Mi t�a Graciela
(Segunda parte)
Esta es la cuarta historia de sexo, ver�dica y ocurrida en un
Buenos Aires.
Me lleg� contada por el protagonista, a quien le ha cambiado
el nombre y es sin duda una de las historias mas incre�bles que o�
Sucedi� en el barrio de Balvanera, entre un sobrino y su t�a
algo mayor.
Ella casada y de excelente posici�n social, docente se
enamor� de �l.
Nunca juzgue a esa mujer, a la que en relato le llam�:
Graciela.
La conoc� pero ello no fue importante.
Sino sin duda lo trascendental, es que cambio la vida
definitivamente de dos familias y una adolescente algo, desorientado
sexualmente.
Ocurri� a principios de este a�o 2004 y aun no s� como
terminar�
Aunque no dudo de su final.
Gustavo Camisasca-
Diciembre del 04.
En el alba, una mujer se encontraba abrazada a un joven ambos
desnudos, ella mostraba un sue�o tranquilo en su cuerpo aun se marcaba el
desorden de la noche de amor, y su cara se reflejaba una mueca aun de placer
extremo
Un joven le sosten�a de su cintura, y al igual que la mujer,
parec�a dormir un sue�o placido
Ambos se hab�an amado todo el curso de una lluviosa noche,
amanec�a en esa casa del barrio ordinariamente llamado Once, o estaci�n Once.
Graciela lo despert�, vamos dormil�n anda a la ducha que te
he servido el desayuno, le dio un beso en su boca y mir�ndolo correr desnudo
nuevamente se excit�:
Este pibe me ha puede, me calienta pens�.
Desayunaron juntos y ella ensayo una especie de conversaci�n
en que basaron desde un principio la relaci�n prohibida, adem�s le confi� que
con su t�o ya no sent�a nada desde m�s de una a�o, que ella no sent�a amor y que
ahora que lo hab�a encontrado una especie de pasi�n y amor en su sobrino
Y no estaba decidida a perderlo
Si lo llevare a ser mi hombre
Luciano, le llam� �cuando termines de arreglar en tu pieza
las cosas, veni?
Apresuradamente se retoc� el cuello con un perfume de su
hermana, se desnud� y se acomod� de tal manera en la cama que cuando Luciano
subiera le viese su sexo y su senos esper�ndolo.
Estaba excitada como una adolescente pese a sus cuarenta y
dos a�os ese joven le hab�a producido una revoluci�n en su sexualidad dormida
fant�stica, y de pensar que en minutos estar�a en la cama con �l, ya estaba
mojada.
Cuando subi� Luciano solo llevaba puesto su b�xer, y ya
delataba el estado de su cuerpo pues marcaba perfectamente una pija dura que
estallaba dentro de esa prenda
Me gustas t�a, le dijo bes�ndola primero en su cara, luego en
su cuello para estallar en su boca buscando la lengua de ella para abrazarla con
fuerza, ella se dejo caer en la cama, llev�ndolo de tal manera que en un m�nimo
tiempo el estaba debajo de ella.
Cuando el le tomo con las manos los dos senos, ella aprovecho
para incorporarse y as� se su moviendo en derredor de su sexo, el cerraba los
ojos apretando la mand�bula, y cuando al rato ella consider� necesario le dijo
Espera amor.
Se bajo de �l, le tomo el b�xer con las dos manos y
agach�ndose a la vez descubri� su sexo
Estaba duro erguido y era: por ella y para ella.
Le tom� con la boca, echando para atr�s, la prenda hasta que
ella qued� en la cama matrimonial.
Le ten�a cojido por la boca, apret�ndolo con los labios
cuando retiraba el sexo de la boca, y roz�ndolo apenas con los dientes para que
Luciano, se retorciese de placer con las peque�as descargas el�ctricas de esa
operaci�n.
Luego al introducirlo de nuevo, ella se acomodaba de tal
maneja su boca para que se asemejase a su concha, envolvi�ndolo con la lengua a
ese pedazo de carne para similar a las paredes de su concha y delicadamente
llevarlo hasta el fondo de su paladar.
Todas esas nuevas experiencias en Luciano, le asombraban, le
cautivaban de tal manera que se empez� a anunciarse en su canal los flujos
seminales.
