La finca y Prudencio
Al final de esa primera semana decidi� ella que nos
traslad�semos a la finca en Necocl�, pues el fresco aire monta�ero le molestaba;
adem�s, quer�a tostarse un poco en la soledad de aquellas playas urabe�as. Los
obreros nos acompa�aron a caballo hasta la carretera, all� nos despidieron.
-"Chamo, hag�le pues, tiene mucha tierra por delante;
�yuuujoole Lionel, vamos!"-.
La carretera descend�a intern�ndose en las llanuras ardientes
de esa regi�n cercana al mar Caribe. Mucha polvareda levantaban los camiones y
autobuses al pasar en sentido contrario. Las bullosas iban atr�s jugando a las
cartas y escuchando la radio.
Estela, junto a m�, me instru�a sobre la ruta a seguir.
Especialmente cuando pas�bamos por los pueblos, pues se�alizaci�n o letreros
indicando la salida no exist�an por ning�n lado. Paramos en un palmar para
merendar y luego proseguimos.
Se�al� con el �ndice dos palmas de coco muy altas a lo lejos
y anunci�: -"all� es, esa es la entrada a la finquita bananera del t�o
Atanasio"-. Se ve�a muy cuidada, incluso adoquinada.
-"Amita, pase adelante, le preparamos todo como nos
dijeron Lionel y Rafa"-. Este era el famoso Prudencio; un negro alto, muy
fuerte, joven, pero aparentemente t�mido. Su mirada elud�a todo contacto visual
directo; de reojo tasaba a las dos bullosas; ellas no lo tomaban en cuenta.
-"Prudencio, �d�nde est� su pap�?; y �Remedios?,
�Dolores?, y �Anacleto?"-. Quizo enterarse Estela del paradero de los dem�s
all� en la finca.
�l le explic� serio: -"Amita; mi ap� est� en la casita
algo maloso; y las mujeres �st�n cocinando pa� ust�; a Anacleto lo mand� a
control� el tractor; ya va mi Amita....... �Neeegras, l�ag�ita �e coco pa� la
Se�o Estela!,..... �muevan el botapeos*!"-. [*Trasero].
-"Tranquilo Prudencio, d�jalas que terminen la comida;
ay�danos a bajar el equipaje.....
Despu�s llevas el campero al taller del pueblo para que
reparen una llanta que se nos estall�.......... Y cuando venga Anacleto, que
enjalme cuatro mulas para bajar hasta la playa en esta tardecita"-. Ella
pose�a una sedosa determinaci�n para comunicarle a las personas sus deseos. Hizo
caso omiso al lenguaje primitivo del Prudencio. �ste miraba hacia el suelo.
A la entrada de la casa nos esperaba una negra de peque�a
estatura vestida con un traje de popelina, la cabeza la ten�a envuelta con un
trapo del mismo material. Saludo efusiva: -"Ay Se�o Estela, �qui alegr�a
tenela pu�aqu�!, viene muy poco ya ust� pue�stos la�os; pase que ya �t� lista la
mesa con la comidita.....
Le hice un juguito de papaya con naranja pa� la s�...... �Uy,
las se�oritas tan bonitas que�st�n!........ Vea, asi�ntensen,..... el se�� aqu�
en el puesto de Don Ata..."-.
-"Gracias Remedios, gracias por todo; tenemos muchas ganas
de un buen pescado de esos que usted prepara; d�gale a Prudencio que en el
canasto vienen unas golosinas para sus peladitos,.... �sent�monos pues!;.....
peladas, �por qu� est�n tan calladas?"-.
Las chicas tomaron asiento sin hacer comentario alguno; el
apetito se despertaba al contemplar la cacerola con el pescado y las verduras.
El jugo invitaba a refrescarse y a degustarlo.
Remedios estaba presta para cualquier deseo que le
expres�semos, especialmente de Estela. Su influencia y poder entre ellas me era
ahora m�s claro. Indag� por los dormitorios y la humilde sierva se esmer� al
responderle: -"s� Amita, �t�n listos con mosquitero y ventilao�....."-.
Estela orden�: -"bueno peladas hagamos una buena siesta y
al atardecer vamos al mar....
Remedios, te llamo m�s tarde cuando te necesite, ahora vamos
a descansar para recuperarnos del viaje; sobre todo mi novio, �l viene manejando
desde Medell�n...."-.
Una playa blanca y muy caliente
El sol declinaba y empezaba a esconderse en el horizonte
cuando ella abri� la ventana; un haz de luz ilumin� la habitaci�n, jugueteaba
con los dedos de mis pies cosquille�ndolos: -"�perezoso, despi�rtate ya!; ji,
ji, ji, el pescado te cay� muy bien, �cierto?; a nadar"-.
En ese instante entraron las dos locas bullosas recuperadas
del viaje y con una idea: -"Monita, �tap�te pues!, �hicieron siesta u otra
cosa?;........... mir� querida, esperemos que oscurezca pa� ir al mar, nos vamos
a pie y llevamos un aguardientico y el radio y nos ba�amos, nadar de noche
desnudas es muy ch�vere pues no tenemos mirones; y que Remedios nos prepare unas
empanadas y patacones de pl�tano; �qu� dec�s?"-.
Ella estaba muy alegre y complacida por la siesta pr�diga en
gorjeos y escarceos; sonri�: -"ay s� pues, me parece genial; Elenita, d�gale
a Remedios que prepare el canasto como dijo Amparito, y que desenjalmen las
mulas porque se quedan aqu�; s� a nadar pues"-.
Ya hab�a oscurecido cuando iniciamos el camino hacia la playa
que no estaba muy lejos, pues el rumor de las olas se percib�a claramente.
Remedios se hab�a quedado nerviosa ya que no le gustaba mucho que ellas se
fuesen pr�cticamente solas a retozar de noche en esos lugares.
Buscamos refugio entre un cocotal y all� tendimos las
toallas; Amparo destap� la botella con el licor venenoso y reparti� entre todos;
Estela y yo bebimos de la misma copita; Elena encendi� la radio y la melod�a de
una m�sica caribe�a acarici� nuestros o�dos.
Nos tumbamos para contemplar el oscuro cielo azul; de vez en
cuando una lancha cruzaba a lo lejos y desaparec�a veloz. Las dos chicas se
quitaron el jean, la blusa, los zapatos, llevaban los trajes de ba�o -bikinis-
ya puestos; corrieron hacia el agua para sumergirse en ella.
-"Vengan pues, est� riqu�sima; Estelita, anim�te y ven�"-.
Amparo vociferaba esgrimiendo en su mano la tanga del bikini; la Bullanguera la
imitaba; el agua las cubr�a hasta el pecho. La luna irradiaba todo su esplendor
sobre el golfo; Estela me tranquiliz�: -"d�jalas, ahora vamos"-. Y
levant� su mano para indicarles que esperaran un poco.
Ellas regresaron y se envolvieron en sus toallas para
secarse: -"Elenita, pon� los bikinis en el tronco y larg�me los calzones;
vest�te tambi�n que se nos pone nervioso este Bizcocho ... Mona, and� que est�
calientica,.. ya listo, Elenita serv�me un aguardientico pa�l frio"-.
