... " Vamos, por favor caballero no creo que haga falta tanta
violencia" .... Dijo Joel Hern�ndez con voz que delat� un poco sus nervios.

... "Que me voy a calmar ni que nada" ... Continuaba casi
gritando exaltado el inesperado visitante ... " Y a m� esta infeliz perra me las
paga ., que yo no soy la burla de nadie"... Grito a voz en cuello el hombre,
mientras que cerca de la puerta aparec�a la figura de la secretaria de Joel
Hern�ndez como intentando saber que ocurr�a., pero temiendo agravar la situaci�n
se quedo quieta esperando ver como se desarrollaba el incidente antes de
decidirse a llamar a Seguridad.

... " Eso no se vale Hern�ndez!!!" ... Continu� el reclamo
aunque en tono un poco m�s sereno mientras que M�nica aun no se repon�a del
inesperado susto y temerosa volteaba a ver hac�a donde aquel hombre se
encontraba parado ., y reconoci� en �l a aquel nauseabundo y grosero sujeto que
el martes hab�a ella ido a visitar a aquella dependencia de gobierno., con la
intenci�n de que les ayudara a agilizar los tramites de unas licencias para
colocar nuevos carteles publicitarios en una zona de la ciudad.

Recordaba tambi�n como estando ella hecha un manojo de
nervios debido a su nueva y m�s reciente infidelidad contra su marido cometida
d�as atr�s con su jefe., se molest� en el momento en que de aquella manera tan
burda se le insinuara al o�do .... " Pues uste� dir� se�ito., de a como no o
donde nos vamos a ver para que le ayude con esos permisos que quiere su jefe, ya
sabe uste� reinita, si quiere la veo mas tarde y le acepto hasta cuerpomatic o
lo que uste� me quiera dar" ...

Recordaba M�nica, como si detenerse a pensarlo m�s., ella
volteo a verlo despectivamente con una de esas miradas de mujer altanera y
arrogante, mientras que en voz alta le dec�a delante de sus colaboradores que se
fuera a fre�r esp�rragos ... " Por favor se�or, supone usted que una mujer como
yo, se va a fijar en un pobre naquito y feito como uste� ??"... Le hizo burla
antes de decirle que lo reportar�a con uno de los superiores., para que habiendo
todo mundo sabido del incidente, lo pusieran de patitas en la calle.

"Todo el mundo lo vio Joel !!!"... Estaba ah� uno de los
jefes y por poco y me corren de no ser por que le tuve que decir como estaba la
"movida" y ahora ya me quieren fregar lo de la "lana" y las fachadas que tengo
yo rentadas a ustedes!!!!" ... aclar� su molestia el hombre y luego pregunt� ...
"Dime la verdad no seas mariquita!!., para que mandaste a esta payasa a
quemarme??... Ya no quieres trato conmigo y me quieres tronar pues �rale., pero
br�ncale y adem�s de ahorita mismo darte en la madre, le paso a tu jefe los
datos de lo que realmente has pagado por esos permisos y al m�o le pongo sobre
aviso para que los truene y cierren la empresa por no respetar los reglamentos y
no haber indemnizado a las gentes esas a las que les cayo encima aquel letrero
que no deber�a de haber estado en aquella v�a r�pida.

En cuanto Joel Hern�ndez acab� de oir cual era el principio
de la queja de aquel ma�oso y corrupto hombre., se dirigi� hacia la puerta de su
privado y tras asegurar a su secretaria que todo estar�a bien y no hacia falta
llamar a los de seguridad., s�lo le dijo pod�a volver a sus ocupaciones y �l
junto con M�nica atender�an el asunto.

... " Bueno., bueno mire usted Don Ramiro., yo no sab�a nada
de esta situaci�n y por eso es que no entend�a el por que y me parec�a extra�o
que pidiera usted una cita para verme aqu� en las oficinas"... Explicaba �l
mientras que miraba al perturbado hombre y se dirig�a hacia uno de los sillones
de la salita de su oficina, ofreci�ndole que tomara asiento.

... "A mi no me hacia falta que usted mandara esta clase de
"princesitas" al trabajo para recordarme que ten�amos un acuerdo., pero ahora he
quedado muy mal parado en la oficina y ser� dif�cil que pueda seguir
"ayud�ndoles" con sus licencias" .... Dijo el hombre mientras tomaba una de las
butacas que le hab�a sido ofrecida.

