Relato: La Mujer del Portero (11)



Relato: La Mujer del Portero (11)

LA MUJER DEL PORTERO (XI)


Me dirig�a a mi casa cuando entr� la llamada de mi secretaria
Silvia a mi celular:



" Hola mi amor, para informarte que ya lleg� Virginia. Estuvo
de paso por mi oficina para justificar su inasistencia y le dije que ya sab�a
que tu le hab�as dado permiso. Me hac�a gracia su justificaci�n, sabiendo la
fiestecita que se hab�an dado.- Ahora ella se ha ido a su casa, as� que todo
est� bajo control.- me inform� discreta.-



" Gracias por tenerme al tanto querida. Pens� ir a la
oficina, pero estoy muerto... necesito descansar as� que me voy a casa... ma�ana
en la ma�ana te veo y te contar� lo �ltimo de Marian. Te quiero mucho.. chau .-
creo que en mi voz se notaba el cansancio que tra�a.-



" No te preocupes querido, descansa que ma�ana no te me
escapas, Chau.- dijo alegre y cort� la comunicaci�n.-



Llegu� a casa y observ� mientras entraba al amplio jard�n que
hab�an varios autos estacionados, record� entonces que como cada jueves mi mujer
se re�ne con un grupo de amigas a jugar bridge. En realidad, esas reuniones de
amigas era una especie de relax o terapia colectiva, aprovechando para enterarse
del �ltimo chisme o del acontecimiento social del momento. Cuando hab�a eso, yo
generalmente saludaba a las damas y luego me deslizaba a mi despacho privado
hasta esperar que terminen la charla a eso de las 10 de la noche. Esta vez, yo
salud� a todas y fui directamente a mi habitaci�n, tom� un ba�o caliente y me
acost�, Estaba cansad�simo y ca� dormido en cuanto me met� en la cama.



Despert� al d�a siguiente, viernes a las 8 de la ma�ana.
Marian dorm�a a mi lado. Mir� a mi mujer y as� como estaba, sin una pizca de
maquillaje, con la paz le daba un pl�cido sue�o se la ve�an m�s joven, con una
belleza muy suya. El calor hab�a hecho que apartara las s�banas mientras dorm�a
y lograba ver su firme pecho y sus pezones rosados en total descanso, su abdomen
plano y unas piernas blancas, suaves, bien torneadas.... all� me asalt� la
pregunta que hab�a estado dando vueltas a mi inconsciente: �har�a suyo este
fenomenal cuerpo Pedrito?, �se lo permitir�a mi mujer?, ten�a una morbosa
curiosidad por saber qu� pasar�a la noche del s�bado... esto solo el tiempo lo
dir�a....



Me fui al ba�o y cuando sal� unos 45 minutos despu�s,
afeitado, ba�ado, peinado y perfumado....Marian se estiraba perezosa en la
amplia cama.



" Amorcito... cuando sub� ayer, estabas dormido como un
angelito y no quise ni hacerte ruido, que rico has dormido" .- me dijo mimosas,
al tiempo que estiraba sus delicados brazos hacia m�.-



" S� cari�o, realmente me encontraba agotado. Tienes raz�n,
nada como un buen sue�o para reparar energ�as... ahora, �qu� te parece si
desayunamos ac� en nuestro cuarto y hablamos? .- le pregunte d�ndole un beso y
estrech�ndola amorosamente.-



Ella estuvo de acuerdo y cogiendo el tel�fono interno llam� a
la criada y pidi� que nos subieran el desayuno, pidi�: frutas secas, frutas
frescas, huevos de 3 minutos para cada uno, y leche, caf� descafeinado y
tostadas de pan integral. Yo recordaba el desayuno que el d�a anterior habia
devorado con Virginia y sonre� para mis adentros. Mientras esper�bamos la
colaci�n, mi mujer se meti� a la ducha y a los pocos minutos sali�, sec�ndose el
cabello con la toalla y enfundada en una bata blanca de felpa absorbente. Cuando
se terminaba de secar el cabello con la ayuda de una potente secadora, entr� una
de las criadas con una gran bandeja. Abri� la puerta de la pared ventanera de
nuestra habitaci�n que daba a una terracita que ten�a en el centro una mesita
protegida por una amplia sombrilla. El sol brillaba radiante a esa hora de la
ma�ana y la criada acomod� todo en la mesa, hecho lo cual discretamente espero a
un lado para que una vez instalados en nuestras sillas, procediera a servirnos.



