Relato: Vacaciones especiales







Relato: Vacaciones especiales

Me llamo Laura, soy abogada y dicen que muy buena (en m�s de
un sentido�).


No es por presumir pero se puede decir que tengo bastante
�xito entre el sexo masculino aunque a m� lo que realmente me va es el femenino.
Para que os hag�is una idea tengo 35 a�os, soy morena con el pelo cortito, ojos
color miel, labios carnosos y siempre dispuestos a una sonrisa; no soy muy alta
pero ni falta que me hace: mido 1,65 y todas mis curvas est�n donde tienen que
estar�.




Hace cosa de tres a�os me propusieron dar unos seminarios de mi especialidad
(Derecho Penal) en la Universidad y, claro est�, no pude dejar pasar la
oportunidad. Al principio me cost� hacerme con la clase donde hab�a unas veinte
personas entre chicas y chicos y todos ellos muy j�venes e inquietos.
Finalmente, y al cabo de poco tiempo, consegu� entablar una muy buena relaci�n
con todos ellos, aunque hab�a un grupito de cinco personas (tres chicas y dos
chicos) que eran mis preferidos: por una parte porque realmente estaban
interesados en mis clases y por la otra porque eran muy guapos y simp�ticos y
enseguida me hicieron sentir parte de su grupo.



Las tres chicas eran Lali, Beth e Irene. Lali ten�a una
preciosa melena rubia, ojos grises y risue�os, un cuerpo que bien pod�a haber
sido modelo y adem�s era muy simp�tica y abierta; Beth era morena y con unos
ojos preciosos de color verde, era m�s bien t�mida pero se dejaba llevar y sab�a
divertirse como el que m�s; e

Irene que era la m�s guapa del grupo, tambi�n morena con unos pechos y con un
aire un poco varonil, siempre con pantalones y camisa.



Los chicos eran I�aki y Carlos; simp�ticos hasta decir basta
y con unos cuerpos muy bien formados por horas de gimnasio y cuidados (vamos,
unos metro sexuales al uso).




Yo sol�a dar mis clases los jueves y viernes por la tarde y con el tiempo
empezamos a quedar cuando acab�bamos para tomar unas copas y charlar. Un
viernes, cerca de las vacaciones de Semana Santa, est�bamos charlando de lo que
�bamos a hacer en esas fechas y unos y otros se quejaban de que poco pod�an
hacer con sus escasos recursos econ�micos (todos trabajaban y estudiaban al
tiempo, pero siempre iban justitos de dinero)� entonces se me ocurri�
proponerles un plan: yo dispongo de una casita, con su jard�n y su piscina en
una zona muy tur�stica de la costa y si les parec�a bien pod�amos ir hasta all�
en coche y pasar unos d�as; el �nico gasto que tendr�amos ser�a la comida; se
miraron entre ellos y finalmente todos aceptaron.





Bueno, pues all� est�bamos pasando unas mini-vacaciones todos
juntos; el ambiente no pod�a ser mejor; nos est�bamos divirtiendo� La segunda
noche, despu�s de una cena estupenda, con vinito y licores incluidos, salimos al
jard�n y all� empezamos a hablar de cosas insustanciales; alguien propuso que
jug�ramos a algo y claro est� todos aportamos ideas: finalmente decidimos jugar
al Trivial; pero a un Trivial un poquito especial: el que fallara las preguntas
deber�a elegir entre pasar una penitencia o contar una fantas�a er�tica o
cualquier castigo que se le ocurriera a los dem�s� El que ganara ser�a el amo y
se�or de todos durante lo que quedara de las vacaciones (tres d�as) para ser
exactos. Todos aceptamos.



