Al llegar a casa, rasg� el sobre que conten�a un papel
escrito a maquina en el que ley�:

Conozco tu m�s �ntimo secreto. Si no quieres que nadie lo
sepa, ven ma�ana a la direcci�n que te indico debajo a las 7 en punto, vestida
�nicamente con la ropa interior negra zapatos de tac�n y una gabardina.

Espero que no faltes sino todos sabr�s lo que eres.

�Qui�n pod�a haber escrito esa nota? �Quien pod�a conocer sus
m�s �ntimos secretos? Miriam no conoc�a esas respuestas. Ten�a miedo de ir, pero
no pod�a permitir que nadie lo supiera.

Al d�a siguiente, despu�s de trabajar, sali� Miriam r�pido
para llegar a casa y prepararse. Se duch� r�pidamente y se visti� como
especificaba la nota.

A Juan le ha dicho que esta noche llegar�a tarde. Sali� a la
calle y tom� un taxi.

La direcci�n es una nave en una zona industrial a las afueras
de Madrid. Antes de darse cuenta, el taxi ya esta lejos. �Maldita sea, que
estupida soy, por no haber mirado la direcci�n. Camina vacilante y llama a la
puerta. Esta abierta. Sus pasos son vacilantes. La nave esta escasamente
iluminada, pero lo suficiente para darse cuanta de que es un peque�o taller de
carpinter�a.

La puerta se cierra de golpe y una suave m�sica comienza a
sonar en el taller.

-Desn�date.-Te ordena una voz a tus espaldas.

�� Quien te has cre�do que eres para hablarme as�?

-Ahora soy quien da las ordenes aqu� �queda claro? Su mirada
es fr�a como el hielo.

Te desnudas al ritmo de la m�sica, intentando ocultar tu
temor y tu deseo. Solo te queda el peque�o tanga.

-Detente-dice mientras se acerca por detr�s, despacio. Tienes
prohibido mirarle a la cara. Oyes sus pasos acercarse. Sientes su aliento en tu
nuca. Te pone un antifaz, que no te permite ver.



Sus manos bajan despacio por tus caderas. Agarra tu tanga y lo coloca entre tus
labios, estirando hacia arriba, para que tu cl�toris quede atrapado dulcemente
con la tela.

Oyes su voz serena pero a la vez tajante, pegada a tu o�do.

- Pon tus manos a la espalda. Las tendr�s as� hasta que yo te
diga lo contrario. �Me has entendido?

-Si.- dices con un susurro de voz.

Sientes algo en tus labios. Por el olor es algo de cuero.

-Es una fusta, dice la voz del desconocido. Con ella
recorrer� tu cuerpo. Te castigare despacio, sentir�s su contacto hasta en el
ultimo poro de tu piel. Mientras habla sientes la fusta acariciando despacio tu
cara, tu cuello.

El contacto hace que por tu cuerpo sea recorrido por un
escalofr�o, pensando en lo que te espera.

Baja por tu canalillo, ahora esta recorriendo tus pechos. Los
pezones ya los tienes duros, por esa extra�a mezcla de miedo y placer que llena
tu cuerpo.

Peque�os golpes caen sobre ellos haci�ndote encoger
instintivamente.

-PONTE DERECHA Y SIN MOVERTE. Abre las piernas. Voy a
castigarte por ese gesto.

El miedo invade tu cuerpo. Tienes ganas de salir corriendo,
pero algo te lo impide.

Es el deseo de ser sometida. �Pero como puede ese desconocido
saber "tu secreto"?

Sin previo aviso, sientes la fusta golpear tu trasero.
Ahhhhhh.

El dolor no es muy fuerte, pero tu culo empieza a picarte.

Notas la fusta en tu nalga. Baja por tus muslos d�ndoles
golpecitos con la punta.

-Abre mas las piernas, quiero calentarte con la fusta bien
esta tarde.

T� las abres mas todav�a, dejando abierto tu co�o, a su
alcance. La fusta sube. Los golpes en tu co�o te estremecen. Son secos. Tras los
golpes, notas el cuero acariciando tu cl�toris. El contacto te hace gemir de
placer.