Empezamos a desayunar y la criada desapareci�
silenciosamente. Ya solos, Marian me empez� a rese�ar los chismes de su reuni�n
y ambos coment�bamos luego sobre las noticias del d�a y cosas por el estilo. Por
mi parte yo le rese�� mi agenda del d�a y por las cosas que tendr�a que hacer,
seguramente regresar�a bastante tarde. Ella por su lado ten�a el d�a dedicado a
pasarla con sus padres, �sta era una rutina que ella cumpl�a cada semana y
regresaba a casa a las 7 de la noche. Quedamos en que esa noche ir�amos al
teatro, esa noche la Compa��a Teatral de Osvaldo Cattone, presentaba una obra en
el Teatro Marsano en Miraflores, que hab�a tenido muy buena cr�tica: "Mon�logos
de la Vagina" era el t�tulo, en la que actuaban cuatro conocidas actrices, que
monologaban por supuesto sobre aquello. Nos despedimos con un abrazo y un dulce
beso. No mencion� nada referente a su cita del d�a siguiente.


Al llegar a mi oficina, recib� la llamada de Silvia, no
reconoc� su voz. Estaba con una gripe terrible, hab�a amanecido con fiebre y era
imposible que fuera a trabajar. Lament� su ausencia y le desee pronta mejor�a y
que la llamar�a seguido para saber sobre su evoluci�n. Definitivamente el
descanso de fin de semana le caer�a bien. Me sumerg� en el trabajo y casi sin
pensarlo eran las 6 de la tarde, el personal empezaba a retirarse y yo prepar�
mis cosas para hacer lo propio. Debido a que almorc� con clientes fuera de la
oficina, no tuve oportunidad de ver a Virginia. Sin embargo al salir en mi auto,
quien me abri� la puerta de la cochera fue Alejandro, quien sol�cito se acerc� a
saludarme:



" Doctor buenas noches .- salud� atento.-



" Hola Alejandro, �qu� tal el viaje?.- �pregunt�



" Muy bien doctor, todo sin novedad y pude hacer mis tr�mites
sin problemas, solo que el tiempo ha sido corto y con las justas solo unos
parientes pudieron conocer a mis ni�os. Mi pueblo est� a un d�a de Iquitos en
lancha, as� que no pude ir... ya ser� en otra oportunidad. All� vive mi madre y
no tuve oportunidad de verla" .- se lament�.-



" Que l�stima, pero mira, otro d�a que puedas ir, me avisas
porque te puedo conseguir pasajes gratis por Aerocontinente. De pronto para tus
vacaciones puedes ir con tus ni�os, con tu esposa... av�same con tiempo.- le
dije, pues se me estaba ocurriendo algo.-



" Uyy Doctor, me toca vacaciones el pr�ximo mes...yo podr�a
ir con mis chicos, pero la Virginia reci�n ha empezado a trabajar y a�n no le
tocan vacaciones. No se, vamos a ver.



" Eso es f�cil, pues podr�amos darle a ella unos d�as de
vacaciones y viajan juntos, ella podr�a regresar a trabajar y tu podr�as
quedarte en Iquitos hasta el final de tus vacaciones.... en fin, pi�nsalo y me
hablas con tiempo.- la carnada estaba echada.. solo hab�a que esperar.-



" Gracias Doctor.. yo lo voy a hablar con la Virginia y le
aviso.... gracias nuevamente.- diciendo eso me franque� la salida.- Si la cosa
pegaba tendr�a varios d�as para gozar libremente a Virginia...quiz�s al regreso
de Canc�n donde pensaba viajar con Silvia.....



Esa noche fui al Teatro con mi mujer y dos parejas de amigos,
luego pasamos a cenar a un Restarurant Japon�s muy conocido en San Isidro: el
"Toshiro�s" de propiedad de un amigo m�o Toshiro Konishi un caballero japon�s
experto en la preparaci�n de tan sabrosos potajes y famoso en Lima por los
comerciales que protagoniza para los productos National. Hacia las 12 de la
noche regresamos a casa y ya en la cama, relajados y tranquilos, me lanc� a
tratar el tema de la cita de la noche siguiente de mi mujer con su joven
admirador. Marian segu�a con sus dudas, sobre si "si" o "no", pero lo cierto era
que le gustaba estar a solas con el muchacho. Yo le dije que al d�a siguiente
ten�a una cita con un grupo de amigos para jugar golf en el Lima Golf Club de
San Isidro. Generalmente esas partidas duran hasta m�s de medio d�a y quedamos
que nos ver�amos a las tres de la tarde en casa, luego de lo cual yo me
retirar�a para dejarla en completa libertad.



As� ocurri� todo. Al d�a siguiente a las tres de la tarde
regres� a casa.... mi mujer estaba en el s�tano de la casa, donde tenemos un
peque�a instalaci�n de sauna y jacuzzi... All� estaba botando toxinas... ya
terminaba cuando entr� y mientras la acompa�aba hasta la ducha, trazamos lo que
ser�a el resto de la tarde. Yo le expliqu� que a eso de las cinco saldr�a de
casa y tomar�a una habitaci�n en el Country Club Hotel, que est� cerca de casa,
esperando el fin de su cita para que me contara los detalles del encuentro. Nos
besamos con mucho cari�o, con mucho amor y le desee, resolviera lo que
resolviera una feliz cita. Luego de acompa�arla hasta la habitaci�n y siendo ya
las 5 de la tarde me retir� para dejarla que se arreglara para la cita.