Se pusieron sus ropas ante nuestras divertidas miradas;
Estela sab�a que ambas la respetaban y por ello no se molestaba con sus
insinuaciones. Convers�bamos sobre la belleza de la zona, cuando a nuestros
o�dos llegaron unos gritos y risas de voces masculinas alcoholizadas. -"Ja,
ja, ja, ja; agarr�la pue� que se nos va; levant�la que no pesa n� y tir�l�al
agua...."-.
Un chillido de protesta se escap� de una garganta femenina:
-"solt�me pue� negro atrevio, le vu�a dec� a Remedio� que ust� me toc�;
�jueputa, no me meta� el deo pu� ah�!"-.
Las enormes ra�ces de las palmas de coco nos proteg�an y
permit�an observar la escena. Amparo alz� su cuello y reconoci� los personajes:
-"�Mir� pues, qu� vagabundos!; son el Prudencio y Anacleto con Dolores; la
tienen entre los dos y la est�n consumiendo a la brava"-.
Apagamos la radio e hicimos silencio; Estela indag� curiosa
pero preocupada: -"Amparito, �que piensan hacerle a la pobre Dolores?, ella
tan menudita que es, toda indefensa, �por qu� la tiran as� al agua?; �ay no, la
est�n dejando desnuda!; �qu� hacemos?, �cobardes!"-.
-"Monita, la est�n preparando pa� una redoblona; no
hacemos nada, miramos y de paso ten�s una lecci�n de un tr�o, dos negros y una
negra garosa; �verdad Elenita?"-. Repuso la consejera con aire de mucha
seguridad y conocimiento de la situaci�n.
-"Monita, ella es muy patusquera, seguro que no es la
primera vez; �te fij�s?, uno la tiene pa� que no se eche a correr, el otro se
quita los chiros; y despu�s se lo embuten
S� Amparito, por eso estuvo toda la tarde perdida, seguro
andaba con el Anacleto en el monte jug�ndole al escondido en las plataneras....
Miremos c�mo la trabajan"-. Apoy� la Bullanguera a la Morenota con su
argumentaci�n; ambas estaban a favor de permanecer all� para alimentar el
voyerismo.
Los dos negros se desnudaron y la sosten�an de manera que no
ten�a escapatoria, corrieron con ella hacia el mar y se sumergieron; al emerger
qued� ella entre los dos, la utilizaban como una pelota playera: -"ja, ja,
ja, tom�la Cleto, agarr�la; ja, ja, ja, mand�la pa� c� Prude...."-.
Ella se defend�a con improperios: -"negros maricas,
jueputas; �aaayyyy, sac�me el deo de mi culo!; te voy a mord� si no me deja�; te
pateo la� g�eva� Anacleto cabr�n"-.
�ste �ltimo se enardeci� con tanto piropo y se aprovech� de
su fortaleza f�sica: -"cay�te* ya negra putona; trag� un poco di �agua sal�
pa� que te lave las tripas"-. [*C�llate]. Y la empuj� haci�ndola desaparecer
de la superficie, ella alcanz� a proferir un sonido: -"�marica ijueputa!;
gluh, gluh, gluh, ....... �ahhh, mi�ahogo, aahhh!, gluh, gluh"-.
Prudencio se carcajeaba: -"ja, ja, ja; Cleto, sac�la ya;
vamu� a sacrifica�la;...... llevemo�la al morrito aquel; ..... ven� Dolore�,
qui� oy va� a come� doble, con pelo y tua� vaina..."-.
Estela mir� a Amparo, �sta la calm�: -"no te preocup�s que
est�n jugando; ellos son muy ordinarios, pero as� le hacen a ella, a la Remedios
y a las otras; segu� echando ojo y as� aprend�s; y ahora viene lo bueno; sshh
Elenita, se van a dar cuenta que estamos aqu�"-.
La Catira y yo ten�amos nuestras ropas puestas, sin embargo
ella me susurr�: -"Lulito, ven y me arropas, est� haciendo fresco y esto
parece que va a demorar"-. Y me hal� hacia ella; muy cuidadosamente la cubr�
y apoy� mi barbilla sobre su hombro, le mord� la oreja, protest�: -"no, no me
muerdas; mejor ag�rrame las manos y dame calor......"-.
-"As� con ropa y todo, no pues muy teso, ji, ji, ji"-.
Observ� la Bullanguera mir�ndonos.
-"�sssshhhh, call�te!; ah� est�n saliendo; �eeehhh,
mir�los Elenita!, y todav�a no los tienen parados; esa Negrita va a gozar hasta
lo indecible"-. Se admir� la Morenota.
-"�Uy, qu� penes tan horribles y deformes tienen los dos!"-.
Exclam� sorprendida Estela.
-"S� mijita, tu conquista lo tiene muy poderoso; pero, ji,
ji, ji, ji, estos ya son tama�o familiar, o sea talla XXXLLL; Elenita, pas�me un
aguardiente y ahora si call�monos...."-.
Las tres figuras caminaban desnudas hacia el asiento natural
excavado por la acci�n de las olas; ella protestaba en vano e in�tilmente, ya
que sab�a que estaba condenada a ser fornicada por ambos y al mismo tiempo all�.
Su resistencia se limitaba a vociferar insultos, nada m�s.
Estela, curiosa, volvi� a romper el silencio para preguntar
en voz muy baja: "-Amparito, �qu� le piensan hacer?; no entiendo muy bien
todo el jueguito de ellos; pobrecita ella.."-.
-"Uno le hace en el culito y el otro en la chimbita, ambos
a la vez; qu� rico pa� ella; Estelita, se te acaba el mundo."-. Aclar�le su
consejera risue�a ante tanto desconocimiento.
Los gritos de ella y risas de ellos interrumpi� el breve
di�logo; Anacleto apuntaba con su falo erecto hacia su esf�nter; ella trataba de
evitar la penetraci�n vagino-anal simult�nea; delante de sus ojos ten�a a
Prudencio amenaz�ndola con su estaca refreg�ndosela en su rostro.
-"Solt�me Prude; me hacen pero di� a uno; ...... o
unu�atra� y el otru�alante pa� mama� ....... Pero, ay no, lo� do� a la ve� es
muy arrecho; nu�aguanto tanto banano......
El otro d�a me tuve que pasa� tu�el d�a en la cama y la
comae� Remedio se me�mput�"-.
-"Te lo dije Monita; �la escuchaste?; ya sabe c�mo es"-.
Le aclar� la Bullanguera a Estela.
-"Cay�te negra yorona; a vos te gusta come� mucho banano;
alevant� ese culo pa� que�l compae� Cleto te lo ensarte, y no chiy�s; abr� la
jeta pue�"-. La rega�� Prudencio.
-"Ay virgencita, libr�me d�esta� do�bestia�y su� estaca�;
se�ol diablo, yevat�lo� al infierno y que no me jodan ma�; cuando Remedio� no
puede, me toc� a m�"-. Rog� ella.
Amparo se nos acerc� arrastr�ndose en la arena, se coloc� al
lado nuestro y empez� a narrarle minuciosamente lo que suced�a entre los tres.