-Vaya, vaya, esta putita promete, oyes una voz delante de ti,
distinta de la anterior. Te quedas paralizada. No lo esperabas. Arrodillate
zorra.

Te arrodillas al instante.

-Te vamos a atar y castigar tu cuerpo de putita viciosa toda
la noche. �Verdad?

-Por supuesto dice el otro desconocido.

-Para empezar quiero que se la chupes a mi amigo zorra
viciosa.

Abres la boca r�pidamente y sientes la polla erecta junto a
tus labios.

Tus labios tocan su polla. Poco a poco notas como te la
va metiendo.

-Chupala bien putita. Usa la lengua sino te retorcer� los
pezones as�.- Sus dedos se ponen en ellos y notas como los retuerce y estira. No
puedes chillar con su polla en la boca. Tu cuerpo nota el dolor.

-Aqu� tengo algo que la va a gustar mucho. Es un collar con
una cadena. Cada uno de los extremos tienes unas peque�as pinzas para los
pezones. As� se esforzara m�s. �Verdad puta?

T� solo puedes asentir, ya que abras es imposible. Notas como
te es colocado el collar y las fr�as cadenitas rozan tus pechos.

Un cubito de hielo te es aplicado a los pezones. Te
estremeces con el contacto, mientras se ponen m�s duros todav�a.

-Voy a pon�rtelos a reventar, para que el mordisco de las
pinzas sea m�s dulce zorrita.

Mientras habla, coloca una en tu pez�n derecho. El dolor es
intenso. Tu cuerpo sufre una sacudida de placer. Notas como tu cuerpo se excita
por aquella situaci�n, de ser sometida por dos extra�os.

Su mano acaricia con decisi�n el pez�n libre todav�a de las
pinzas.

Tu lengua y tu boca se esfuerzan para darle mas placer. Oyes
sus gemidos y aumentas el ritmo.

-Mira la puta, ya esta preparada y todo. Pero antes, voy a
depilarte el co�o. No me gustan las zorras que no se asean. Ves a por las cosas
al ba�o. Trae la espuma y la maquinilla.

Al incorporarte y ponerte de pie, la fusta cae en tu
culo.

-�Quien co�o te ha ordenado levantarte?

-Yo....... pens� que......deb�a.......

-Y debes ir, -interrumpi�,- pero iras de rodillas. Vamos,
mueve tu culo.

Te pones a 4 patas y te diriges al ba�o. El va a tu lado,
golpeando tus nalgas de vez en cuando. Cojes la espuma y la maquinilla y
regresas al centro de la nave.

-Tumbate en esta mesa.- Obedeces y entre los dos te atan a
ella, dejando tu co�o preparado para ser depilado. Notas la espuma en tus pelos,
sus manos extendi�ndola.

-Abre la boca y sujeta la fusta mientras trabajo. Espero que
no se caiga.

La sujetas entre tus labios.

La cuchilla se posa en tu monte de venus y sientes como se
desliza por tu piel, arrancando tu bello pubico.

Una y otra vez sientes su caricia, hasta que por fin exclama.

-Mira, ahora si que me gusta, sin un solo pelo. Al pasar su
mano por tu co�o, notas sensaciones nuevas. Sus dedos resbalan m�s suaves, y
dejas escapar un par de gemidos mientras tu cuerpo se arquea.

Ansias sentir sus pollas dentro de ti. La espera te esta
matando de placer.

Te desatan de la mesa,

- �La vas a romper el culo de golpe?

-No, Quiero que sea ella quien se lo rompa.

-�Y como vas a hacer eso?

-He tra�do algunos juguetes y esta preciosidad.

-�Para que vas a usar eso? pregunta el desconocido al que le
has chupado la polla.

-Esta es una vela especial. Tiene forma de polla. Se la voy a
meter por el culo y la encender�. Al obligarla a gatear, la vela se ira
derritiendo y la cera caer� sobre su co�o. Al notar las gotas caer, su esf�nter
se contraer�, haciendo que la vela poco a poco la vaya penetrando, rasg�ndola
despacito su culo de puta. As� estar� preparado para cuando nos la follemos.