Empezamos a jugar entre expectantes y nerviosos. El primero
en tirar fue I�aki, cay� en una pregunta de Historia y fall�: el castigo fue que
explicara su primera relaci�n sexual con "pelos y se�ales"; �y vaya si lo hizo!
Consigui� que todos nos excit�ramos� El siguiente fue Carlos, que tambi�n fall�:
su penitencia fue que se quedara en ropa interior para que pudi�ramos disfrutar
de su precioso cuerpo; las siguientes fueron las chicas: Lali explic� su m�s
loca fantas�a sexual; Irene tuvo que acariciarse durante cinco minutos por todo
el cuerpo y Beth me dio un beso en los labios que provoc� que todas mis
terminaciones nerviosas se pusieran alerta�.



Fuimos siguiendo el juego y como era de esperar el ambiente
se fue calentando hasta l�mites insoportables� Todos hab�amos pagado
penitencias: Carlos acarici� el cl�toris de Beth durante 5 minutos; acarici� los
pechos de Irene; hizo un 69 conmigo�.; I�aki bes� a Carlos en los labios; hizo
una cubana con Lali; Beth chup� mi sexo con una dulzura y una maestr�a
incre�bles; masturb� a I�aki hasta que casi se corre en su mano� y as� durante
al menos 3 horas� Finalmente acabamos el juego proclam�ndome ganadora por
abrumadora diferencia.



Mi primera orden fue que nos desnud�ramos completamente y que
as� deber�amos ir siempre que anduvi�ramos por la casa. Todos obedecieron sin
dudar.



La siguiente orden fue que las tres chicas me follaran,
mientras los chicos observaban y esperaban �rdenes. Las chicas se miraron entre
ellas y enseguida se pusieron manos a la obra: empez� Lali con mis labios,
pasando la punta de su lengua por ellos, para luego pasar a mis dientes e
introducirse en mi boca con intensidad; mientras Beth besaba mi cuello desde
atr�s: dando peque�os besos en mi nuca, en la base del cuello, para seguir por
mi espalda; e Irene se dedicaba a mis pechos: mis puntiagudos y duros pezones se
perdieron en su boca, los chupaba fuerte, los mord�a suavemente, yo gem�a de
placer: "Siiiiii!!!! Mmmmmmm! " y me dejaba hacer.



Irene baj� por mi vientre liso, lleg� a mi pubis depilado,
lami� mi sexo h�medo con aut�ntica maestr�a, su lengua recorri� mis labios
hundi�ndose en mi interior, tom� el cl�toris entre sus labios, chup�ndolo,
succion�ndolo; el rosado bot�n respondi� a las caricias, se puso duro, mi sexo
se moj� completamente, su lengua lo recorr�a todo de arriba abajo; mientras Beth
hab�a llegado a mi culito, lo recorr�a con la punta de su lengua mientras sus
dedos acariciaban mi espalda suave, suave�. mis gemidos eran cada vez m�s
fuertes�. " Ooooohhhhh!!! Qu� bien�. Siiiiiii!!!!!"



Beth abr�a mi culito y dos de sus dedos penetraban en mi
rajita mojada desde atr�s, ella se mov�a contra m�, gimiendo y gozando; sus
dedos me penetraban fuerte y su lengua lam�a todo mi culito� Lali apoy� su boca
sobre mi sexo y la empez� a chupar fuerte, mis jugos ca�an por su boca, lo
chupaba todo, r�pido y duro: "Mmmmmm!!!!" Mientras Lali separ� sus largas
piernas, me tom� por la cabeza y puso su sexo a mi alcance, se mov�a sobre mi
boca, mi lengua chupaba su cl�toris con glotoner�a, sent�a su dulce sabor; pod�a
o�r sus gemidos fuertes, entrecortados, mientras acariciaba mis tetas; las
masajeaba con fuerza, pellizcaba mis pezones�. sent� que estaba a punto de
llegar� una ola de jugos cayeron en mi boca, los beb� todos, chorreaba por mis
labios�



Irene segu�a besando mi cuerpo hasta quedar sobre m�; cuando
lleg� a mi boca unimos nuestras lenguas y compartimos el dulce sabor del sexo de
Lali; ����Hummmmmm!!!! ����Que rico sabe!!!!! Durante un rato estuvimos
acariciando y chupando su espl�ndido sexo, mientras ella acariciaba enloquecida
sus pechos: "Si, si, siiiiiii!!!!!!!!!!!" Se mezclaron nuestra saliva y sus
jugos; nuestros gemidos cada vez eran m�s fuertes� Lali estaba a punto de
caramelo� me incorpor� un poco dejando mis generosos pechos a la altura de la
boca de Beth, r�pidamente los tom� con sus manos y empez� a chuparlos, se com�a
mis pezones, que se pusieron muy duros y erectos, ella los com�a con deleite,
entonces me incorpor� un poco m�s�. Lali segu�a sentada sobre nuestras caras; le
com�amos fuerte, profundo� Beth atac� mi sexo con furia, yo gem�a m�s fuerte
a�n, disfrutaba como mi amiga com�a mi chochito, lo hac�a m�s r�pido ahora, su
lengua muy profundo dentro de m�; estoy casi a punto de correrme, me mira a los
ojos y dejando un momento de mamarme, me dice: "No te contengas� sigue� c�rrete
en mi boca� mmmmmmmm" Volvi� a hundir su cara en mi vagina, no pas� mucho
tiempo, apret� mis pezones y dando un grito de placer, acab� fuerte en su boca,
restregu� mi concha en su cara mientras mis jugos llenaron su ansiosa boca, ella
los bebi� todos, lami� mi raja con deleite absorbiendo hasta la ultima gota de
mi monumental corrida.



Todo se precipit�: Lali ten�a su rajita mojada a punto de
explotar, la tom� por las tetas y le di m�s fuerte y r�pido, sent� llegar su
orgasmo, di� un fuerte grito y acab� intensamente, la segu� lamiendo fuerte,
prolongando su orgasmo, hasta que cay� sobre la manta extasiada y convulsionada
con el orgasmo.



Irene y Beth totalmente excitadas y h�medas se besaron con
pasi�n� estaban empapadas en sudor; Beth comenz� a lamer las tetas de Irene, las
chupaba fuerte, se com�a sus duros pezones, chup�ndolos, mordi�ndolos, apretaba
sus pechos junt�ndolos y su boca se deslizaba de uno a otro, comi�ndoselos.
Irene hizo acostar boca abajo a Beth y comenz� a besar su cuello, su espalda,
sus manos tomaron las nalgas y las acariciaban, las masajeaba y separaba, su
lengua recorr�a su culito hasta llegar a su co�ito ardiente, la lam�a toda, la
punta de su lengua como un peque�o pene se hundi� en su culito y dos de sus
dedos se deslizaban dentro de la rajita, gem�a fuerte, gozando.



Le daba duro por la rajita, ahora eran tres dedos y su lengua
abr�a todo su culito, cada vez le daba fuerte, le ped�a m�s� sus dedos se
deslizaban f�cilmente dentro de ella porque estaba muy mojada� Beth se volvi� e
hicieron un 69 comi�ndose sus sexos, metiendo y sacando los dedos la una a la
otra con un ritmo enloquecido, en sus co�itos inundados; bebiendo sus jugos y
chup�ndose una a la otra hasta que las dos se corrieron de una forma brutal, una
en la boca de la otra.



Los chicos mientras tanto no pod�an salir de su asombro,
miraban el espect�culo porno disfrutando como locos, con sus pollas, de un
tama�o m�s que aceptable y perfectamente erectas; por su puesto no hab�an podido
resistir la tentaci�n y hab�an estado paje�ndose mientras segu�an nuestra
fiestecita sin perderse un solo detalle�





Bueno, dije, ahora es el turno de los chicos. Quiero que
nos folleis a todas. �Estar�is a la altura?


Por su puesto, dijo I�aki.


Muy bien, dije yo, pues adelante�





Los chicos no se lo pensaron dos veces Llegamos el ambiente
estaba muy caliente; I�aki me abraz� fuerte y me bes� en la boca, sus manos
apretaron mis nalgas, not� como Carlos se acerc� a nosotros, me tom� por detr�s
y besaba mi cuello, pude sentir las dos enormes vergas apret�ndome entre ellas,
haciendo mojar aun m�s mi sexo caliente.