Yo le oprim�a las manos a Estela y la apretujaba pues la escenificaci�n me
excitaba; ella escuchaba y observaba silenciosa.
-"Anacleto la agarra firme de la cadera y la atrae; ella
se le est� sentando y �l se lo est� poniendo en el ojete; �ves como se muerde
los labios?, ya lo tiene entre las nalgas..
Y ahora el Prudencio se lo da para que se lo embabe con la
lengua, y mientras tanto Anacleto la sigue envarando...... se est� despatarrando
pa� que le entre todito....
Pero mir�la qu� dichosa, c�mo se lo chupa al Prudencio y c�mo
le amasija las g�evas; te fij�s, era pura patusquer�a de ella....... Ya ni
protesta de tan concentrada que est�......
Se est� voltiando pa� darle un piquito al Anacleto, ya se lo
est� comiendo enterito...... Le debe estar rebullendo el tripero; mir�, le soba
las g�evas a Cleto y orde�a al Prude...
El Prudencio est� impaciente; juemadre mir�selo, parece un
tubo de escape torcido....
Ahora el Prudencio se sienta en los muslos del Anacleto y le
echa a ella las piernas pa� rriba; desde aqu� se ve que le envar� bien el
culito....... �Juemadre, hasta el cuello!...
Ya le est� calando en la chimbita; mir�la como lambe al
Prudencio; ah� la tienen en s�ndwich, mir�la como se deja morder y
besuquiar....... �C�mo se sacude..!...
Al Anacleto le est�n llegando los de a caballo*, ve como le
tira el pelo y le muerde la espalda, y el Prudencio le muerde las tetas que ya
se las arranca.......[*Eyacular].
�C�mo palmotea y chilla ella!; est� arriba en el cielo con
dos chimbotes; los dos la est�n llenando por delante y por detr�s.... �qu�
sensaci�n tan bestial!, �qui�n pudiera!....
Monita, viste un show gratis, en vivo y sin molestias;
esperemos que se vayan"-.
Los tres se levantaron, recogieron sus hilachas de ropas y se
fueron perdiendo entre el monte y la noche. Ellos silbaban alegres y arrastraban
a Dolores desfalleciente y balbuceante.
La Catira indag� ingenuamente candorosa-"Amparito, y �eso
no le duele a una mucho?; �dos penes a la vez?; no me puedo imaginar c�mo puede
ser eso;... �dos hombres?... "-.
Amparo se dio cuenta de que la presentaci�n la hab�a
impactado y la anim� a intentar algo similar: -"Ay Monita no; ellos son muy
ordinarios y bestias, pero vos ten�s un Bizcocho mucho lo delicado pero potente;
ji, ji, ji, ji, y nosotras trajimos los consoladores.......
Tu conquista sabe hacer eso con tres dedos, que te muestre
c�mo es y si te gusta, ji, ji, ji, entonces te lo hacemos de verdad con �l y el
consolador de Elenita .......
Cre�melo Mona, es divino; int�ntalo y prob�s, no te va a
pasar nada; v�monos a la casa y all� hablamos, ya est� ventiando mucho y se nos
inflama la vejiguita, no pues"-.
Ella me reproch�: -"eso no me las hecho todav�a; me lo
tienes que mostrar esta noche mismo; �ego�sta qu� eres conmigo!, hoy me ense�as
esa caricia con los tres dedos"-.
Amparo aprob�: -"s� Monita, esta misma noche y ma�ana
venimos nadar en el d�a, vamos pues que el camino es culebrero, en la casita
hacemos hoy una fiestica bien bacana..."-.
La Bullanguera en acci�n
Regresamos cantando y danzando a la casa, el aguardiente nos
libraba de complejos y tab�es. La choza de Remedios y los dem�s obreros y
trabajadores estaban a oscuras. El motor de la planta el�ctrica dejaba escapar
sus �ltimos ronroneos y estornudos. Una tibia brisa quedaba.
Entramos a la vivienda de la familia propietaria; Estela
encendi� una l�mpara de petr�leo y se sent� en la salita. Se lament�
soslayadamente: -"ay pues, qu� cansada, tanto viaje y fincas; show en la
playa de los obreros...... Tanto Lulito y sus caricias, �uhmm, qu� divino...!"-.
La Negra bullosa se hab�a ido a su cuarto; Amparo beb�a de
una copa aguardiente; yo me limitaba a dejar que el tiempo transcurriese. La
noche apenas empezaba. La Bullanguera entr� a la salita, la Catira se acord� de
su propuesta en la finca de la monta�a: -"Elenita, ahora s�, cu�ntanos c�mo
fue la fiesta esa en San Andr�s; y las travesuras del t�o Anacleto"-.
-"Pero aqu� no Monita, nos ven de afuera; vamos a tu
cuarto"-. Corrigi� ella la propuesta.
-"S�, y ah� hay m�s espacio; llevemos el radio y las
bebidas; Elenita tiene raz�n, �qu� vacaciones tan ch�veres!; ven Lulito"-.
Complet� entusiasmada la Catira y me hal� hacia ella.
Nos pusimos c�modos en la cama y la Bullanguera inici� el
recuento de las an�cdotas en la isla.
-"Bueno sardinas, del t�o y Ruperto saben ustedes todas
las historias. Ruperto era ese berraco que le dec�an Tirofijo porque mujer que
tocaba, era mujer que pre�aba. Por all� est� en Mayami, se fue despu�s que dej�
barrigona a una pelada encopetada de La Ceja.
Mejor les cuento lo que me pas� en San Andr�s. Apronten las
quijadas pa� que se r�an a mand�bula batiente........ Ah� va pues... Sal�...
�Rico este jijuemadre aguarr�s!...
Enfrente del negocio nuestro hay una venta de ropa gringa
para mujeres; ah� trabajaba un pelado tan lindo y bien parado que se me mojaban
los calzones no m�s de verlo.
�l me hac�a ojitos y sonrisas siempre que llegaba en las
ma�anas y cuando se iba por las tardes. Pasaba a saludarme y a preguntar c�mo
estaba yo, el t�o, la Mona. S�, s�, pa� que tu Lulito se ponga celoso, ji, ji,
ji; dej�me y sigo con Luis, as� se llamaba......
Cuando �l estaba por ah� en la puerta sin nada que hacer, yo
revoloteaba y me agachaba pa� mostrarle mis piernas y mis nalguitas; �l me
lanzaba un silbido ........ Se me paraban todos los pelitos Amparito; �ay tan
chusco* que era el berraquito!.... [*Bonito].
Un s�bado en la tarde estaba yo cerrando y �l se me arrim�
para hablarme; lo hab�an invitado a una fiesta en una casa de unos amigos en la
playa y quer�a saber si yo lo acompa�aba; enseguida ven�a una amiga y pod�amos
ir los tres.........
Cerr� toda apurada y le dije que me ten�a que arreglar; en
eso lleg� la amiga que se llamaba Gloria, una hembra alta y buen�sima .... Me
salud� de besito y todo, como si nos conoci�ramos de mucho tiempo, me apechug�
ah� mismito....�uy, qu� leng�etazo!.....