-Es una idea genial.- Notas la punta de la vela en la entrada
de tu ano. Instintivamente lo cierras, gan�ndote dos fuertes azotes.

-AAAAAAAAAahhhhh.- No puedes evitar gritar. El culo te pica.
Notas el calor de los dedos marcados en tu carne.

-Si vuelves a cerrarlo te dar� con la fusta, �entendido
perra?

-Si Mi Amo.- Dices con un hilo de voz.

Abre tus nalgas y te va metiendo la vela despacio. Tu culo se
abre caus�ndote un dolor intenso. Pero no te mueves por miedo a los castigos.

Notas el calor de un encendedor al encender la vela. Te pone
una correa. -Vamos perra a dar un paseo.- Tira de la correa con fuerza. Empiezas
a caminar a 4 patas. La primera gota de cera cae en le entrada de tu co�o. Te
muerdes los labios y te contraes, notando la vela entrar mas profundamente.
Sigues caminando y las gotas van llegando a tu cl�toris, tus labios, y la vela
no parece tener fin. Tienes el culo lleno que no puedes ni andar.

Pero tambi�n notas como tu co�o esta completamente mojado

-Es una verdadera puta. Esta mojada. -Mete tus dedos dentro
del co�o. Los saca.- Chupalos perra. Chupa tus jugos.

Abres tu boca lamiendo los dedos. Apaga la vela y sin previo
aviso, notas su polla entran en tu co�o de un solo golpe.

AAAAAAAAAahhhhh. Mi Amo, follame como una puta.

-Usa la lengua para otra cosa zorra.- Tu boca se llena con la
polla del otro desconocido.

Todos tus agujeros est�n llenos. La polla entra y sale de tu
co�o con movimientos r�pidos, mientras con una mano mueve la vela, que te va
abriendo el culo d�ndote cada vez mas placer. Tu lengua no para de moverse, para
dar placer a tu segundo desconocido.

Notas tu cuerpo estremecerse cada vez mas. La situaci�n de
estar sometida y penetrada por todos tus agujeros te vuelve loca de deseo.

Tu cuerpo no aguanta mas, necesitas correrte y ellos lo
notan.

-Escucha bien zorra, no puedes correrte sin pedir permiso,
�esta claro?- Te dice el que tiene tu polla en la boca.

Solo puedes hacer un movimiento con la cabeza. Pero tu
orgasmo es inminente.

Se paran los dos a la vez. Te coge del pelo y te hace ponerte
de pie. Te sacan la vela del culo.

Uno de ellos se tumba en el suelo.

-Ponte de rodillas meti�ndote su polla perra.

Te coloca encima de el. Obedeces sintiendo como entra en tu
co�o, deseoso de ser penetrado.

Las manos de el te obligan a inclinarte hacia el, mientras el
segundo desconocido apoya la punta de su miembro en la entrada de tu culo.

Te coge las nalgas, las abre al m�ximo para ver como su
miembro entra despacito, abriendo m�s tu esf�nter, porque su polla es mucho m�s
gorda que la vela.

-Ahhhhhh, me va a destrozar........por favor. Chillas al
notarla en la entrada.

Unos dedos estiran tus pezones fuertemente.

-Para eso estas aqu� perra. Para usarte como deseemos.- Y
dicho esto la termina de meter de un solo golpe, llen�ndote por completo.

Te sientes totalmente llena.

Ellos empiezan a moverse dentro de ti con golpes secos y
profundos. Pierdes el control de tu cuerpo. Las sensaciones al ser castigada
aumentan tu excitaci�n. Tus estremecimientos van en aumento al notar como ellos
poco a poco aumentan la velocidad y los movimientos dentro de ti. Los dientes de
del que esta en el suelo se clavan en tus pezones, mientras las manos del
segundo se encargan de castigarte el culo con azotes fuertes. Tu culo esta al
rojo con el castigo, pero eso ya no te importa. Solo piensas en disfrutar de tus
Amos.

-As� zorra, muevete deprisa.