Para Marian yo ya me hab�a marchado, pero siguiendo la misma
estrategia de las veces anteriores, a eso de las 7 de la noche, me deslic�
subrepticiamente a mi casa por la puerta del fondo que da al jard�n. Llegue
cuando mi mujer estaba a�n en nuestra habitaci�n arregl�ndose y no me fue
dif�cil deslizarme hasta mi closset desde donde pod�a ver y escucharla con toda
claridad. Ella estaba concentrada en cepillar su cabello y cuando consider� que
estaba a punto, se pein� como solo ella sabe hacerlo. Su cabello casta�o,
enmarcaba armoniosamente el rostro que en seguida empez� a maquillar, con tonos
suaves, realzando sus hermosos ojos almendrados y terminada la tarea se observ�
detenidamente todo el rostro, yo la ve�a singularmente hermosa y sexy, al
parecer ella qued� m�s que satisfecha de su aspecto.



Se puso de pie y se despoj� de la bata que la envolv�a y
qued� totalmente desnuda frente al gran espejo. El cuerpo de mi mujer estaba en
todo su esplendor, el color bronce que hab�a adquirido gracias al sol de verano,
le daba una renovada juventud y la mostraba deseable..... bella. Sobre la cama
estaba su ropa interior, una peque�a braguita blanca de encajes y un brassiere
tambi�n blanco de encajes a juego que le sujet� graciosamente los redondos y
deseables pechos. En seguida se puso el vestido, de seda blanco que ca�a
acariciante por el esbelto cuerpo de Marian, La prenda le quedaba un poco m�s
arriba de las rodillas y dejaba apreciar sus hermosas piernas, cuyo espectacular
bronceado contrastaba armoniosamente con lo blanco del traje. Realmente estaba
bell�sima. Luego se volvi� a mirarse al espejo, Marian dej� libres los primero
botones del vestido camisero de modo que se ve�a el nacimiento de sus senos. Al
cuello se coloc� una cadena de oro, con un dije en forma de coraz�n con una M
(inicial de su nombre) .... Ver as� a mi mujer, arregl�ndose para alqui�n que no
era yo me pon�a arrecho. Como la vez anterior, puso una silla frente al espejo y
se sent� para ver hasta donde se trepaba el vestido, al hacerlo el vestido
dejaba ver sus bellos muslos y al cruzar las piernas se le ve�a claramente el
triangulito blanco de su peque�o calzoncito.



Qued� satisfecha con la exhibici�n y luego, de pie, le hablo
al espejo... como esperando una respuesta:



" Marian, ... te atrever�s a tirarte al chico? �Qu� se
sentir� tener un cuerpo joven... casi de un ni�o pegarse al m�o? Podr� hacerlo
realmente o solo lo provocar� para divertirme?... � Que pasar� esta noche....?
Bueno espejito, tu ser�s testigo de lo que pase.....- luego mir�ndose por
en�sima vez.- Marian, eres una puta infanticida... Estaba en eso cuando son� el
timbre.



Marian sali� apurada. No hab�a servicio y ella tendr�a que
abrir la puerta. Aprovech� de perfumarse generosamente y fue a encontrarse con
su joven admirador. Mientras ella bajaba lentamente por las escaleras,
contone�ndose modosa y coqueta, yo baj� al primer piso por la escalera del
fondo, de modo que pod�a observarlos mientras estuviesen en la sala o fueran al
comedor. Mi visi�n era como estar en un palco de teatro. Estaba ya en mi
mirador, cuando Marian llegaba al primer piso y se dirig�a a la puerta. Al
abrirla estaba all� el chico, vestido de sport, quiz� lo m�s elegante que pod�a,
con un pantal�n negro y una camisa crema, bajo la cual se notaba un polo blanco.
En la mano tra�a un ramo de rosas, con las cuales no sab�a que hacer. Nervioso,
titubeo al ver la espectacular mujer que le abr�a la puerta y le franqueba la
entrada.



" Hola Pedrito, que tal, Tu siempre tan puntual.- salud�
coqueta mi mujer y se acerc� d�ndole un beso en la mejilla.-



" Hola Ma,, Ma .. Marian.- tartamude� el pobre.- Te traje
estas rosas,,, pens� que te gustar�an.- dijo nervioso extendiendo las flores a
mi mujer.-



"Pedrito, no debiste molestarte, Eres muy gentil...
gracias... estas rosas est�n hermosas.- ponder� Marian recibiendo el obsequio.-
pero pasa, hombre, pasa .-. y el muchacho entr�.-



" Adelante Pedrito, ponte c�modo en la sala, yo voy a poner
estas rosas en un florero y en seguida vuelvo.- dijo Marian dirigi�ndose a la
cocina.- Pedrito la sigui� con la mirada golosa, admirando a mi mujer, que
cadenciosa y sintiendo la mirada del chico se dirig�a a la cocina.