El llam� un taxi y nos fuimos a la fiestica; nos sentamos
atr�s todos; ellos hablaban mariqueras y se re�an; ella de vez en cuando me
tentaba las piernas descaradamente y le met�a mano a la bragueta de �l;...
�uuyyy, qu� susto!, sin conocerla......"-.
-"Oiga Elenita, pero muy directa y atacona esa Gloria, ji,
ji, ji; segu�"-. Se burl� Amparo.
-"Ay s� pues, imagin�te; y yo toda inocente..... Llegamos
a la casa y se me sal�a la baba viendo tanta luz fluorescente; m�sica pa�
sacarle polvo berriondamente al suelo; mucha algarab�a sal�a de adentro... M�s
que en las ferias del pueblo cuando est�bamos peladas.
Nos bajamos y pasamos, me qued� pasmada con tanto lujo; una
piscina bacana con muebles de m�rmol; toldos con comida y bebidas; pero.........
no ve�a personal pa� atender...... El Luis nos dijo que nos sent�ramos y ya
volv�a......
La Gloria esa me echaba unas miradas que se me reventaba el
caucho de los calzones; por fin vino el pelado con un amigo; �ste era m�s pispo
que el Luis, �qu� hombre!.. Parec�a uno de esos artistas* gringos de cine.....
[*Actores].
Las rodillas me tatareteaban* y doblaban; si me dice que pa�
la habitaci�n, Amparito, sin complejos me lo llevo............... Ji, ji, ji,
ji, �qu� lindura de hombre!.. [*Temblaban].....
Me salud� con besito en la mano; �jijuepuerca!, casi me voy
de culo a la piscina con tanta finura; Monita, pa� vos que te placen los manes*
bien educaditos.. [*Hombres].
Que ya me serv�a lo que yo quisiera; que si me quer�a
arreglar, pod�a pasar a una pieza� pa� m� solita; que no tuviera pena, que
estaba en mi casa.......... [�Habitaci�n, cuarto].
Entonces me llev� hasta una habitaci�n, el closet lleno de
ropas car�simas pa� mujeres; de esas que le gustan a ust� Estelita...........
Trajes largos con escote en punta hasta el ombligo y atr�s en U hasta las
nalgas, solo dos tiritas en nudo sobre los hombros.....
Unos calzones como tangas mijita, no escog� ninguno pues eran
tantos; me sac� un juego de ropa y que me lo probara; me puse esos trapos y me
dijo que me los pod�a quedar y sali�..... �ah!, y si quer�a, que ah� estaba la
ba�era para refrescarme..
Me empelot� y me met� al agua tibia, �rica mijita!; estaba
tirada sob�ndome los senos y la chimbita con una esponja jabonosa sac�ndome el
sudor y las ruyitas cuando ........
�Juepuerca!, de repente me llega la amiga de ellos; las
puertas no ten�an llaves y pod�as entrar ad�nde quisieras; la g�evona esa se
sent� en el borde de la ba�era y me dijo:
<<Negrita, vos est�s muy buena; dej� que yo te lavo y despu�s
te ayudo a vestir; �qu� cuquita* tan peludita ten�s!, a ver pa� toc�rtela,
estamos en confianza.>> [*Vulva].
Me qued� paralizada oy�ndola hablar; me meti� mano de una vez
en todos mis hoyitos; �uy, pues!, un macho no te manosea tan tenaz como esa
Gloria; me ba�� y me sec�......
Despu�s fuimos al escaparate para escoger mis calzones y
zapatos; mi sost�n lo ech� al basurero dizque porque <<era para viejas
rezanderas>>, imag�nese Monita"-.
Nosotros tres nos desbarat�bamos de risa viendo su
gesticulaci�n y m�mica, sus palabras eran un verdadero elixir adicional al licor
que beb�amos mientras la escuch�bamos narrar su aventura.
Apur� un trago largo del aguardiente y prosigui� con su
cuento: -"ella sac� unos calzones que eran s�lo dos tiritas; me los sub� y se
me met�an por todo pa� dentro, a duras penas me tapaban los pelitos,...... y
atr�s me hac�an cosquillitas las lentejuelas, ji, ji, �qu� plato!...
No dej� que me pusiera sost�n y el escote del vestido era muy
abierto, si mov�a los brazos, se me sal�an las tetas por los lados, ji, ji, ji;
me dio unos zapatos de tac�n alto....
Me mir� toda comelona: <<Est�s como pa� chup�rtelo todo,
Negrita; as� te ves mejor, us� este perfume>>.. Y me roci� con un aerosol que
ol�a a pura fruta concentrada; <<ahora s�, salgamos que ya llegaron los
invitados>>......
�Monita, Amparito!, �qu� mujeres tan pisp�simas!; los trapos,
todo muy caro y lujoso:
<<no te acomplej�s, vos no est�s menos que ellas; ven� y te
presento unos amigos>>.. Me dijo la berraca esa y me agarr� de una mano.......
como a una sardinita inocente...
El Luis bailaba con una mujerzota impresionante y bien
pegaditos; una nariz toda respingadita, ojos negr�simos y pelo como el de la
Mona, pero negro; tetas como globos, alt�sima y con tacones aguja,..... ella le
dec�a cosas y �l se re�a, �jijuemadre ese!...
�Un culo mijitas!, pa� despu�s dejarse llevar al
cementerio..... El Roberto, el amigo de Luis, tambi�n con una hembra pa�
so�ar..... As� las otras parejas, todas elegantes....
Juepuerca, y yo me enredaba con esos tacones m�os tan altos,
me toc� sentarme pa� no cagarla y pasar una pena; la Gloria me trajo un cocktail
muy raro,... pero sabroso .....
Estuve ah� un rato esperando a que me sacaran a bailar y
nadie vino, me sent�a ya como cucaracha en fiesta de gallinas .......... Echaba
ojo pero nadie me pescaba........
Le dije eso a ella y me contest� que <<esta es una fiesta muy
especial, no te preocup�s, ven� damos una vuelta por la casa, es muy grande y
adentro pasan muchas cosas.....
Mir� al Luis, ya se est� yendo con su machota que se levant�,
vamos a gatiarlos; soy mirona, me fascina ver una pareja cuando est�n cogiendo
sin inhibiciones>>...
El jijuemadre del Luis me hab�a llevado a la fiesta y me
dejaba por ah� tirada como un papel cagao, y �l se iba a encaram�rsele a la
hembrota esa; �uys, hombres jijuetantas!"-.
Estela se contorsionaba a causa de las carcajadas; Amparo se
atragantaba con el licor y yo ya estaba tendido completamente en el lecho por la
misma raz�n. Elena era un aut�ntico vendabal de palabras, gestos. No cesaba de
hablar, como si le hubiesen dado cuerda. Prosigui� alegre.
-"Sal� Monita, sal� Papito, ya lo estoy viendo m�s pispo
que otros d�as, ji, ji, ji, perdona Mona; sal� Amparito, bueno..... La Gloria me
llev� pa� dentro dizque a gatiar las parejas encamadas, entraban y sal�an, ji,
ji, ji; as� ser� en las casas de citas* ...[*Burdeles]..