Acabo, le dijo su t�a.
�As�elo, Luciano que te beber�, tu leche!
Ella apret� mas la pija con la boca se acomod� apoy�ndose con
las dos manos sobre la cama le apoyo las tetas en su pecho y el no tardo mucho
en llenarla con su leche
Primero fue una descarga violenta, ella la recibi� cerrando
los ojos, y entre la segunda que se aproximo de inmediato logro tragar gran
parte de su fluido
Luego mas calma, pero con su concha acabando en largo y
pausados movimientos, recibi� la ultima descarga que se mezclo en ella con un
profundo suspiro de placer desde su concha y la delicia de ese liquido caliente
en su boca.
Se dejo caer en su pecho, aun desde la comisura de Graciela,
sal�a ese espeso l�quido, mientras tomaba fuerza en su concha un largo y sentido
orgasmo, se produc�a, dos en forma inmediata
Te quiero Luciano, no se que me pasa pero me transformo con
vos.
Luciano, desde la cama so�oliento le dec�a
�Eres una hermosa yegua!, que me calienta y quiero que cojas
solo para mi,
�Me lo prometes?,
�Que seas desde ahora solo para m�!
Si mi amor ser� solo tuya.
Se quedaron en silencio por m�s de quince minutos, cuando
son� el telefono:
Ella atendi�.
Los nombres que pronunciaban le sonaba conocidos a Luciano,
eran su primo y despu�s su t�o.
Ella colg�.
�Luciano tenemos hasta las dos!, despu�s vendr�n mis hijos,
son las doce
�Nos queda una hora1!
Se empezaron a besar, ella reconoc�a que estaba enamora de �l
y Luciano que era una hembra insaciable.
Al tiempo ella le dijo.
Luciano, me calienta mas si te bajas de la cama y yo te doy
mi concha apoyada en cuatro, a lo perrito as� de esa manera me podr�s coger por
la concha y mirarme mi culito
Se puso a trav�s de la cama, en el medio Graciela se
incorporo hacia debajo de tal manera que abriendo un tanto sus piernas el
descubriese esa hermosa y dispuesta concha, sus senos colgaban de ella d�ndole
una visi�n �nica
Concha y tetas a su merced
Ella le dijo tiernamente Luciano hace que me valla de esta
pieza dese�ndote mas que a nadie, y gozadme como vos quieras, soy tu mujer, que
es puta y esta solo dispuesta a vos.
Luciano tomo su sexo, lentamente lo fue pasando primero por
los labios inflamados de su t�a, luego como obedeciendo al aumento de peque�os
gritos de placer de su t�a, llegando a su cl�toris que rozo intermitentemente
con caricias en el ano con su dedo �ndice
A medida que el apretaba el cl�toris con la pija met�a cada
vez menos sutil el dedo �ndice en el culo de su t�a
Hijo de puta, que eras h�bil en sacarle lo mejor de una
mujer, eres buen macho
Y as� estuvo hasta que u t�a empez� a sentir que se
descompon�a de placer
De su frente empezaron a caer las gotas de sudor, su culo se
hab�a lubricado con la transpiraci�n de su ano, adem�s la concha era un festival
de ruido pues se o�a como la lubricaci�n de ella, produc�a peque�os ruidos de
placer
Coj�eme, le dijo Luciano que me vengo
Luciano logro meterla y ella se apret� de inmediato a el pego
su concha contra el fondo de verga, y empez� a coj�elo en c�rculos con la cola
El aprovecho y le meti� dos dedos dentro del ano, y as� pudo
percibir no solo en su sexo los espasmos de placer de ella, sino sus desde
fueron testigos de una tremendo orgasmo de ella, que calm� con un grito de
placer que debi� haberse escuchado hasta la planta baja
Luego y el con la pija dura aun, ella de dejo caer apretando
los pu�os y con los ojos desorbitados recibi� la segunda descarga de placer, un
orgasmo la tomo echada en la cama torci�ndose y gesticulando peque�os alaridos
de placer
Cuando se compuso le vio a �l, asustado
T�a te pasa algo
No hijo, me sacaste el placer mas grande del mundo hacia a�os
que no acaba as�, y fue con otro tipo no tu t�o el que lo logro, eres un gran
hombre capaz de transformar a una mujer
Se paro le beso y tomo la pija con la mano
Eh, aun te deje duro pero te has ganado el premio
Corri� a su cartera, a tiempo volvi�
No se si ser� necesaria porque ya estuviste jugando pero
hach�eme el culo Luciano, hace mas de siete a�os que no lo hago, mas creo es
tuyo ahora
Se acod� en la cama, poni�ndose dos almohadas debajo de su
sexo, elevo as� cola
Veni lo llamo ponte detr�s mi�, apunta para que est�s c�modo
tu pija en culo
Lenvantala un poco mas t�a
Si as�
Si
Bueno vez la crema de mano, no es lo mejor pero no ven�a
preparada.