Notas los estremecimientos y jadeos de los dos hombres.
Sientes las contracciones de sus pollas al un�sono llenando tu boca y tu culo de
su caliente semen. Piensas que te dejaran correrte ya, pero estas equivocada.

-Vamos a llevarla al taburete del placer. Te cojen de las
piernas llev�ndote en volandas hasta un lado de la nave.

Te van bajando mientras algo se mete dentro de tu co�o,
h�medo por tus jugos.

-Por favor, no puedo mas, necesito corredme.

Ellos arquean tu cuerpo, at�ndote a las patas del taburete de
manos y pies.

-Eso no depende de nosotros sino de �l. Nosotros ya nos
vamos.

-��l?, �Qui�n es �L?-Logras decir con miedo en tus palabras.

Los oyes alejarse hacia la puerta. Oyes el sonido de las
bisagras chirriando y la puerta cerr�ndose.

-�Por favor hay alguien?

Oyes una voz a tu lado que dice:

12 de Octubre

Querido diario acabo de leer otro capitulo de las desventuras
de Justine, escrita por el Marques de Sade. Mi co�o esta mojado pensando en que
yo soy la protagonista de esas vejaciones, humillaciones y sometimientos. Mis
manos lo acarician anhelando el contacto de su fusta en su piel, el silbido de
su l�tigo marcando mi carne. Necesito sentirme as�, cada d�a mas�.

Era su DIARIO y la voz era la de ���.su MARIDO.

No sabia que decir ni que pensar. Unas gotas de sudor,
perlaron su cuerpo desnudo.

Su mano acaricia tu cuerpo despacio, quitando las pinzas de
sus pezones y aliviando el dolor con sus dedos.

Un gemido se escapa de tus labios, sin poderlo reprimir.

-�as� que es esto lo que deseabas puta?-Pregunt� con voz
serena deslizando sus manos en direcci�n a tu co�o y cojiendo entre los dedos tu
cl�toris hinchado por la excitaci�n.

-Si, es lo que he deseado sentir siempre.

-A partir de ahora lo sentir�s zorra. No lo dudes.-Digo su
marido.-�Deseas correrte?

-Si por favor. Te lo suplico no puedo mas.

-Si consigues hacerme correr en menos de 3 minutos solo con
la boca podr�s correrte �Entendido?

-Entendido.

Su boca se abri� para recibir la polla de su marido. Su
lengua se mov�a r�pida sobre el grande, mientras su cabeza se mov�a, metiendo y
sacando la polla de su boca.

Los dedos de su marido no dejaban de castigar su cl�toris con
sus caricias. Su cuerpo se estremec�a. Nunca hab�a estado tan sensible a las
caricias. El retener su orgasmo durante tanto tiempo lo hab�a echo posible.

Su boca se esforzaba al m�ximo para conseguir el orgasmo de
su marido y poder disfrutar del suyo tambi�n. Sus labios se cerraban sobre ella
y su lengua no paraba de moverse. O�a sus gemidos y not� como su polla temblaba
en su boca anunciando su inminente orgasmo.

No se equivoco. Su semen caliente lleno su boca. Intento
sacarla, pero la mano de su marido empujo la cabeza contra su cuerpo,
oblig�ndola a tragar todo sus jugos.

Noto sus estremecimientos recorriendo su cuerpo de un extremo
a otro, no pod�a mas.

-Ahora puedes correrte puta.

-Graci�..as mi se�or._grito al sentir el orgasmo intenso en
su cuerpo.

La desato ayud�ndola a incorporarse. Le puso en la mano su
diario.

-Quemalo. A partir de ahora no habr� mas secretos entre los
dos.

Miriam dud� un instante, pero lo puso en una vieja lata,
cogi� un mechero y aplic� la llama a las hojas de su compa�ero de sue�os.

Mientras contemplaba como el fuego reduc�a su diario a
cenizas, su marido puso la gabardina sobre sus hombros.

-Hoy comienza una nueva vida para los dos.- Digo Juan,
besando sus labios con pasi�n.

Al mirar sus ojos, Miriam comprendi� que a partir de ese d�a
sus sue�os se har�an realidad todos los dias.