Yo caminaba inc�moda y la sonsa esa se burl� de mi :<<la
tanga te est� aru�ando las rajitas, �verdad Negrita rica?; quit�tela, nadie se
dar� cuenta que no ten�s nada debajo; ja, ja, ja, es m�s pr�ctico, vas a ver
ahora; y es m�s sensual con todo al aire>>....
Las lentejuelas y encajes me rascaban ah�, ella me insist�a:
<<vamos a tu pieza y de paso te pongo una cremita pa� que no se desholle* la
cuquita, ser�a l�stima; ja, ja, ja, ja, y el culito, los necesit�s sanitos, ja,
ja, ja; esto apenas comienza>>.... [*Deshuelle].
Y me llev� hasta mi cuarto; los dem�s bailaban todos
apechugados chupando lengua ....
Me alz� la falda y me sac� el calzoncito, sac� un tarrito del
armario y me unt� la cremita esa m�gica; �uyyy mijitas, qu� escalofr�o!, ten�a
una mano tan incre�ble pa� masajear....
Monita, tu Lulito no se le queda atr�s con esos masajes que
�l te da, ji, ji, ji, ji, ji......."-.
Me lanz� una furtiva mirada record�ndose de nuestro primer
encuentro y masaje....... Continu�.
-"Me embadurn� todita y entonces me volvi� a agarrar de
una mano y me mostr� la puerta: <<ahora s� Negrita, vamos pa� que ve�s
espect�culo en esta fiestecita>>.....
Las puertas de los cuartos estaban abiertas, me hizo se�as de
que ssssshhhh y viera pa�dentro........ �Juemadre, qu� cuadro mijitas!..........
�No se lo imaginan!......
La hembrota esa de nariz respingada y tetas como globos ten�a
al Luis arrodillado y se lo estaba sembrando... Lo ten�a todo crucificado y le
restregaba las tetas en la espalda...
Y con una mano le hac�a la paja al Luis; �l sudaba y cerraba
los ojos como inspirao....
Imagin�nse, la mujer era un cacorro* disfrazao, y Luis un
marica�; ella estaba en bola y un cuerpo pa� so�ar, pero abajo con una lanza
como la del Papito este aqu� al lado.. [*Activo en el coito entre
homosexuales..... �Pasivo]....
Ah� ca� en cuenta porque era tan fino y cort�s el Luis, hasta
delicado, como una macha"-.
-"�Ay Elenita!; ji, ji, ji, ji; �qu� decepci�n pa� vos"-.
Se entrometi� Amparo mof�ndose..
-"S�, s� pues; la Gloria se burl�: <<te jodiste Negrita,
al Luis le gusta que se lo coman en lugar de comer cuquita peluda y jugosa como
la tuya; y todav�a no has visto lo m�o...
Vamos a ver d�nde est� el Roberto, �se es m�s perra todav�a,
no te amargu�s>>...
Me quit� los zapatos pa� no hacer ruido y caminar mejor, esos
tacones eran muy altos; seguimos hacia otra habitaci�n, de all� sal�an quejidos
como si estuvieran en una org�a...
�Jay mijitas!; ese Roberto s� que era bien comel�n........
Ji, ji, ji,ji ; la pareja se lo ten�a montado a lo perro; un negro de African
Look y con una penca pa�sustar hasta al diablo; el negro se lo sacaba y met�a
con candela; el Roberto se retorc�a y arquiaba sin control..
Pa� completar, por delante el parejo del baile se lo met�a
por la boca pa� que mamara esa chupetota roja y gruesa; el Roberto gem�a ahogado
y feliz; esa era la chilladera que hab�amos escuchado........ Le daban tanta
bomba que lo hac�an sacudir y temblar...
Todas las mujeres eran hombres disfrazados; �pero qu� papitos
Amparito!......
En eso o�mos unos ladridos afuera; ji, ji, ji, mijitas, lo
mejor estaba por venir. La Gloria me dijo que dej�ramos al Roberto ah�
ensandwichao y fu�ramos a mi cuarto porque desde ah� se ve�a la terraza y la
piscina; �juy, juy, juy!, esper� y les cuento, pa� morirse.
En la piscina estaban unos maricas pichando y el perro en el
borde les ladraba juguet�n; Glor�a me explic�: <<al perro lo tienen amaestrado y
est� nervioso porque no lo dejan; ahora cuando salgan ver�s un cuadro nunca
visto, ja, ja, ja, dej�me, traigo tragos>>....
Los dos salieron empelotos y con sus chimbos parados; el
perro los leng�etiaba y ellos se dejaban..... Echaron un cara y sello pa� ver a
qui�n le tocaba dejarse clavar primero...
El uno se puso en cuatro y el otro lo ensart� di� una; el
cacorro suspir�: <<dame la jeta pa� darte un besito>>; el otro se emberrac� y le
contest� pujando: <<uhm jueputa; no, no, d�jese de g�evonadas raras, nada de
besos; yo no soy marica...>>.
Mijitas y ese perro tan juguet�n; se puso a lamberle las
g�evas y el chimbo parao al marica que estaba todo emocionado....... Hasta la
cara le lamb�a, ji, ji, ji.......
Despu�s se puso detr�s del cacorro pa� mont�rselo, ese
berraco empez� a gritar dizque <<quite de ah� perro cabr�n; vaya a pichar con su
mam�>>; el perro ladraba y se le estaba encaramando, �l no pod�a hacer nada, ji,
ji, ji...... �Qu� cuadro tan bac�n!....
En esas lleg� Gloria y se carcaji�: <<ja, ja, ja, tom� un
cocktail de ron; te fijas, el perrito se los ha cogido a todos cuando los
encuentra por ah� en parejas, el due�o de la casa lo mand� amaestrar pa� cuando
est� solo sin machucante; ja, ja, ja, mir�, lo tiene listo>>.
Sorb� del vaso, muy refrescante pero fuerte el coctelito ese;
ella se puso seria y me dijo:
<<bueno Negrita, ya vimos bastante show; vayamos pensando qu�
hacemos las dos.....
Estamos muy buenas pa� estar perdiendo el tiempo gatiando
maricas cogiendo; �qu� se te ocurre?.... A m� me gustan los hombres y las
mujeres; si quer�s, vos y yo, rico>>.....
Los gritos de afuera pararon su carreta: <<chite, perro
jijueputa; chite y baj�te pues; �uy hermano, me est� echando!;.. me toca, ah�
voy yo tambi�n.. Despu�s cambiamos>>..
La Gloria cerr� las cortinas, estaba bastante excitada y me
miraba toda comelona y con muchas ganas de hacer rico: <<dej� ya de gatiar a los
pendejos esos; no me has dicho qu� quer�s hacer; �buscamos un man* pa� las dos?;
ven�, vamos a la pista de baile y nos traemos uno que no sea tan partido; de
pronto hay uno de verdad.>> [*Hombre]"-.
Nosotros tres segu�amos su narraci�n entre sorbos y
carcajadas; Estela me arrullaba con besos y licor que compart�amos de la misma
copa; Amparo estaba muy curiosa por conocer m�s detalles, as� como el desenlace
de la aventura de la Bullanguera. La aguijone� para que prosiguiera....
