El caballo no muy grande se quedaba quieto, Santiago segu�a
pajeandole y Pepa chupaba la punta de aquel enorme vergajo de casi 60 cm y
grande como mi antebrazo, me recordaba a la polla de Juli�n pero mas larga.
Dolores nos estaba comiendo las pollas a Juli�n y a mi mientras se met�a tres
dedos en su co�o caliente y h�medo. Yo besaba a Juli�n y acariciaba su preciosa
barriga y sus peludas tetas, mientras �l introduc�a dos dedos en mi culito con
ganas de ser follado, de repente Santiago grit�: "Dolores ya est� preparado"
miramos hac�a donde estaba el caballo y vimos aquella enorme polla tiesa como un
palo esperando follarse a alguien mientras Santiago y Pepa segu�an pajeando al
animal y Ram�n le lam�a las enormes pelotas a la vez que se hac�a una preciosa
paja.

Dolores dej� de chuparnos las pollas y se dirigi� hac�a el
caballo, se tumb� boca arriba encima de un mont�n de mantas con las piernas en
alto de tal manera de su enorme y dilatado co�o quedara a la altura del pene del
animal. Santiago y Pepa guiaron el miembro del animal hacia el co�o de Dolores y
ante mi asombro empec� a ver como aquel enorme monstruo se iba metiendo en el
co�o de Dolores que empez� a gemir como una perra en celo mientras Pepa y
Santiago mord�a sus enormes tetas.

Ram�n segu�a lami�ndole las pelotas al animal mientras se
pajeaba con una mano y con la otra empez� a hurgar en el ano del animal, el cual
segu�a quieto y entregado al placer que le estaban dando por todos lados. Jul�an
babeaba viendo como su mujer era follada por aquel enorme poll�n, se puso a
cuatro patas cerca de ella y me pidi� que me le follara, sin perder tiempo me
arrodill� y le clav� mi polla de un solo golpe, "mira Dolores los dos estamos
siendo follados a la vez" dijo Juli�n totalmente ensartado por mi polla y
moviendo su culo intentando sacarme toda la leche lo antes posible.

De repente el animal ayudado por la manos expertas de
Santiago y Pepa entro totalmente en el co�o superabierto de Dolores que estaba
como ida debido al placer que le estaba produciendo la tranca del animal, yo no
daba cr�dito, le hab�a entrado entera y empez� entonces un mete y saca por parte
del caballo, fu� cuando aprovecho el gordito de Ram�n para auparse un poco y
clavarle su verga por el culo al caballo, que ni se inmut� ante la enculada,
debido a que no era la primera vez que se lo hac�an. Santiago y Pepa estaban
entregados totalmente al cuerpo de Dolores, �l la besaba por todo el cuerpo,
mientras ella le lam�a el co�o y la polla del caballo a la vez. Juli�n segu�a
con mi polla en el culo mientras se manoseaba sus huevazos y enorme poll�n. Yo
empec� un mete y saca salvaje, mi leche empez� a subir por mis pelotas buscando
una salida y de repente estall� en el culo de Juli�n, el cual recibi� mis
chorros de leche con aut�ntica pasi�n.

El caballo segu�a foll�ndose a Dolores, su co�o estaba
enrojecido y su cara desencajada, era incre�ble ver aquello, la verga del animal
entraba y sal�a con facilidad del co�o de Dolores la cual ped�a m�s y m�s. Ram�n
segu�a enculando al animal, Juli�n se levant� chorreando leche por su culo, se
dirig� hac�a Ram�n, se agach� y empez� a comerle la polla que entraba y sal�a
del culo del animal mientras se pajeaba su enorme tranca.

Ram�n se pellizcaba sus pezones y acariciaba su joven barriga
a punto de llegar al orgasmo, Juli�n lo vi� y le meti� dos dedos en su joven
ojete lo cual provoc� que el chaval empezara a gritar, signo de que su corrida
era inminente, sac� su polla del culo del caballo y se la meti� en la boca a
Juli�n, el cual empez� a succionar como un poseso, Ram�n se tens� y empez� a
soltar chorros de leche caliente en la boca de Juli�n, que tragaba como si le
hubieran dado una golosina y no paro hasta que se la trag� toda y dej� la polla
de Ram�n limpia de restos de leche.

Dolores hab�a tenido ya tres orgasmos, su co�o rezumaba jugos
sin parar los cuales ayudaban a que la tranca del caballo entrara y saliera sin
dificultad. Pepa hab�a tenido dos orgasmos tambi�n y Santiago estaba tan
caliente que empez� a meterse un peque�o calabac�n por el culo, al ver eso
Juli�n, se acerc� por detr�s le puso a cuatro patas y le dijo: "sacate eso que
vas a probar algo mejor" le sac� el calabac�n y apunt� su monstruosa verga al
ojete de Santiago, el cual estaba enormemente abierto, signo de que hab�a sido
penetrado por algo realmente enorme. Juli�n se la clav� de un solo golpe hasta
que sus enormes pelotas chocaron con el culo de Santiago el cual grit� no s� si
de dolor o de placer. El caballo empez� a resoplar ante lo cual Pepa empez� a
ayudar en el mete y saca del animal del co�o de Dolores.