M�nica que hab�a quedado parada e el medio de la oficina,
sinti�ndose como un total estorbo, al quedarse ah� sin hab�rsele ofrecido
asiento alguno y tan s�lo tener que escuchar las quejas de aquel mal nacido
corriente y vulgar hombre., no sab�a que hacer o que decir, por lo que pensaba
que de manera definitiva aquel hab�a sido ya su �ltimo d�a en aquella empresa y
se preparaba mentalmente para tener que pedir una disculpa y abandonar la
oficina. Cuando de pronto su jefe le hablo.

... " Verdad que todo debe de haber sido un malentendido con
el se�or y el jefe del se�or M�nica?"... Le preguntaba.

Ella no sab�a ya que hacer, quedarse y seguir aguantando
aquella humillaci�n de ver pisoteada su dignidad al pretender que todo hab�a
sido su culpa. O salir de aquel lugar en ese instante y con la cola entre las
patas regresar a su casa, aceptar su derrota frente a su marido y comenzar a
buscar otro empleo.

... " Si, talvez no comprend� bien lo que �l Se�or me
dec�a"... opto por contestar y quedarse, para aunque fuera salvar esta situaci�n
y no ocasionar m�s la molestia de Joel, para as� quedar en los mejores t�rminos
con �l y poder tratar m�s adelante la cuesti�n referente a las incriminadoras
pruebas de su adulterio.

... "Lo ve se�or???" ... Pregunt� Joel volteando a ver al tal
Don Ramiro ... "Ya lo reconoci� ella, fue su error, pero yo le pido que la
disculpe., supongo que ha estado bajo mucha presi�n �ltimamente"...

... " A mi que me importa que lo haya reconocido y usted me
pida una disculpa"... reclam� airado el hombre ... " El caso es que delante de
toda mi gente me hizo quedar en rid�culo y mal con mi jefe que quiz�s haga que
me cambien de departamento a una pinchurrienta secci�n donde ni las cucarachas
se paran"... a�adi� antes de concluir retomando la postura de que si algo as�
ocurr�a �l ver�a por que Joel Hern�ndez se hundiera junto con �l.

... " Caballero., por favor!!!"... ped�a casi suplicante Joel
... "D- debe haber alguna manera de arreglar todo este problema., usted digame
que quiere y yo mismo ver� por que lo tenga, ya sin intermediarios"...

... "S�lo hay una manera de resolver o intentar arreglar esto
".... Dijo Don Ramiro ... " Pero cr�ame que de ninguna manera aceptar�a que
"usted mismo" lo viera o me arreglara mi asunto"... Termin� de decir volteando a
ver a M�nica recorriendo de arriba abajo su aun bajo esas condiciones.,
imponente figura.

Al d�a siguiente, por la ma�ana M�nica tuvo un momento
dif�cil al intentar convencer a su marido de que aquella min�scula y ajustada
falda de color amarillo chillante que dado su escaso tama�o, era su mejor opci�n
o si quiera un atuendo apropiado para presentarse a trabajar. Pues aquella
provocativa prenda dejaba al descubierto mas de tres cuartas partes de sus
m�rbidos muslos., que luc�an encantadoramente bien torneados hasta desaparecer
bajo la tela de la falda por un extremo., mientras que por el otro continuaban
hasta llegar a sus rodillas y pantorrillas que deliciosamente se notaban firmes
y tensas por el estado y forma en que aquellos alt�simos zapatos de tac�n
moldeaban el resto de sus piernas y gl�teos, que parec�an salir al encuentro de
su mirada..

Si Gerardo no hubiera tenido que salir con tanta prisa y se
hubiera quedado un poco mas a ver el resto del atuendo, se habr�a quedado
boquiabierto cuando de su vestidor M�nica sac� para ponerse una blusa negra casi
del todo transparente y que de no ser por aquel mo�o bajo el cual fingidamente
intentaba ocultar a la vista sus senos apenas encubiertos y contenidos dentro de
las copas de aquel Brassiere que sin duda alguna con cualquier descuido que ella
pudiera tener., producir�a un "accidente" que dejara al descubierto al menos la
mitad de las aureolas de sus sonrosados pezones.