Pude ver como Lali se besaba fuerte con Irene y Beth
aprovechaba para acariciar el cuerpo de las dos; Lali le sacaba acariciaba sus
pechos y se los com�a; I�aki baj� sus dedos por mi vientre y llego a mi rajita
mojada mientras sent�a como Carlos recorr�a mis nalgas con sus manos primero y
luego su lengua bajaba por mi espalda hasta mi culito, entonces ambos agachados
por delante y detr�s de m�, empezaron a lamer mi rajita y mi culito. Las chicas
mientras tanto segu�an con su fiesta particular: Irene con las piernas bien
abiertas dejaba que Beth comiera su rajita y se deleitara con ella, mientras
Lali hac�a lo propio con Beth; pod�a verlo con claridad a pesar del inmenso
placer que me estaban dando las dos lenguas de mis chicos. Mi sexo chorreaba
jugos, I�aki se deleitaba con ellos y Carlos lam�a con gusto mi culito excitado,
su lengua pujaba por introducirse.



Entonces Carlos se levant� y se tumb� debajo de Beth, abri�
sus piernas y hundi� su cara en su sexo depilado y h�medo, ella gimi� de placer
y se empuj� a�n m�s en la rajita de Irene que cerraba sus ojos gimiendo de
gusto; Lali se meti� en la boca la poya de Carlos y la chup� y masaje� con
deleite; I�aki enterraba su lengua en mi co�o, el jard�n se llen� de olor a
hembra y sexo, de gemidos de hembras gozando, enterr� mis u�as en el pelo de
I�aki y acab� fuerte en la boca de �l, succionaba y lam�a mis jugos; luego vi
acabar a Irene en la boca de Beth en un violento orgasmo y en segundos Beth hizo
lo mismo en la boca de Carlos, mientras �l se corr�a en la boca de Lali� los
cinco nos juntamos y entre nosotras lamimos y chupamos nuestras sexos hasta
ponernos otra vez a punto. La diversi�n no hab�a hecho nada m�s que empezar�



Irene y Lali descansaron sobre la manta solo observando y
masajeando suavemente su delicado cl�toris, mientras Beth y yo nos ocupamos de
I�aki; su verga grande y erecta apareci� frente a nosotras, se la chupamos un
poco, yo me dediqu� a lamerla y besarla a todo lo largo, acariciando sus gordos
y peludos huevos, las dos quer�amos comerla, saborearla, era grande y caliente,
deliciosa, ol�a y sab�a exquisita. Beth con m�s esfuerzo pero adaptando su boca,
la tragaba un poco m�s profundo, yo tambi�n quer�a comerla, as� que cambiamos,
yo la met� en mi boca y ella la chupaba por fuera, yo pude tragarla mejor, en un
par de bocados, me la tragu� hasta la mitad, sus l�quidos preseminales se
mezclaron con mi saliva, I�aki gozaba y le dec�a a Carlos lo bien que yo
chupaba, segu� comi�ndome esa enorme vergaza, cada vez mas profundo, la ten�a
casi hasta la garganta y a�n algo sobraba, era impresionante, se la chupaba
fuerte y profundo, volv� a dejar que Beth lo mamara y yo me ocup� un poco de
Carlos que motivado por el espect�culo, tra�a una erecci�n terrible, la met� en
mi boca y de un bocado la dej� ir hasta mi garganta, chup�ndolo fuerte y
profundo, mis manos acariciaron sus bolas. Los dos chicos gozaban con nuestras
bocas y sus vergas enterradas dentro de ellas, pero no quer�an acabar a�n ya que
la noche reci�n empezaba, en la manta Irene y Lali continuaban masturb�ndose con
aquella visi�n.