La corrida de la bestia era inminente, Dolores tuvo otro
orgasmo y su co�o empez� a soltar leche como un torrente, el caballo se estaba
corriendo, era brutal la cantidad de leche amarillenta que soltaba, Pepa empez�
a lamer lo que pod�a, de repente la polla del caballo sali� del co�o
superabierto de Dolores, segu�a soltando leche a litros que inundaron la cara y
el cuerpo de Dolores que tragaba lo que pod�a, Pepa no daba abasto, incluso
Santiago acerc� su cara para sentir la leche del animal mientras segu�a enculado
por la tranca de Juli�n. La verga del caballo iba afloj�ndose pero sin parar de
soltar leche, Santiago se la cogi� y se la meti� en la boca succionando lo que
pod�a, Pepa le ayudaba y Dolores, que estaba como desvanecida, se restregaba y
relam�a toda la lechada del caballo que hab�a caido en su cara, boca , tetas y
barriga. El caballo par� de correrse y Ram�n le apart� para que dejara espacio
vital. El co�o enrojecido de Dolores segu�a soltando leche mezclada con sus
propios jugos vaginales ya que hab�a vuelto a tener otro orgasmo, quiz� el mas
brutal de todos.

Yo estaba de pie viendo aquel espect�culo totalmente
empalmado otra vez, Ram�n estaba a mi lado igual que yo, nos empezamos a besar y
a manosear por todo el cuerpo, era una delicia tocar aquel cuerpo gordito, sin
vello, joven y caliente, ten�a un culo redondo y terso, empec� a meter mis dedos
dentro de su ojete abierto, �l me pajeaba con dulzura mientras me mordisqueaba
mis pezones duros como piedras, fue entonces cuando se arrodill� al lado de
Santiago y me ofreci� su culo, yo me puse de rodillas apunt� y se la empec� a
meter muy lentamente mientras el limpiaba la cara de Santiago llena de esperma
de caballo, yo empec� a besar y a acariciar a Jul�an que no paraba de meter y
sacar su vergajo del culo de Santiago, el cual rezumaba, caca y un poquito de
sangre. Los cuatro est�bamos excitados al m�ximo, mientras las mujeres se hab�an
dedicado a comerse mutuamente sus co�os, incluso Pepa hab�a metido su mano
derecha entera en el co�o de Dolores y esta le hab�a metido el calabac�n en el
ojete de Pepa mientras le lam�a el co�o con pasi�n desenfrenada.

Hab�a un olor a semen tremendo lo cual nos excitaba mucho
mas. Juli�n empez� a temblar, su cuerpo se tensaba, sus huevos se encogieron y
gritando empez� a llenarle el culo de leche a Santiago, la cual le chorreaba por
los muslos mezclada con otros jugos debido a que su culo estaba reventado. Yo
aprovech� y tambi�n me corr� en el culo de Ram�n el cual estaba enloquecido
besando a Santiago. Juli�n segu�a con su polla metida en el culo de Santiago,
"te voy a curar Santiago, ya veras que bueno es esto" dijo Juli�n, mientras
empezaba a mearse en el culo dolorido de Santiago, le llen� por completo su
ojete con una meada interminable que rezumaba por sus muslos. Yo le imit� y
tambi�n le llen� el culito de Ram�n con una meada riqu�sima. Cuando terminamos
nos arrodillamos y lamimos los culos que hab�amos follado dej�ndolos limpios y
relajados, luego Juli�n y yo nos besamos con pasi�n entrecruzando las lenguas en
nuestras bocas llenas de todo tipo de jugos.

Dolores y Pepa yac�an destrozadas una al lado de la otra,
Juli�n y yo nos acercamos hasta ellas y nos pusimos a su lado esperando recibir
la leche de Santiago y Ram�n que se estaban pajeando delante nuestro, ambos
empezaron a soltar leche que cay� encima de nuestro cuerpos sedientos de mas
leche. Juli�n y Pepa limpiaron las pollas de Santiago y Ram�n y los seis nos
quedamos dormidos en la hierba total y absolutamente relajados despu�s de haber
tenido una de las org�as m�s tremendas de nuestras vidas.

Cuando llegu� a Madrid, Ricardo me estaba esperando en casa y
no daba cr�dito a lo que le contaba. Luego follamos como hac�a mucho tiempo que
no lo hac�amos.