-"Cont� Elenita, cont� m�s; seguro que hab�a una
sorpresita pa� vos, �verdad?; a lo mejor coronaste*, �o te coronaron?, qu�
fiesta; �verdad Monita"-. [*Obtener un objetivo]..
Estela asinti� con observaciones propias de ella: -"s�
Amparito, pero mucho desorden"-.
-"Bueno, bueno peladas, d�jenme seguir porque todav�a hay
mucho papel pa� cortar....
La Gloria me met�a mano y yo no pod�a pensar, se hab�a fumado
un cacho de marihuana y estaba acelerada, a mil; yo no atinaba a coordinar con
tanto amasise suyo; qu� cicl�n..
Le dije que a m� me gustaba mucho el Luis, aunque fuera
mariquita; se alegr�: <<eso es lo de menos Negrita, pa� todo hay soluci�n y
nobody is perfect, ja, ja, ja, ja, ja, ja.......
Vamos a ver d�nde est� y nos lo traemos pa� que se coja una
cosa buena de verdad>>..
Fuimos a su pieza, pero ya no estaba all�; pasamos por otros
cuartos y nada; A Roberto lo ten�an ahora entre tres d�ndole clavo, �l chillaba
feliz pidiendo m�s, ji, ji,ji, ji.....
<<Vamos al sal�n de baile, all� debe estar>>, se le ocurri� a
ella; y pa�lla nos fuimos; todo era a media luz y las parejas una sola melod�a
de sobadera y tentadera....
Estaba en la barra del bar hablando con el barman, otro
marica; nos le acercamos y nos salud� muy cordial: <<hola se�oritas, �d�nde
estaban?; no pues, se me perdieron, �la est�n pasando bien?, �un traguito?...
Juancho, querido; un cocktail para las damitas..>>
<<Luis, que nos las lleven a la pieza de Elenita, ven� y
hablamos un rato, bailamos y la pasamos mejor que aqu� con tanta luz y ruido>>;
le dijo y le puso la mano en la pierna...
Pens� un ratico y sonr�o; qu� dicha pa� m� peladas, �l
acept�: <<Juancho, querido; me voy con las se�oritas; m�ndame las bebidas all�
con una de las muchachas, al cuarto con aire acondicionado y ba�era; y que no me
llame nadie, dame las llaves>>...
Detr�s de nosotros iba una copera con el trago; seguro un
marica tambi�n; Luis le quit� la bandeja y la hizo regresar al bar; entramos y
la Gloria cerr� la puerta de un solo trancazo; se sent� y prendi� un cacho, se
lo pas� y �l aspir� tanto que se atragant�.
�l pregunt� qu� ten�amos planeado; ella no me dejaba hablar:
<<Luisito querido, Elenita quiere que te la mont�s; mir�la tan buena que est�, y
la tiene toda peludita; yo se la roci� con la loci�n tuya...... Y con esa
cremita pa� las irritaciones....
El culito es una dicha, hac�le el favor y te merend�s uno de
hembrita; de vez en cuando no te caer�a mal, pa� que vari�s, es tu vecina de
trabajo; nos hacemos los tres>>...
Saben peladas, entonces ella se desnud� y result� que era un
macho tambi�n la tal Gloria esa, era bisexual; �uyyss, que dilema pa� m�!; �qu�
hac�a?, �con cu�l?.... Ay, pero saben; as� a medio parar y ya me sent�a mojadita
ah� abajo; sabroso se ve�a"-.
Amparo curioseaba: -"ji, ji, ji; �d�nde te metiste
Elenita?; �c�mo hiciste?, dec�......"-.
La Bullanguera sorbi� una vez m�s de su copa y reinicio su
jocosa y acrob�tica narraci�n.
-"Ella me calm� dici�ndome dizque: <<Negrita, hacemos un
trencito y vos sos la locomotora; cumpl�s tu sue�o de comerte todo lo del
Luisito, ja, ja, ja......
Y yo le hago a �l; y si te quedan ganas me lo das, le llevo
muchas ganas a esa cuquita tuya; y mir�, lo m�o no est� mal; �ya te comiste uno
as�?, me lo cuido mucho, ja, ja>>.
No estaba mal la cosa del trencito, yo adelante y ellos
detr�s m�o; le dije que s� y Gloria me solt� los nudos del vestido; quede en
bolita pelada y a ella se le fue templando....
Yo me le arrim� a �l y se lo agarr� y corcobi�; ella se subi�
a la cama y le grit�: <<�empelot�te pues Luis!, o es que la Zenaida te dej�
escurrido!; Elena, tumb�lo y nosotras lo desencu�ramos, es un poco penoso, ja,
ja, ja, ja, ja; y acomplejado>>...
Mijitas, lo empuj� y ella le arranc� sus trapos finos y
caros; sac� de una gaveta una crema: <<vengan los unto pa� que resbale bien y
ninguno chille que le arde>>...
Me puso la cremita en la rajita del culo, lo mismo con el
Luis. Y empez� la acci�n. Uys, yo temblaba toda emocionada; ella era muy corrida
y ten�a una mano divina..�Riiico!..
Me lami� en una oreja y me murmulle�: <<Negrita, pon�te como
un perro pa� que �l te pueda montar sin dolor; tu cuquita debe estar pidiendo
que la llenen ya>>.....
Y al Luis le dijo:<<hac�le sin fuerza; acord�te que es una
hembrita y linda.... Met�selo de a poquito... No te afan�s, Zenaida se fue con
el jefe de la casa.. y no vuelve hoy>>.
Mijitas, me entr� todito; l�stima que no lo ten�a como el del
Papito este de la Mona; Gloria estaba a mi lado pendiente, me bes� para
premiarme: <<muah, sos una hembra ch�vere; ahora yo me lo monto a �l y lo
bombeo, vas a sentir cada golpe m�o y suyo>>..
Luis empez� a pujar, pues el chimbo de la Gloria si era
poderoso; ella le daba duro a �l, pero �l a m� no; entonces ella se le baj�:
<<dej�me a m� ahora, vos no la est�s haciendo gozar nada...................
Negrita, vas a probar el m�o; no te mov�s que me lo voy a
lavar pa� merendarme esa cuquita tuya>>... Me pas� la mano por entre la rajita,
�uy no pues!...
Regres� bien lavado y perfumado; me agarr� y me puso de
rodillas: <<bueno Negrita, goce pues>>... �se si lo sent� mijitas; sus tetas se
estregaban sobre mis espaldas......
<<Luisito querido, ya la tengo bien lista; escuch�la
suspirar; ahora s�, ven� vos y te me mont�s; pon�mele algo de salivita y la
restreg�s con la cabeza hasta que se empiece a hundir en m�, me lo met�s todo
porque vos no sos muy armado como Zenaida .......
�Rico qu� es esto!, me como una cuquita y un chimbito de
marica.... No, no te veng�s todav�a, domin�te pa� llegar los tres........
Negrita, volti� la carita fina que ten�s pa� chuparte la boquita.......>> Me
volti� como pude un poquito y qu� chuponazo me dio....