Al poco rato volvi� con las flores en un florero de cristal y
entr� a la sala, poniendo el obsequio sobre la tapa de piano de cola. Pedrito
estaba de pie y Marian, tom�ndolo del brazo lo condujo a un extremo de la gran
sala, ofreci�ndole sentarse en un largo y mullido sof�. La sala entera estaba
iluminada y el extremo escogido, ten�a adem�s una l�mpara de pie encendida, lo
que me permit�a desde mi palco no perder ning�n movimiento de mis personajes.



" Marian, que linda es tu casa y enorme....- admir� Pedrito.-
el chico no se cansaba de admirar los muebles y cuadros de la habitaci�n. Y as�
lo manifestaba.



" Pedrito, te puedo ofrecer algo de beber?, tu dime que
deseas, un whisky, un vino... no se, p�deme lo que quieras (Marian acentu� esta
frase), pero de momento no hubo reacci�n del joven al doble sentido que
encerraba la frase.



" En realidad Marian.. no se... no he tomado nunca Whisky, en
todo caso preferir�a otra cosa si no te molesta, .- dijo temeroso.-



" Bueno, qu� te parece si tomamos ambos un whisky, con hielo
y para que no sea muy fuerte le ponemos Coca Cola. Esto lo reprobar�a mi marido
que es un purista y para �l el whisky se debe tomar solo o con hielo. Pero
aprovechemos que no est� y rompamos las reglas de ese trago, �Te animas?



" Si Marian, lo que tu digas. Aprovechar� para saber c�mo es.
-repuso entusiasta.-



Marian se dirigi� a la mesita cercana que estaba llena de
diferentes licores y tom� una de Shivas Regal y sirvi� los tragos... mientras lo
hac�a, d�ndole la espalda a Pedrito, se inclin� y le dio una primera exhibici�n
al chico de su apetecible culito redondo y suave. Desde su posici�n Pedrito
pod�a ver claramente las largas, torneadas y apetecibles piernas de mi mujer
hasta el l�mite de las mismas. Un m�nimo movimiento y le podr�a ver el borde del
calzoncito blanco. Con los tragos en la mano, Mariana le alcanz� el suyo a
Pedrito y luego se sent� en el mismo sof� pero en el extremo opuesto. As�, ladeo
su cuerpo y semicruz� las soberbias piernas, dispens�ndole al joven una
exhibici�n completa de sus �ntimos encantos. Los ojos desorbitados del chico
eran signos m�s que evidentes del efecto causado:



" Pedrito no hab�amos tenido oportunidad de brindar por tu
ingreso ni por tu beca, as� que �Salud!.- dijo Marian levantando el vaso y
acerc�ndolo al del joven para un choque de los mismos,-



" Gracias Marian y Salud.- respondi� el joven.



Marian casi moj� sus labios con el licor a diferencia de
Pedro que con la emoci�n de tener tan cerca a mi mujer, ense��ndole sus �ntimos
secretos, apur� algo m�s de la mitad de la bebida. Marian, esbozando una
tentadora sonrisa y manteniendo su misma posici�n hizo un gesto:



" Pedrito, despacio... no seas tan impulsivo... rel�jate no
tienes por qu� estar nervioso. Somos amigos, �no es verdad?....tranquilo...
tranquilo....- dijo maternal.-



" Ma..Ma. Marian.- tartamude�.- es que estoy un poco
nervioso, es verdad... pero estar con una se�ora como tu, tan bonita. tan
distinguida...tan hermosa... me pone nervioso, no se como controlarme. Te ruego
me disculpes..- dijo sincero.-



" Ay Pedrito, me halagan tus palabras, pero no tienes por qu�
sentirte as�.. somos amigos.. disc�lpame m�s bien tu, que quiz� te estoy
distrayendo de tus actividades, quiz� de verte con tu enamorada... pero como me
encontraba tan sola, ya que mis hijos est�n en el extranjero, mi marido en
provincia y los criados de permiso, quise invitarte a cenar... as� me
acompa�abas y con tu alegr�a y juventud me alegraba la noche....- expres�
modosa.-



" yo encantado Marian, pero d�jame decirte que no tengo
enamorada, adem�s estoy muy contento que hayas pensado en mi, teniendo tu y tu
esposo, tantas amistades...tantas relaciones. Tu sabes, yo siempre estar�
dispuesto para ustedes, para lo que gusten mandar



" Bueno, por nuestra amistad y por tus �xitos brindemos
nuevamente: Salud.- dijo Marian.