Bueno primero con un dedo pasa por la cola los bordes, y
luego a medida que me ceda el culo m�s adentro, para que no te lastimes
Despu�s cuando entre tus tres dedos con facilidad yo te digo,
y no me duele tanto te pones en tu pija, un poco y despacio no sea bruto me la
metes, no pares aunque yo te diga que me duele.
No me hagas caso r�mpeme el culo, como a una buena puta.
Empez� as� Luciano las clases, ella le iba diciendo ahora dos
dedos luego tres
Amor ahora m�temela
Graciela nuevamente estaba lubricada en su sexo porque hab�a
aprovechado para tocarse, as� sent�a doble placer, por el culo y su concha, el
aun era inexperto en ello.
Cuando empez� a sentir la cabeza en su concha, medio se
arrepinti� pr�cticamente era un nuevo desvirgue de su ojete
Despacio amor, despacio lentamente as�.
Que me duele, pero segu�.
Ya hab�a introducido la cabeza y a medida que el entraba ella
sent�a como se desplazaban las capas de su culo hacia los costado y una nueva e
inesperada sensaciones se produc�an
Su culo lat�a, y su concha se contar�a a la vez que el
entraba mas y mas
Cuando ella decidi� le dijo.
Luciano, ahora de un golpe hasta el fondo y cuando llegues a
el d�jala quieta
Lo hizo.
Me partiste hijo de puta, me rompiste el culo,
Y ella sent�a un dolor puntiagudo y profundo mientras esa
cabeza de pija reposaba en el fondo del culo.
Sus espasmos hab�an cesado en la concha producto de la
atenci�n de ella en el culo.
Luciano, al cabo de un segundo obedeciendo a su propio placer
empez� a moverse en su culo lenta pero r�tmicamente
Ello la enloqueci� de tal manera que su concha estallo cunado
el le ba�o el culo con un polvo sentido y abundante
Terminaron, �l abraz�ndola, en toda su espalda.
Ella apretada a la s�bana que estaba llena de sudor.
Y al cabo de un tiempo, cuando Graciela se limpi� en bidet,
al secarse not� unas gotas de sangre en el culo
Luciano, es un gran tipo, me lo voy a coger si puedo todo lo
que �l quiera.
Epilogo
Al cabo de un tiempo, la t�a se separ� de su esposo. Adujeron
problemas de convivencia y que ella sabia el asunto de la amante de su esposo.
Pero internamente Graciela amaba con desesperaci�n a Luciano
y fue la verdadera consecuencia.
Ella se mudo al barrio de Caballito, y sus dos hijos con la
escasez de trabajo en la Argentina, terminaron trabajando y viviendo con el
padre, donde tienen una f�brica de pl�sticos en la provincia de Buenos Aires.
Luciano aun ve peri�dicamente a Graciela, y ha crecido
mentalmente.
No le ama, seg�n me ha dicho a m� a Graciela, pero como esa
mujer (que es su amante) es tan ardiente, cada d�a le atrae m�s y m�s no se
puede separar.
Me ha dicho que ten�a un atraso, ya que jam�s se cuidaron.
Nadie sospecha de la relaci�n t�a-sobrino, y la madre de
Luciano cree que esta saliendo con una joven de su edad�
A �stas navidades, aun segu�an muy juntos y calientes y
ansiosos por ese atraso, ambos
Lo veo seguido a Luciano en mi negocio que es un locutorio y
hemos establecido una sentida amistad...
Gustavo Gabriel Camisasca
Contempor�neo
Almagro- Buenos Aires
Argentina