�Uy mijitas!, �qu� pelea tan tesa!; esa Gloria se dominaba
todo el tiempo pa� no llegar:
<<Elenita, te lo voy a meter ahora en ese culito paradito y
sabroso que te mand�s....
Sos muy corridita y lo men�as sabroso coquetona...Ten�s una
cuquita agradecida, se te contrae cuando est�s excitada; qu� dicha pa�l var�n
que te coge.. Hac�la contraer, as�, otra vez Negrita desordenada.., s���, como
si me lo mamaras me haces, cog�s rico....
Luisito, vos te qued�s ah� encima m�o, masaji�me las g�evitas
pa� echarle bastante l�quido a la Negrita linda esta que me estoy
merendando........�Tan linda ella, muah!..
A ver, abr� el huequito; �qu� culito tan estrechito el
tuyo!... Voy a bombiar porque ya no aguanto m�s...Luisito ech� vos, ven�te
tambi�n..... S� Negrita, chill� parejo que est�s feliz,.... chille y grite,
desah�guese, su�ltese sin complejos, as�, m�s, grite m�s...>>
No hermanitas, �qu� aterrizada!, los dos encima m�o; Gloria
me apresaba entre sus brazos, sus tetas templadas me daban escalofr�o en la
espalda y Luis le echaba a ella en su culo cualquier cantidad de leche.....
�uuuyyy, no pues!... Yo era la locomotora...
Gloria, en medio de nosotros, me amasaba mis teticas,
repart�a besos y caricias: <<uhm, muah, uhm ,muah, descansemos un ratico y lo
repetimos...... �qu� tiradera!....
Negrita, tenemos que hacernos un sesentainueve feroz y el
Luis que escoja un culito o tu chimbita mientras vos y yo nos chupamos nuestras
pipitas.... �te parece?...>>
Yo estaba tan perdida que di� una me fui voltiando pa�
echarle mano a su pepota; me dijo que me esperara porque se ten�a que lavar; ji,
ji, ji, se me hab�a olvidado que hab�a sido un polvo en mi culo ........... Me
lo sac� con mucha ma�a, todav�a le chorriaba.......
Pero, vino pronto y nos pusimos a darle con ese gran
sesentainueve; y al Luis le qued� gustando mi culito; �qu� puter�a mijitas!.....
Gloria me la arrancaba ya a chuponazos.......
Yo le mamaba la cabeza y las g�evas, corcobiaba como una
yegua ... Y el Luis me acariciaba el ojito negro con la cabecita chiquita que
ten�a, entr� todita,.... todita...
Me fui y no supe m�s; cuando me despert�, Gloria ten�a al
Luis debajo clavado y le daba desesperada hasta que lo hizo llegar y �l llen� la
s�bana todita con su leche........
�l se tranquiliz� y ella se me arrim�: <<ven� y te doy lo
�ltimo que me queda; pon�te de medio lado y te echo uno pa� dormirnos; dame ese
culito pa� c�, culioncita p�cara>>.
Ay s� mijitas; me dej� que me hiciera suya otra vez; pero
ahora ya fue con mucha calma; me penetr� suavecito, asi como dec�s vos Monita;
bueno ya ten�a tanta crema y lechita de ambos que entraba solito y sin esfuerzo;
me abraz� y me agradeci� por esa noche:
<<Negrita linda, la pasamos bien ch�vere; hac�a tiempo que no
merendaba completo; o era cuquita o culito solamente; pero no ambas cositas a la
vez...... Sent�me, estoy en ti..
Luisito, Luisito, tambi�n estuviste bien....... Tenemos que
hacernos una simult�nea vos y yo; yo en ti y vos en m� .... Te ten�s que poner
un refuerzo, el m�o si alcanza y sobra..>>
-"Pero, �qu� paso al d�a siguiente?; �te dejaron ah� sola
y tirada?; habl� pues"-. Amparo se hab�a entusiasmado mucho con la historia;
nos miraba constantemente para otear la reacci�n de la Catira; �sta se divert�a
bastante tambi�n con la narraci�n de la Negra bullosa.
Elena sorbi� de su vaso, tom� aire y prosigui� con su cuento:
-"no mijita; en la ma�ana nos llevaron desayuno a Gloria y a m� a la camita;
Luis se hab�a ido no s� a qu� horas......
Despu�s nos fuimos a la piscina a nadar en cueros mijitas;
�qu� plato!, ella de pelo largo y tetas como le gustan al Papito de la Mona,
repletas y paradas; un culo levantamuertos; y pero con un morcill�n colg�ndole;
ji, ji, ji, ji .... No le par� pelota, qu� chimbo tan rico..
Saltamos al agua y me dej� hacer de ella todo lo que se
imaginaba, no hab�a nadie por ah�; los otros dorm�an enguayabados* todav�a;
hasta el perro pereziaba..... Me ech� un abrazo a lo rabu� e mono que casi me
ahoga; qu� cuerpo el de esa berraca...[*Resaca ]...
Ya a mediod�a me cans� de tanta meniadera y me fui al
apartamento m�o..... El lunes me encontr� con Luis y me salud� m�s efusivo que
las otras veces, pero marica es marica...
Por ah� me dio el tel�fono de Gloria y la llam� pa� cachar un
rato y nos re�mos mucho; esa semana se regres� a Puerto Rico, estaba de
vacaciones en San Andr�s.........
Al siguiente s�bado vino Luis con la que llamaban Zenaida....
Ten�an otra fiesta y me quer�an invitar, esta Zenaida era mucho m�s grande y
fogosa que la Gloria, ji, ji, ji...
El Luis me la recomend� porque la conoc�a desde hac�a alg�n
tiempo.... Ji, ji, ji, acept� mijitas, era una nueva experiencia y no la pod�a
desperdiciar.......
Me sacudi� hasta hacerme pedir perd�n.... �Qu� Zenaida tan
ardiente!, pa� irse al infierno pues.... Y los fines de semana ten�a programa
fijo con los dos, me desquit�...
Monita, bien pueda, me puedes mandar pa�ll� cada vez que
quieras.. �Qu� riiiico!"-.
Nos recuperamos de las risas; Amparo tom� la iniciativa y
llen� los vasos con m�s aguardiente; Estela y yo segu�amos compartiendo una
misma copa, ya que ni ella ni yo eramos muy amigos de esa agua venenosa. La
Morenota se dirigi� a todos, estaba algo alegre con tanta ca�a y deseaba que
hici�ramos algo fuera de lugar, sus palabras eran muy claras e insinuante
gesticulaci�n.
-"Monita, coment� la historia de Elenita; a m� me pareci�
brutal, bestial, y �vos?......
O prefer�s que hagamos nuestra fiestica privada y bien
bacana; �qu� dec�s?...
Tu Lulito te prometi� que te iba a mostrar algo nuevo en el
arte de amar, �verdad?..."-.
La Catira se arregl� su cabello suelto y trat� de conservar
la calma ante la andanada: -"ya s� porque no la encontraba cuando llamaba los
fines de semana, por ah� levantando de todo lo que se le presentaba; �qu�
desordenada!, con un homosexual y un bisexual, y en la misma noche y cama; ji,
ji, ji, y un perro malcriado, ji, ji, ji, ji..... �qui�n lo creyera!..