Entonces vi como I�aki se sentaba, Beth se encaram� de frente
sobre �l acomod�ndose, tom� el tallo grueso y reluciente de I�aki y comenz� a
refregar su rajita mojada sobre la descomunal verga, sus l�quidos preseminales
de mojaban su cl�toris, I�aki cogi� la polla en su mano y daba vergazos sobre
sus nalgas y sus labios vaginales, la tom� firme y apunt� contra su rajita, Beth
se acomod� sobre ella y vi como lentamente y en medio de suspiros la vergota
empezaba a hundirse en su interior.



Entonces me puse en cuatro patas con mi cabeza sobre la
espalda de Beth, teniendo una perfecta visi�n de c�mo la penetraba I�aki, al
tiempo que Carlos me tom� por detr�s dej�ndome ir su gran verga hasta el fondo
de un solo golpe en mi rajita empapada. Me daba fuertes embestidas, me hac�a
gozar, me encantaba sentir su verga llenando mi lubricada vulva; segu� viendo
como Beth se clavaba en la vergota de I�aki, su co�ito se abr�a al m�ximo
permitiendo que ese trozo descomunal de carne se deslizara dentro de ella, pod�a
ver como la penetraba lento, cada vez m�s profundo, sus paredes vaginales se
dilataban al m�ximo para recibir la gruesa barra, Beth gem�a de placer, llev� mi
boca y fui besando su espalda, baj� por sus nalgas, mi lengua recorri� su
culito, pod�a sentir esa enorme verga palpitando, abri�ndola, llen�ndola por
dentro, notaba su gruesa y reluciente vena a trav�s de todo su grueso tronco
perdi�ndose en la caliente y h�medo co�o de Beth, segu� lami�ndolos, llegu� al
pedazo de verga que quedaba fuera y pos� mi lengua en ella, palp� las gordas y
peludas bolas de I�aki, mientras Carlos me cog�a de una manera cadenciosa,
fuerte y duro.



Beth sub�a y bajaba con su rajita apretada a todo lo largo de
la inmensa verga, gritaba de placer, su lengua se enred� con la de I�aki, mi
lengua recorr�a sus nalgas y la sent� estallar en un orgasmo intenso, not�
chorrear sus jugos que al seguir cabalgando corr�an por esa verga gruesa,
comenc� a lamer sus jugos, sobre sus piernas, su sexo y la verga de I�aki. A
pesar del orgasmo, Beth no aflojaba la cabalgata, al contrario, aceler� sus
movimientos contoneando sus nalgas sobre la enorme verga y su orgasmo se
prolongaba, anunciando otro; al mismo tiempo Carlos me embest�a fuerte, que
junto a la visi�n de mi amiga cogiendo esa rica verga, me llev� a correrme yo
tambi�n en el mismo momento que Carlos inundaba mi sexo con su caliente y rico
esperma, sus chorros me quemaban. Segu� comiendo el culito de Beth que a punto
de otro orgasmo, montaba extasiada la verga de I�aki que apretaba sus nalgas
mientras su descomunal aparato se deslizaba una y otra vez en la empapada vagina
de la joven; I�aki gem�a fuerte anunciando tambi�n que acababa, y al hacerlo y
llenar la concha de Beth de abundante leche, ella acab� de nuevo, clav�ndose
hasta el fondo la tremenda verga y dejando que �l descargara todo su semen en su
interior.



Beth se desmont� de la enorme verga y abundante leche chorre�
del interior de su sexo, cayendo por sus piernas y sobre la verga, ella cay�
extenuada, Lali se puso de rodillas delante de ella y lami� y chup� su co�ito
limpi�ndola de sus jugos y los restos de leche de I�aki. Irene hizo lo mismo con
I�aki, recorri� toda su verga con la lengua, la meti� en su boca, la mezcla de
su semen y los jugos de Beth pareci� fascinarle, lam�a aquella poderosa barra
una y otra vez, ahora estaba algo morcillona pero sent�a como r�pidamente se
recuperaba con la mamada y al terminar de limpiarla toda, ya la ten�a totalmente
dura de nuevo. Entonces fue Irene la que se mont� sobre I�aki, pero de espaldas
a �l, refreg� su sexo mojado sobre la cabezota de su verga, moj�ndola con sus
jugos, con sus grandes manos tom� sus pechos y la fue sentando sobre esa enorme
y deliciosa verga, clav�ndosela despacio, sintiendo como abr�a su co�ito
caliente, estir�ndola al m�ximo, sintiendo cada mil�metro en su interior.