Al sentarse en la cama frente al espejo, agradeci� que se
hubiera marchado y no se hubiera quedado a verla sufrir, tratando de encontrar
una manera c�moda de sentarse sin tener que batallar por cubrirse o bajar el
dobladillo de la falda que insist�a en treparse por sus muslos y dejar al
descubierto una porci�n de la tierna y desnuda piel que escapaba al final del
el�stico borde de sus medias oscuras. Ella lo hab�a visto salir, sabiendo cuan
molesto se deber�a de encontrar por lo que seguramente �l considerar�a un
intento de ella por retarlo y provocarle alg�n malestar, pero lo cierto es que
M�nica, actuaba bajo el completo temor de que su vida se viniera abajo y la
corriera de la casa si se llegaba a enterar de su infidelidad y aquellas
obscenas fotograf�as que ella se hab�a dejado tomar.

..."Ya de por s� , bastantes dudas puede �l tener de las
cosas que yo no le he contado que hac�a con mis novios antes de conocerlo y se
molestaba cuando sab�a que me segu�an llamando por tel�fono para pedirme que los
volviera a ver o los dejar� visitarme de vez en cuando antes de que nos
cas�ramos . Y ahora esto encima"... Intentaba M�nica exculparse y reunir fuerzas
mientras que ahora s� se reprochaba por no haberle tenido confianza suficiente
para contarle sobre su sexualidad antes del noviazgo. Y decid�a que har�a lo que
fuera con tal de salir de la situaci�n y salvar su matrimonio.

Al menos eso era lo que ella se repet�a una y otra vez cuando
arm�ndose de valor, decidi� afrontar su destino, fuera cual fuera y sali� de
hogar hacia la calle.

Tal y como se lo hab�an ordenado la noche anterior., si
quer�a seguir cobrando en aquella empresa y evitar que aquellas fotos arruinaran
su matrimonio., tendr�a que presentarse a "aclarar todo el asunto", y
disculparse con Don Ramiro y su jefe., ofreci�ndoles su total e incondicionales
disculpas por el altercado ocurrido durante la semana, aclar�ndoles que la
compa��a "agradecer�a todas sus atenciones" y ella quedar�a a sus ordenes para
cualquier aclaraci�n que pensaran pertinente.

Aun pese a su descarado atuendo y pensando que f�cilmente
cualquiera que la viera podr�a pensar en faltarle al respeto., el porte de
M�nica era de altivez y orgullo ante su derrota. Y al pasar frente a la fila de
escritorios., con la mirada fija al final del corredor, hizo todo lo posible por
no abochornarse ante los comentarios que a algunas de las secretarias y
empleados reunidos all� hac�an al verla pasar cerca de ellos.

... " Ya viste que cola �??!!"... Peguntaba admirado alguno
de ellos.

... " Si hombre., Pinche Don. Ramiro Caballo., esta loco si
piensa que se puede clavar a una vieja de estas....." contest� otro.

Sent�a sus miradas lujuriosas , recorrer todo su cuerpo ,
deteni�ndose en su cintura para continuar o detenerse definitivamente sobre su
espectacular trasero que con lo ajustado de la falda y la cadencia que aquellos
alt�simos zapatos confer�an a sus caderas, produc�a en las mentes de aquellos
hombres y alguna que otra mujer, cualquier clase de deseos.

... "Tan decente que se ve�a el otro d�a cuando mando al
diablo a Don Ramiro" ... Coment� un hombre a una de las secretarias que se
encontraban cerca de �l.

... " Pues ya vez que no era tan decentita la se�orita" ...
Contest� la mujer en tono burl�n ... "Cualquiera que se vista as� para salir a
la calle., es una simple buscona"... Conclu�a.

... " Pues a mi me vale!!!... que sea de otro fulano con tal
de meterle mano" ... Hizo el socarr�n comentario otro que estaba tambi�n cerca
del sill�n donde M�nica despu�s de anunciarse , se sent� a esperar ser atendida.

... " Mi Madre!!!., ya viste hasta donde se le subi� la
falda!!!???"... Exclam� sorprendido uno de ellos sin poder apartar la vista de
aquel espectacular par de piernas que se ofrec�an ante sus ojos.

... " Aaiiiissshh �!!! Yo no se que le ven �!!???... Es una
puta cualquiera!!! " ... reclam� un tanto molesta la muchacha a sus compa�eros
de trabajo que no dejaban de mirar hacia el sill�n como si intentaran grabar en
su memoria la imagen de aquella gloriosa mujer e imaginar las cosas que har�an
con ella si pudieran tenerla entre sus manos.

... "Puta o no, ya la quisiera yo para hacerle un bebito" ...
dec�a en modo divertido y morboso uno de ellos...