Elenita; la noche est� bien clara, apague la l�mpara que no
hace falta la luz y ponga el radio a bajo volumen........
Amparito, traiga las cosas esas de ustedes y me ense�an lo
que le hicieron el Anacleto y el Prudencio a la Dolores; ap�rense pues;.....
muah Lulito"-.
El desayuno estuvo bastante animado al d�a siguiente; todos
cuatro nos sent�amos reconfortados; Remedios, ayudada por Dolores, tra�a y
llevaba bandejas y platos; los ni�os esp�aban por las ventanas y rendijas de las
puertas en medio de risillas nerviosas e inocentes. Amparo se fij� en Dolores y
le pregunt� maliciosamente: -"Dolores, �que ten�s?, �por qu� camin�s as�?"-.
-"Ay ��orita Amparo, ayel fui a la playa y me resbal�, me
fui de culo en una piedra y m�et�n doliendo los ri�ones putamente, pero ya �t�
pasando"-. Y desvi� su mirada.
La Morenota nos susurr� muy bajamente: -"�oy� Monita?, se
resbal�, ji, ji, ji, �y vos?"-.
Estela impus� orden a su manera: -"ya est� bien peladas,
terminen para irnos pronto"-.
Esas dos semanas siguientes transcurrieron veloces debido a
las muchas actividades y excursiones que ella hizo organizar. Pasamos unos d�as
en una playa totalmente desierta, cuyo acceso era �nicamente por lancha.
Prudencio y Anacleto nos llevaron hasta all�, descargaron las cajas y armaron la
carpa entre unos cocotales; colgaron los mosquiteros y hamacas. Nos dejaron
solos.
En ese sitio s� pod�amos estar sin fisgones; ellas nadaban
totalmente desnudas para broncearse y dorarse, aunque las dos bullosas no
necesitan color alguno. Estela adquiri� un tono suavemente bronceado; por las
noches no me cansaba de lam�rsela y cabalgarla; ello gracias a las raciones de
pescado que Prudencio y Anacleto tra�an en el bote. Al volver a la finca,
Remedios se sonre�a a escondidas en su cocina cuando Estela ordenaba qu� se
deber�a preparar para comer. Pescado.
Yo me hab�a olvidado de todas las preocupaciones
universitarias y laborales y me hab�a consumido a disfrutar la estancia en aquel
para�so situado en el Golfo del Dari�n. En la finca hab�a mucha actividad, pues
era una producci�n bananera bastante grande. No supe exactamente la extensi�n.
Una ma�ana, cuando ya la noci�n del tiempo hab�a desaparecido
de mi conciencia, se me acerc� ella muy pensativa y cabizbaja: -"Lulito,
dentro de dos d�as nos regresamos; tres semanitas se pasaron volando; tenemos
que empezar a organizar lo que nos vamos a llevar; �ay!"-.
Llam� a Prudencio y a Anacleto para que llevaran el campero a
revisarle las ruedas y despu�s lo cargaran. La realidad se hac�a presente de
sopet�n; ella estaba pendiente de todos esos detalles, yo me hab�a limitado a
conocer y degustar todo lo que me hab�an ofrecido ellas; los obreros de la
finca; las mujeres de ellos; las gentes en el caser�o cercano. Mucha
hospitalidad campesina.
Una vez impartidas las instrucciones, me asi� una mano y me
llev� aparte: -"esta noche ser� la �ltima aqu�, ma�ana tenemos que acostarnos
muy temprano y madrugar para tomar la carretera hasta la casa en la monta�a;
Pachita nos espera..
Hoy al atardecer nos perdemos con una sola mula, una hamaca,
dos cobijas, unas toallas y algo de merienda para esta noche y el desayuno......
Elenita nos preparar� todo eso...
Quiero pasarla contigo en la playa aquella que conocimos;
qui�n sabe cu�ndo volvemos juntos por aqu�, en diciembre tengo que ir a Mayami y
no es posible venir......
Las peladas ya saben y se quedan aqu� para que nadie nos
siga; nos llevamos el radio y pasamos la noche all� solitos t� y yo; con las
olas y la brisa, la luna, las estrellas...."-.
Dos d�as despu�s, muy temprano, iniciamos el camino de
retorno hacia Medell�n. Llegamos esa tarde a la casita monta�era y la campesina
Pacha, se hab�a esmerado para recibirnos. Esta vez no habr�a ba�o con agua de
s�bila, ni excursi�n al remanso; mucho menos visita a la gruta.
En la madrugada salimos con termos llenos de caf�; unas
empanadas y arepas que hab�a fre�do Pacha para el hambre durante la traves�a de
regreso a la Capital de la Monta�a.
Las dos bullosas volvieron a caer en un mutismo let�rgico
ocasionado por el fresco aire de esos parajes andinos. Se me semejaban a osos
invernando al verlas envueltas en los ponchos y las cobijas de lana. Solamente
observaban con los ojos vac�os y desorientados.....
El sol ca�a ya cuando llegamos al Boquer�n 1 e iniciamos el
descenso; unas curvas y apareci� a lo lejos, en el valle, la ciudad. Aceler�
para arribar pronto a la casa. El cansancio nos abrumaba.
Bajamos s�lo lo necesario y nos retiramos a descansar. Las
dos bullosas ni se notaban en el cuarto de al lado; Estela se enconch� en mis
brazos e inici� un soliloquio de agradecimiento por haber compartido con ellas
esas tres semanas. Mi pr�xima pasajera ausencia la acosaba un poco.
-"Lulito, fuiste muy comprensivo al venir con nosotras a
la costa...... El otro viaje que hagamos, lo organizo mucho mejor.......... Nos
vamos los dos nada m�s y salimos a acampar solitos... Nos llevamos a Dolores
para que nos cocine, ver�s qu� lindo es ....
Una cosita, pronto te vas a tu casa en Venezuela, me quedar�
sin ti el resto de tus vacaciones, muah; Lulito, perdona mi intromisi�n en tu
vida; te voy a pedir otro favor; claro, t� decides, pero piensa un poco en m�;
solita en esta casota esper�ndote.....
�Por qu� no te vienes antes?, all� no haces nada; aqu� me
tienes a m�.... �uhm?"-.
Silenci� para escrutar en sus ojos llorosos; la abrac�: -"sab�a
que me entenderias, muah, te adoro; aunque estamos un poco cansados por el viaje
ven y nos amamos; muah, s�, as�, �uhmmm qu� vacaciones tan divinas!"-.
Una noche interminable fue aquella; estar�amos casi dos
semanas sin vernos y por ello la pasamos casi en vela. Repasamos al pie de la
letra todas las lecciones de entrenamiento anteriores.
Por la tarde del d�a siguiente ella me acompa�� al aeropuerto
y part� hacia Caracas. Me despidi� con un beso y una l�grima penosa; no pod�a
faltar nunca su sinceridad en esas situaciones.
Me estar�a all� s�lo una o dos semanas, luego retornar�a para
cumplirle lo prometido.
Continuar�. El pr�ximo cap�tulo se titula: Un cofre, una
llave. XV - Una encrucijada