Ella nuevamente se mojo los labios con el licor y Pedro apur�
el �ntegro de su vaso. Graciosamente, Marian volvi� a servir otro trago y
nuevamente el espect�culo de sus hermosas piernas a disposici�n del muchacho que
aprovechando que Marian estaba de espaldas, agach� la cabeza para regodearse con
el espect�culo del blanco calzoncito de mi mujer. Marian regres� con el trago y
Pedrito muy formalito recibi� el vaso y ponder� nuevamente lo hermoso del
mobiliario que hab�a en la sala y especial los cuadros. Marian coqueta le empez�
a explicar...



" MI marido es un fan�tico de la pintura y del arte en
general. Ven acomp��ame .- lo dijo poni�ndose en pie.- te voy a mostrar dos
cuadros realmente bellos y muy valiosos"



Pedrito sigui� a mi mujer, dirigi�ndose a un cuadro de Botero
colgado cerca al sito donde estaban sentados, Doctamente Marian empez� a
explicarle el cuadro (las gordas de Botero), ella estaba delante del muchacho y
el ligeramente detr�s de ella mirando la obra de arte, con el vaso en la mano
izquierda y la otra mano en el bolsillo. Marian, al darse cuenta, retrocedi� de
modo que su cuerpo qued� apoyado en el de Pedrito. El chico sinti� el contacto y
no se movi�. Las nalgas de mi mujer, se estaban apoyando en el paquete de
Pedrito que a �stas alturas luc�a un singular abultamiento, Marian con el
pretexto de la explicaci�n, movi� brevemente las caderas, de modo que el
contacto con el chico era por dem�s evidente. Pedrito, quiz�s m�s sereno gracias
al whisky puso su mano derecha en la cintura de mi mujer dejando descansar la
misma a la altura de su est�mago. Yo ve�a claramente el delicioso culito de mi
mujer, sintiendo que en sus suaves nalgas se iba comprimiendo el pene de su
amigo. Ellos permanecieron as�.. Marian segu�a hablando como si nada pasara..
pero yo, conoci�ndola como la conozco, apreciaba cierta emoci�n y temblor en
cada una de sus palabras,



Luego, Marian se dirigi� a otro cuadro, esta vez de Carlos
Revilla (destacado pintor peruano) y siempre delante de Pedrito empez�
nuevamente a ponderar la obra. Esta vez, fue Pedrito, que hab�a dejado su copa
en una mesa cercana, quien lanzado, se acerc� a Marian y se peg� a ella y apoyo
ambas manos en la cintura de mi mujer, atray�ndola hacia s�,,,, Marian segu�a
con su perorata.. pero se dejaba hacer y ahora s� el movimiento de sus caderas
se hizo m�s obvio....termin� de hablar y ambos se manten�as en la misma
posici�n. Ella frente al cuadro y �l comprimiendo suavemente su cuerpo al de
Marian. De pronto, ella volte� hacia �l.. quedaron frente a frente.. casi
respirando el mismo aire y lentamente sus labios se unieron... Marian cogi� con
ambas manos la cara del muchacho y se entreg� a la caricia... Pedrito la
abrazaba apasionado. El empez� a bajar las manos con la idea de alcanzar el
borde del vestido y subirlo para acariciar las hermosas piernas de mi
mujer....pero ella reaccion� y sujet� ambas extremidades con decisi�n. El
apasionado beso segu�a y ve�a como mi mujer era ahora la que ondulaba el cuerpo
y buscaba casi con desesperaci�n el contacto del pene de Pedrito, de modo que
�ste tocara por encima de la delicada tela del vestido, su deseada pelvis. Sin
soltarle las manos... Marian hizo que el chico la abrazara y lentamente se
separaron....



" Marian... Marian...te deseo.. quiero acariciarte toda.....-
dijo apasionado y con voz temblososa el muchacho.-



" Pedrito... cari�o... yo tambi�n lo deseo .. pero no... no
podemos... soy una mujer casada... enti�ndeme".- mientras dec�a esto con voz
suplicante ofrec�a los carnosos labios al joven, logrando que este se apoderara
nuevamente de la deseable boca de mi esposa.



Marian abraz� amorosamente a su joven admirador y �l recorri�
con ambas manos lentamente la espalda de Marian. Luego bajaron a la cintura,
para mover el cuerpo de Marian y restregar su miembro en el sexo de mi esposa.
Ella disfrutaba y se deleitaba con la caricia. La lucha de las lenguas era de
seguro indescriptible. Nuevamente las manos del muchacho bajaron acariciando
sobre el vestido las deliciosas piernas de Marian y con la pasi�n del beso,
llegaron hasta el borde del vestido y lentamente empez� a subirlo... su manos de
apoderaron de las macizas y torneados muslos de mi mujer.. con esta caricia
Marian empezaba a gemir.. el borde del vestido estaba ya en la cintura y ahora
la blanca braguita de mi mujer estaba sobre el paquete de Pedrito... Empezaba la
situaci�n a ponerse m�s caliente... cuando nuevamente Mariana se separ� y
cogiendo las manos del joven le dijo....