..."No por Dios., como crees!!!?? Tir�rtela s� pero..." Hizo
una pausa el que contestaba aun m�s divertido, pero enf�tico a�adi� ... " Tener
a una de "esas" como la madre de tus hijos???... Como diablos sabr�an que son
tuyos y no del vecino, del portero o el que recoge la basura???" preguntaba.

..."Una mujer as� va pidiendo guerra en cada esquina.,
ofreci�ndose al que se la quiera o la pueda pagar por met�rsele entre las
piernas!!!"... Dijo la muchacha ..."Vayan ustedes a saber con cuantos haya
tenido que ver antes y despu�s de casarse"... Concluy� mientras que les dirig�a
la atenci�n hacia su mano, rodeando su dedo anular para hacer que notaran el
anillo de compromiso y argolla matrimonial que M�nica usaba como "prueba" de su
pretendido status de mujer fiel y felizmente casada.

Instantes despu�s, la puerta de la oficina comenz� a abrirse,
ocasionando con ello que aquella cuarteta de parlanchines, de inmediato se
disolviera, pretendiendo aparecer muy ocupados para cuando esta se hubiera
abierto del todo. Pero M�nica lejos de sentirse aliviada ,sent�a como un nudo en
la boca del estomago, la hacia palpitar profundamente, ante la inclemente
ordal�a que le podr�a estar aguardando al encontrarse con aquel apestoso sujeto.

Sin m�s que hacer , como no fuera "rajarse" en el ultimo
momento y atenerse a las posibles consecuencias de no acceder al "juego" que su
jefe le hab�a planteado y quiz�s empezar a plantearse la perspectiva de un
divorcio, lidiando ante la ignominia de ver su reputaci�n manchada de modo
irreparable. M�nica casi como en trance se incorporo de su asiento en cuanto
not� que le hac�an un adem�n para que se acercara a la puerta.

Al entrar a la oficina, casi ni percibi� las flameantes
miradas que su vestuario causaba en los ojos de aquel sujeto por culpa de quien
se encontraba en aquel lugar y en ese preciso momento. As� como tampoco not�
aquellas otras miradas que devoraban todo su cuerpo, comenzando por sus tobillos
y recorri�ndola como serpientes que se enrollaban por aquel delicioso par de
piernas que quedaban a la vista justo hasta el �ltimo mil�metro donde el
dobladillo de la diminuta falda se los permit�a., para que una vez posados all�
aquel par de ojos, aun no contentos con aquel regalo puesto ante su
contemplaci�n., golosos se deleitaran ante la posibilidad de descubrir todos
aquellos encantos que parec�an querer adivinar a cada paso que segu�an el
acompasado caminar de M�nica.

Por fin M�nica se percato de la presencia de alguien m�s en
la habitaci�n, al escuchar alg�n ruido proveniente de un rinc�n de la oficina.,
por lo que de inmediato volteo a ver hacia aquel sitio y se sorprendida respir�
aliviada al notar que se trataba del jefe de aquel sujeto., ni m�s ni menos que
el mismo con quien lo hab�a reportado despu�s de aquel vergonzoso incidente
acontecido d�as atr�s.

... " B-buenos d�as Se�or..." Empezaba a saludar cuando de
s�bito se dio cuenta que no recordaba su nombre., por lo que termino de
saludarlo nerviosa y no queriendo revelar el detalle.

... " Buenos los tenga usted Se�orita" .... Contest� el
aludido sin poder ocultar el sobresalto que le causaba el estar parado frente a
una mujer con los atributos f�sicos y sensuales que M�nica le representaba...

Entonces de Inmediato y no queriendo resultar opacado ni
mucho menos ignorado. Ramiro comenz� a decir ... " Vaya, vaya, pero si que
tenemos por aqu�, Srita. Farz �!! Usted luce a�n mejor que lo que yo recordaba
de la ultima vez que la vi!!!"... y luego puntualiz� ... " Es la falda �? O la
blusa???... No se que se hizo usted, pero luce m o n u m e n t a !!!

M�nica no pudo mas que pretender una fingida sonrisa que le
resultaba sumamente dif�cil de sostener ante lo pasado de vivo del comentario

"Pase , pase, por favor que mi jefe y yo la est�bamos
esperando para aclarar aquel malentendido de la semana pasada"... continu�
aunque sin hacer ning�n adem�n para que ofrecerle o indicar a ella que tomara
asiento y qued�ndose parados los dos mientras que el aludido jefe se incorporaba
de su asiento en el sill�n largo de la oficina, para acercarse a una de las
sillas m�s cercanas al escritorio.

