimentado �dec�a Vicente visiblemente perturbado
y con muchas ganas de hablar de su propia situaci�n pero al mismo tiempo con
miedo de escucharse a si mismo, pero reacciono �bueno... mejor al rato
hablamos... con m�s calma... me quiero dar una ducha... antes de bajar a
comer �te parece?





De esta manera Vicente Rodr�guez intentaba evadir lo que �l
mismo hab�a provocado y es que a�n no le costaba trabajo hablar y aceptar esta
situaci�n.





Esta bien, como tu gustes �respondi� Casillas intrigado
por al actitud tan cambiante de su compa�ero y de inmediato relaciono esa
actitud con alg�n posible temor





As� que de repente la habitaci�n se lleno de un profundo
silencio mientras cada uno por su parte comenzaba a acomodar su ropa y
accesorios.



Vicente se recriminaba una y otra vez lo cerca que estuvo de
expresar estos nuevos sentimientos que desde hace unos meses no lo pod�an dejar
en paz y que le costaba mucho trabajar aceptar su gusto por las personas de su
mismo sexo, a pesar de que cada d�a era m�s evidente y m�s a�n despu�s de
descubrir a Ra�l y Fernando Morientes cogiendo y disfrutando sin ning�n pudor.



Mientras que por su parte Iker Casillas pensaba la manera de
ayudar en su confusi�n a su compa�ero de cuarto, cuando de repente record� los
quejidos escuchados en el cuarto de Ra�l y sinti� muchos celos al imaginarse lo
que posiblemente Morientes le pudo haber hecho para haberle provocado semejante
dolor y por su mente desfilaron recuerdos que de aquellas noches llenas de
pasi�n y sexo que hab�a disfrutado a lado del entonces su amante Morientes,
recordando el excelente amante que era. Tan sumido se encontraba en sus
pensamientos que Casillas no se dio cuenta cuando dejo sobre el bur� de su cama
una cinta de video.



Por su parte Vicente levant� su mirada y se topo con la
espalda de Casillas y sin poder evitarlo sus ojos se dirigieron de inmediato
hasta la parte final de su ancha espalda, contemplando el abultado trasero de su
compa�ero, llam�ndole poderosamente la atenci�n las formas de sus nalgas.



Vicente se encontraba tan concentrado disfrutando de ese
apetecible trasero, que no se percat� cuando Casillas giro su cabeza hacia atr�s
y solo reacciono cuando escucho su voz:





�Sucede algo Vicente? �pregunt� Casillas consciente de lo
que hac�a Vicente


No... no... no pasa nada... me quede pensando en un
pendiente que deje �respondi� torpemente nervioso Vicente


Ahh... por el momento no te preocupes del exterior,
rel�jate ya veras que pronto tu vida va a cambiar�dijo Casillas cerrando el
ojo izquierdo provocando confusi�n en el t�mido Vicente.




Y fue cuando Casillas comprob� que a Vicente Rodr�guez le
gustaban tambi�n los hombres y esta noticia le pareci� muy interesante.



Mientras tanto en la habitaci�n de Ra�l y Morientes.





Debemos de tener cuidado �dijo Morientes un poco serio
cuando cerr� la puerta y Ra�l sali� del ba�o �cualquiera puede descubrirnos
como Vicente lo hizo en tu casa


Si... si... �dijo Ra�l sin poner atenci�n a Morientes y
de inmediato se lanzo a sus labios para besarlo.





Morientes sinti�ndose a�n excitado se dejo llevar nuevamente
por Ra�l, quien de inmediato dirigi� una de sus manos al miembro de Morientes y
fue cuando este dijo:





�En que �bamos? �dijo Ra�l apartando sus labios y de
inmediato llevo a Fernando a sentarse para que pudieran volver a la posici�n
inicial, �sea que Ra�l se puso de espaldas y se inclino parando su trasero.