" No Pedrito... no podemos... no puedo... Solo bes�monos...
bes�monos pero nada m�s... recuerda mi situaci�n... por favor..." dijo
suplicante....



" Pero Marian... yo lo deseo y siento que tambi�n tu lo
deseas.....no me dejes as�.....- protest� el chico.-



" Si yo tambi�n quiero... pero no debemos.... mi marido, mi
familia... no Pedrito....no. " .- se defendi� mi mujer.



Como salida, tom� de la mano a Pedrito y lo llev� nuevamente
al sof� donde antes hab�an estado y cogidos de las manos,, se sentaron, ahora
muy cerca..... Pedrito nuevamente se apoder� de los labios de mi mujer y ella lo
abraz� y se abandon� a la caricia. Disfrutaban como locos de ese ardiente beso.
Marian era maravillosa besando, de modo que al chico lo estaba volviendo loco
con el manejo de la suave lengua de mi esposa dentro de la boca del muchacho.
Pedro se apoder� con su mano izquierda del seno derecho de Marian.. ella gem�a..
al rato la mano despu�s de masajear el redondo y suave seno por encima del
vestido, empez� a bajar y se apoy� en las desnudas rodillas de Marian,
suavemente empez� a masajear los suaves muslos de mi mujer y se perdi� debajo de
su vestido acariciando la pierna derecha.. llegando casi al borde del
calzoncito... Marian estaba ardiendo, pero por en�sima vez, control� la
progresi�n de la traviesa mano del muchacho y la extrajo cuando esta ya estaba
camino de su entrepierna.



" Cari�o no... por favor... yo tambi�n lo quiero, pero no,
Por favor,,, B�same, solo b�same pero lo otro no. por favor... no seas malito..-
suplic� nuevamente.-



" Pero por qu� si tu quieres y yo tambi�n.. por qu� no?..-
pregunt� desconcertado.-



" Porque.... Porque...ya te he dicho, estoy casada, amo a mi
marido,,, no puedo traicionarlo as�... adem�s yo soy mucho mayor que tu.. casi
una vieja... podr�a ser tu mam�.- protesto Marian, pero, por su voz de arrecha
esta negativa era solo un motivo para poner m�s deseoso al chico... realmente
ella se lo estaba pasando en grande...



" No Marian, no.. tu no eres ninguna vieja... eres la m�s
hermosa de las mujeres que yo jam�s haya conocido... Entiendo eres casada, pero
me deseas y yo a ti, �por qu� negarnos algo que ambos queremos...?. Yo respeto a
tu marido, le debo mucho.. pero no me importa sacrificarlo todo por ti.- dec�a
al borde de la desesperaci�n el pobre muchacho...



" Pedrito, mi amor, mi ni�o... por ahora solo bes�monos,,, tu
crees que yo no sufro?,,, tambi�n sufro quisiera lo mismo que tu.. pero no por
ahora.... sino tendr� que pedirte que te marches y... no quiero que te
vayas...Me encanta que me beses..



Nuevamente ambos se besaron apasionadamente y luego, calmando
sus arrestos, quedaron abrazados... muy quietos...Luego Marian, se puso de pi� y
�l la imit�,,, :



" Bueno precioso.- dijo coqueta.- ahora vayamos a cenar... te
he preparado unas cositas ricas, que espero que te gusten.....- mientras dec�a
eso, lo tom� de la mano y lo llev� por el corredor, camino al comedor. Pedro, la
igual� en el paso y tom�ndola de la cintura caminaron cual enamorados hacia el
comedor.... lo hicieron lentamente, Marian pas� su brazo y tom� la cintura de su
amiguito e inclinando su hermosa cabeza la apoy� en el hombro de Pedrito.
Mientras ello caminaban hacia el comedor... yo aproveche para colocarme frente
al gran ventanal para no perderme nada de la noche rom�ntica de mi mujer.



Ya en el elegante comedor... Mariana se sent� en la cabecera
y a su derecha Pedrito, La mesa estaba adornada con velas encendidas y flores y
junto al sitio de mi mujer un atril conteniendo una hielera conteniendo una
botella de vino blanco. Mariana le pidi� a Pedrito que sirviera y el chico lo
hizo tembl�ndole la mano de la emoci�n. Con las copas llenas, chocaron las
mismas y brindaron, antes de beber, mi mujeres le ofrecio los labios a Pedrito y
el se apoder� de la sensual boca y parado, apoy�ndose en la mesa, sus manos
estrujaban y acariciaban con pasi�n los regios senos de mi mujer... el beso
segu�a y la mano de Pedrito se desliz� por el vestido camisero y su mano derecha
se introdujo dentro del blanco sujetador... Marian tembl� con la caricia, pero a
poco de disfrutarla, con delicadeza retir� la mano del muchacho..al sacarla, se
llev� esa mano a los labios y la bes� mientras miraba a su joven amante. Pedrito
se sent�, mirando a mi mujer con los cl�sicos ojos de "carnero degollado" .
Marian, luego de mirar al muchacho intensamente y de darse un casto beso en los
labios, se puso de pie y anunci�:



" Bueno Pedrito... te he preparado algo yo misma, que espero
te guste. Comeremos filetes de un pescado llamado congrio, gratinado con leche y
champignones, la guarnici�n queda a tu elecci�n: arroz blanco o legumbres
cocidas....Esp�rame un minuto que traigo todo de la cocina. Tu qu�date aqu�.. no
te muevas.. .- dijo mimosa y al pasar junto a �l le estamp� un sonoro beso en
los labios, cogi�ndole la cara con ambas manos y sali� rauda hacia la cocina.



A Pedrito le faltaban ojos para apreciar la elegancia del
comedor. Cubiertos de plata, copas de cristal, mantel y servilletas de fina tela
bordadas a mano, en fin, todos los detalles de una casa bien equipada. Al
instante regres� Marian, empujando un carrito donde hab�a dos platos tendidos
protegidos por dos tapas plata y un recipiente adicional que r�pidamente coloc�
frente a ellos. Retir� las tapas y calientes y apetitosos se ve�an los filetes
de pescado en crema de leche.. con arroz el de Pedrito y solo el de Marian. En
el recipiente adicional se encontraban las legumbres del que ella se sirvi� una
porci�n.



Brindaron nuevamente y con una animada charla en la que
Mariana tom� la iniciativa, empezaron a comer y a beber el vino helado. Luego,
Mariana ofreci� un postre, pero Pedrito que estaba entusiasmado por otros
postres (como los pechos de mi mujer), le dijo que no deseaba. Mariana le
propuso tomar un caf� o un plus caf� en la sala y hacia all� se dirigieron no
sin antes besarse nuevamente... As�, de la mano, como dos enamoraditos, fueron
nuevamente a la sala, Yo corr� a ocupar mi lugar de observaci�n de primera
fila.. estaba con mi sexo duro y parado al tope y casi chorreante de observar la
funci�n que me estaba dando mi mujercita.



Llegaron a la sala y Marian sirvi� dos generosas raciones de
Amaretto di Sarono y de pie, mir�ndose a los ojos brindaron y tomaron parte de
la bebida. Nuevamente se besaron dulce, pausadamente, sin la voluptuosidad de
las veces anteriores. Entonces Marian propuso poner algo de m�sica... fue hasta
el lugar donde se encontraba el moderno equipo y accion� el cd player. De los
parlantes, estrat�gicamente distribuidos empez� a escucharse una lenta melod�a.
Ella se acerc� al interruptor de luz y bajo la intensidad de la misma, quedando
en una semi penumbra, Yo desde mi lugar de observaci�n, ve�a perfectamente a la
pareja. Pedrito se cerc� y Marian le hecho los brazos al cuello y �l la enlaz�
por la cintura. Al un�sono empezaron a moverse y con cada movimiento se
empezaron a acercar m�s. As� abrazados, �l oliendo los suaves y perfumados
cabellos de mi mujer y ella incrust�ndole sus hermosas tetas en el varonil
pecho. La uni�n era tan intensa que desde mi lugar ve�a como el vestido de
Marian se trepaba por sus lindas piernas, pudiendo yo apreciar el borde de su
breve tanguita blanca.



As� unidos, empezaron a besarse nuevamente, primero suave y
luego con m�s intensidad y vehemencia. Ya el movimiento no era solo por el ritmo
de la canci�n, sino por la fricci�n que ambos daban a sus cuerpos, ella
colocando su pubis sobre el paquete de Pedrito y �l empe�ado en que Marian
sintiera la dureza de su pene en su abultado monte de Venus. Ella acariciaba la
cabeza y la espalda del joven y �l despu�s de recorrer la espalda de mi mujer,
se apoder� de sus deseables nalgas que estrujaba y empujaba para que ella
sintiera su falo con m�s intensidad. Marian empez� a gemir y a mover sus caderas
como deseando ser penetrada en ese instante. Pedrito se detuvo y elev� a mi
mujer que con la calentura que tra�a se trep� sobre �l, abri� las piernas y
cruz�ndolas por detr�s aprision� las caderas del muchacho, refregando su sexo en
el paquete de Pedrito. Yo estaba a punto de darla, sin tocarme siquiera, al ver
como estaba prendida mi mujer sobre el joven. Cuando �l, acomodando su deliciosa
carga, puso sus manos directamente sobre las nalgas de Marian, por debajo de los
vestidos... mi mujer de nuevo reaccion�, se baj� de tan arrecha postura y
acomod�ndose el vestido le dijo sofocada



" Pedrito, mi amor... no me hagas perder la cabeza.. me
besas, te siento as� duro y ardiente y me desconozco... por favor compr�ndeme,
no puedo.. no puedo serle infiel a mi marido....No me tientes,,"



" Marian.. esto es una tortura... en un momento est�s
ardiente y dispuesta.. rendida a mis caricias... y luego no quieres nada
conmigo..... No me tortures por favor.....