..."Le explicaba yo que usted hab�a estado bajo presi�n la
�ltima semana y que por lo mismo hab�a malinterpretado mis palabras y las
instrucciones de su patr�n" ... dec�a Don Ramiro.

... " Es correcto eso Se�orita Farz???"... le preguntaba el
superior del empleado , mientras que no pod�a dejar de observar el curvil�neo
trasero que debido a lo ajustado de la falda, parec�a querer reventar las
costuras y quedar expuesto ante la candente mirada.

..."S-si"... M�nica titube� ..."Si se�or, fue una confusi�n y
por eso estoy aqu� , para pedir una disculpa a � a nombre de"... Hizo otra
pausa, sinti�ndose humillada al tener que pedir aquella publica disculpa y tener
que tragarse su orgullo al decir aquel nombre de la persona que sin haberlo ella
sospechado ahora la ten�a completamente a su antojo... "A nombre m�o , de la
empresa y del Se�or Joel Hern�ndez"...

... "Lo ve jefe???" yo le dec�a que todo era un error y de la
compa��a nos mandar�an una explicaci�n"... Dec�a Ramiro Caballo, con gesto
divertido. ... " Es m�s su jefe me inform� que la se�orita no se ir�a de aqu�
hasta que no hubi�ramos quedado satisfechos con ella" termin� de decir el odioso
hombre.

... "Es verdad eso??... chula??" pregunto el hombre.

... "S-ssi Se�or" ... contest� M�nica y luego movida por los
nervios a�adi� ... "Vine a ponerme a su disposici�n y me pidieron que cooperara
para cualquier que me solicitaran"... Termin� de decir ella intentando evadir la
mirada del jefe y tratando de enfocarla en cualquier otro sitio que no fuera
donde se encontraba el infeliz aquel que la hab�a colocado en tan dif�cil
situaci�n..

Pero justo cuando acababa ella de hablar y el sentimiento de
indignaci�n que de pronto parec�a quemarle por dentro parec�a s�bitamente
reaccionar y pretender ganar la batalla por apoderarse de sus decisiones,
conmin�ndola a intentar salir de una manera al menos m�s digna del aprieto en
que se encontraba y apelar a la buena alma que el jefe de aquel individuo
pudiera tener., sinti� un movimiento detr�s de ella., por lo que nuevamente se
encogi� victima de sus nervios y temores. Aterrada sin querer voltear a encarara
a su nuevo verdugo , se qued� est�tica sin atreverse a mover un solo dedo.

... " Pues vaya que eso es una sorpresa, Se�orita Farz., o
debo de llamarla Se�ora hhh...??" Pregunt� el jefe del individuo, haciendo un
entonaci�n que daba a entender que esperaba o�r el nombre de casada de M�nica.

Aquella simple y aparentemente inocente pregunta acab� de
resquebrajar la voluntad de ella., por lo que contest� ... " De la O., Se�ora de
la O"... Repiti�.

... " Lo ve Se�or, le dije que todo era una equivocaci�n.,
usted supon�a que la Se�ora aqu� presente era una muchacha, joven y soltera ,
pero yo le asegur� que era casada y usted no me cre�a"... Lanz� el comentario
Ramiro y estaba por acercarse a M�nica cuando de pronto se detuvo a observar, el
momento en que ella, pareci� temblar y a punto de que sus piernas flaquearan

"Ohhh no Dios m�o!!!" alcanzo a o�rla musitar levemente
cuando sinti� una mano que por detr�s se acomodaba sobre uno de sus gl�teos.

... " Veamos pues entonces que es lo que nos mand� tu
jefe"... Dijo el jefe al momento en que su mano se deslizaba por sobre la tela
hacia la otra mejilla y descend�a hacia el dobladillo de la falda.

Continuar�...

�Jordy Xors. & G.O. Tigers

Por favor manden todas sus opiniones y sugerencias que ser�n
siempre bien recibidas., o si acaso descubren alg�n error garrafal de ortograf�a
o concordancia, h�ganlo saber., pues de momento no ha sido posible revisar a
fondo y ser�a interesante continuar esta historia de la mejor manera posible y
que la disfruten tanto como los que estamos de este lado hemos gozado
vivi�ndolas o escribi�ndolas.

POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO
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