Mmm... como me encanta tu culito... �dijo Morientes
mientras que con sus manos abr�a las nalgas �con raz�n distes un fuerte
grito, te deje bien marcados mis dientes en tu nalga �te duele peque�o?
�pregunto Morientes mientras que le daba besitos a la marca que le ocasiono


Ahh... un poco... pero tus labios... me alivian �dijo
Ra�l girando su cabeza hacia atr�s para observar a su amante con sus labios
en su trasero �ahh que esperas... chupame el culo...


Tranquilo bebe... �dijo Morientes mientras deslizaba sus
labios por la nalga hacia el centro





Entonces Morientes abri� por completo las nalgas de Ra�l para
dejar al descubierto su culo y lanzo un exclamaci�n de sorpresa cuando lo vio:





Ahh... bebe tienes el culo bien floreado... bien rojo...
�dijo Morientes con cari�o


�Y todav�a lo dices? �le contest� Ra�l �todo el d�a me
estuvo ardiendo


Peor yo no tuve la culpa, haber dime �qui�n era el que
estaba exigiendo que me lo cogiera antes de llegar a la concentraci�n?
Acu�rdate que por tu culpa llegamos tarde �le contest� Morientes


Si... yo fui quien te pidi� que me cogieras... pero no
dos veces y as� de bruto �dijo Ra�l


Ahh... es que tu tienes la culpa por provocarme y
calentarme as�... �dijo Morientes �as� que ahorita solo te voy a mamar el
culo para reponer mis fuerzas y en la noche cogerte como te gusta �Ok?


Si... pero que esperas para empezar �le contest� Ra�l
moviendo sus caderas





Sin perder mas tiempo Morientes saco la lengua y comenz� a
pasarla ligeramente por todo el contorno rojo del ano de Ra�l, ocasion�ndole
espasmos de placer. Primero fueron pasadas lentas, breves y solo en el contorno
y poco a poco su lengua se desplazaba hacia el interior.



Por su parte Ra�l sent�a que perd�a la raz�n cada vez que la
lengua de Morientes se introduc�a cada vez m�s en su interior, todo su cuerpo se
agitaba, mientras que con una de sus manos acariciaba su verga que ya se
encontraba totalmente dura y babeante ante la insistente caricia bucal de
Morientes.



Fernando Morientes continuaba chupando y chupando el culo
abierto de Ra�l, le parec�a la cosa m�s rica del universo, en estos momentos no
deseaba otra cosa, quer�a meterse dentro de eso culo y hacerlo vibrar como lo
estaba haciendo.





Ahh... ahh... ahh... �gem�a Ra�l al sentir como del culo
sal�a un fuego intenso que recorr�a todo su cuerpo, mov�a sus caderas
buscando que la lengua de Morientes se metiera mas profundo �as�... ahh...
m�s... meteme tu rabo... ahh...


Mmm... mmm... mmm.. que culo... ahh... me encanta ver
como se contrae... como se abre y se cierra... mmm �dec�a Fernando mientras
observaba el floreado culo de Ra�l





Ra�l se encontraba ya al borde del orgasmo anal, su cabeza la
agitaba de un lado a otro, sus ojos los manten�a cerrados y los apretaba como
muestras del infinito placer que sent�a, constantemente las piernas se le
doblaban, sus fuerzas se desfallec�an.



Entonces Morientes decidi� cambiar de posici�n y tomando de
la cintura a Ra�l como si lo estuviera cargando lo llevo a una de las camas y lo
avent� como trapo boca abajo y de inmediato se dejo caer entre las piernas de
Ra�l, que ya hab�a abierto lo m�s que pod�a sus piernas.



Ra�l con las piernas bien abiertas levant� sus caderas para
que su culo quedara a la mejor vista y de inmediato Fernando reinici� nuevamente
la mamada de culo, metiendo su lengua lo m�s profundo que pod�a. De la boca de
Ra�l escapaban fuertes gemidos de placer y que eran reprimidos por la almohada
que cubr�a su rostro.




Esta historia continuar�...



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