Vi como Beth, se deslizaba hasta donde estaba Lali y hund�a
su cara en su rajita que chorreaba jugos y Carlos sentada al lado m�o
contemplaba como Irene devoraba la enorme verga de I�aki, que se clavaba lento
pero sin detenerse dentro de Irene; empez� a cabalgarla, sub�a y bajaba por todo
el largo de esa tremenda verga, sac�ndola casi por completo y luego
volvi�ndomela a clavar toda, I�aki acompa�aba sus movimientos con sus manos
sobre sus caderas. Ver Irene gozando con ese pedazo enorme de carne hizo que la
verga de Carlos estuviera dura de nuevo, entonces se par� sobre ella y puso su
rica verga a la altura de su cara, no dud� en trag�rsela toda, mientras no
dejaba de montar a I�aki, sent�a dos enormes vergas llenando su rajita y su
boca.



I�aki tomaba su cabeza y embest�a su boca, cogi�ndola hasta
la garganta, y la verga de I�aki taladraba su raja chorreante de jugos, �l se
aferraba a sus tetas y Irene sub�a y bajaba fuerte y r�pido devorando su
tremenda verga con su sexo ardiente, totalmente invadida por esas vergas la
llevaron a un orgasmo intenso, grit� de placer y acab� sobre la verga de I�aki
ba��ndola en sus jugos; mientras duraba su orgasmo, I�aki se incorpor� y la
levant� con sus fuertes brazos, d�ndole la vuelta sin sacar su verga de su sexo,
Carlos se sent� y qued� a cuatro patas, con la cabeza sobre la verga de Carlos y
cogida por detr�s por I�aki.



I�aki empez� a embestirla fuerte, le daba nalgadas, le
clavaba su herramienta enorme y dura hasta el fondo y ella se tragaba entera la
verga de Carlos que llenaba su boca; �l tomaba su cabeza ahog�ndola en su verga
que golpeaba su garganta y I�aki le daba embestidas salvajes y profundas, la
tuvieron as� por lo menos unos 20 minutos, ya hab�a tenido otro orgasmo y a
punto de alcanzar otro, sinti� la verga de I�aki hincharse en su sexo y con una
clavada profunda explot� dentro de ella, lanzando abundantes chorros de leche
caliente que la inundaron por dentro, lo que la hizo acabar nuevamente y grit�
de placer ahogada en la verga de Carlos que empez� a escupir gruesos chorros de
semen directos a su garganta, su orgasmo segu�a, sinti�ndose inundada de leche,
que llenaban su boca y su rajita, I�aki se levant� sent�ndose al lado de Carlos
lo que aprovech� para limpiarles bien la verga a los dos, lamiendo y bebiendo
toda su leche mezclada con sus jugos.



Despu�s de todo este desenfreno nos relajamos unos minutos,
tomando unas copas y escuchando m�sica� est�bamos realmente agotados� pero
abiertos a todo tipo de posibilidades...



No s� cuanto tiempo estuvimos as� disfrutando del placer
conseguido� sin hablar� solo estando cerquita unos de los otros; acarici�ndonos
suavemente; sin prisas, con dulzura�. Al ratito ya pudimos ver como los chicos
estaban reaccionando a las caricias�



Con Beth nos arrodillamos frente a ellos y le dimos una buena
mamada, yo a I�aki y ella a Carlos hasta poner de nuevo sus enormes vergas bien
duras de nuevo, entonces I�aki me puso a cuatro patas en la manta y mojando su
verga en mi rajita, moj� mi culito y poco a poco me fue penetrando, Beth se puso
en cuatro patas tambi�n y Carlos la cog�a por detr�s por su co�ito, su cabeza
quedaba a la altura de mis nalgas, as� que sent� como me las lam�a y por
momentos I�aki sacaba su verga de mi culo y la met�a en su boca, para despu�s
volver a clavarme toda su verga, estuvimos as� un rato hasta que Carlos le pidi�
a I�aki cambiar de parejas y as� lo hicimos, cambiamos de posici�n con Beth, que
enseguida la vi ensartada por el culo con la gruesa verga de I�aki y Carlos me
penetraba por el co�o mientras met�a dos dedos por mi culito dilatado por la
cogida que me hab�a dado I�aki y me dijo que ten�a un culito precioso y quer�a
foll�rmelo, lo mir� y le dije que deseaba sentir su enorme verga en mi culo.



Al o�rme decir eso Irene quiso presenciarlo; entonces Irene
s� puso detr�s de m� y empez� a chupar la verga de Carlos, moj�ndola bien; Lali
besaba y acariciaba mis tetas, excit�ndome y prepar�ndome para la cogida; Irene
escupi� mi culito, tomo la verga de Carlos y la moj� bien en mis jugos, coloc�
la verga en la entrada de mi culito y entonces Carlos empuj� suavemente; mi
culito dilatado, la recibi� bien al principio, al seguir entrando sent� algo de
dolor, esa tremenda barra de carne estiraba mi culo al m�ximo.



Irene abri� bien mis nalgas mientras Lali estimulaba mi
cl�toris, eso me relaj� y la descomunal verga se deslizo m�s en mi culo, gem�
fuerte, Lali ahog� mis gemidos con sus besos y Carlos sin detener su penetraci�n
entr� profundamente en mi interior, sent� toda su verga en mi culo, llen�ndome
completa.



Irene gritaba excitada que me la hab�a comido entera, el
dolor me ahogaba un poco, pero �l se qued� quieto y mi culo se adapt� de tal
manera que al sentirlo empez� a embestirme despacio, entrando y saliendo de mi
culito, que recib�a toda aquella enorme polla; poco a poco sus embestidas se
hicieron m�s fuertes y I�aki coloc�ndose detr�s de Irene la clav� tambi�n por su
culo y la empez� a follar fuerte.



Carlos me follaba salvajemente, fuerte y r�pido, solo sal�a
de mi culo para meter su verga en la boca de Lali y volver a cogerme toda, cada
vez m�s duro y fuerte, yo gritaba de puro placer�



Mi culo era ahora el que devoraba esa tremenda verga,
abri�ndose y cerr�ndose, succionando la verga gruesa y dura que se enterraba
completa en mi culo, en el jard�n todo era olor a sexo, todos gem�amos fuerte,
los dos chicos nos ten�a ensartadas por el culo con sus enormes vergas, sent� la
de Carlos hincharse en mi culo y me cogi� m�s fuerte haci�ndome acabar en forma
bestial, dando gritos y retorci�ndome de placer, exprimiendo su verga que no
pudo aguantar y lanz� dos fuertes chorros de semen caliente en mis intestinos y
luego la sac� y acab� m�s todav�a sobre mis nalgas, mi culito y en la boca de
Lali que se empe�aba en comer todo lo que sal�a de la gorda verga�



Irene y Miguel, que no perd�an detalle, no pudieron aguantar
m�s y se corrieron de forma brutal; sus gemidos hicieron eco con los nuestros�
Irene acab� casi desmayada y con el culito inundado con la leche; Beth se ocup�
de limpiar bien la verga de I�aki y luego tuvo el detalle de acabar bebiendo la
leche que sal�a de su culito.



Est�bamos tan agotados que decidimos irnos a descansar a una
de las habitaciones� dispuestos a recargar nuestras bater�as para volver a
empezar otra ronda de sexo desenfrenado.



Como podeis imaginar fue el mejor fin de semana de nuestra
vida� no pusimos ning�n l�mite y todos nosotros participamos encantados en todo
aquello que se nos iba ocurriendo y que serv�a para volver a disfrutar de todos
y cada uno de nuestros cuerpos.



Pero eso ya es otra historia�


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Relato: Vacaciones especiales
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