.- suplicaba el muchacho..



" Pedrito, ya te he dicho que no puedo... es m�s fuerte que
yo... nunca le he sido infiel a mi marido, Contigo no se qu� me pasa, te permito
que me beses, me acaricies, lo que a nadie le he consentido.... Si no te puedes
controlar, voy a tener que pedirte que te vayas... . dijo firme y resuelta.-



" Pero Marian, yo quiero estar aqu� contigo,,, aunque sea
solo para conversar... disculpa mis arrebatos, pero es que cuando te beso pierdo
la noci�n del tiempo y quisiera acariciarte toda... tenerte para m�.... .- me
vuelves loco Marian.



" Pero tenemos que tranquilizarnos ok?. Sent�monos y solo
abr�zame me hace sentir tan bien...-



Diciendo esto se sentaron en el sof�, Pedrito en la esquina y
Marian se sent� a su lado, apoyando su espalda en el pecho del muchacho, �l la
abraz� y permanecieron largo rato en silencio. Pedrito besaba los cabellos y el
cuello de mi mujer y ella ronroneaba al sentir las caricia, Marian hab�a
estirado sus piernas sobre el sof� y el vestido se hab�a ido trepando y en la
posici�n en que estaba, recostada sobre su amante, el borde su vestido estaba
recogido en hasta la ingle. Sus hermosas y torneadas piernas se exhib�an en toda
su belleza, dejando ver incluso el inicio del peque�o calzoncito blanco de
encajes. Pedrito, miraba extasiado todo ese portento de belleza. Marian que
ten�a perfecta conciencia de la nueva exhibici�n que estaba dando se acurruc�
m�s en el muchacho. En eso, el gran reloj que tenemos en el vest�bulo marc�
cadencioso las 12 de la noche



" Las doce de la noche .... con raz�n empezaba a tener
sue�ito.- coment� mi mujer sin perder la posici�n que ten�a.-



Pedrito abraz�ndola con m�s efusi�n....trat� de incorporarse
y le dijo



" Marian.. estas cansada,, creo que me voy... tienes que
descansar,- dijo apenado.-



" No Pedrito... no te vayas... me vas a dejar solita,,, en
esta casa tan grande..me va a dar miedo,,.- fingi� con voz temblorosa y se
apret� m�s al joven.



" Pero Marian, estas con sue�o....



" No. no, ya se me pas�... qu�date un poco m�s... acomp��ame
a ver tele �quieres?



" Si, por mi encantado, lo que tu quieras.- expres� feliz el
muchacho.-



" Bueno, pero la tele est� en mi dormitorio .... vamos,
acomp��ame y se puso de pie y tendi� la mano al joven. Este se puso de pie y
tomando de la cintura a mi mujer la empez� a besar. Ella devolvi� la caricia y
luego jal�ndolo lo llev� en direcci�n a la escalera. Yo me apresur� y fui casi
corriendo a la escalera del fondo y sub� veloz al segundo piso. Sent�a que ellos
entre besos y caricias empezaban a subir por la escalera. Decid� meterme a mi
closset y observar desde ese privilegiado mirador lo que pasar�a entre mi
querida mujercita y su joven pretendiente.



Acababa de cerrar la puerta de mi escondite cuando sent� que
caminaban en direcci�n a la habitaci�n. A trav�s de las rendijas tipo persiana
de mi escondite vi que entraban a la habitaci�n. Marian tra�a de la mano a
Pedrito y ya en la estancia ella tom� el control remoto que estaba sobre la cama
y encendi� el TV que con sus 52 pulgadas, de inmediato ilumin� el cuarto. Desde
mi escondite miraba la gran cama donde me hab�a echado inolvidables polvos con
mi mujer y le hab�a desvirgado su culito y que ahora recibir�a a un invitado que
no era yo. El tv, pegado a la pared a los pies de la cama pod�a verse
c�modamente desde el lecho. Marian le indic� a Pedrito que se sentara en el
amplio lecho en lo que era mi lugar habitual de dormir y ella, lo hizo en su
lugar de siempre. Pedrito un poco temeroso, se sent� en la cama y Marian se ech�
acomodando a su espalda los muchos cojines que hab�a en la cabecera. Al ver que
el muchacho no se animaba a echarse,, lo incit� diciendo:



" Pedrito, recu�state hombre... no tengas temor.. mira, esta
pel�cula que reci�n comienza es buen�sima, es con Clint Eastwood y Merryl
Streep, se llama " Los Puentes de Madison". Es super tierna... ve�mosla...
Vamos, �chate ....- dec�a entusiasmada.-



Pedrito se ech� y se arrellan� en lo que era mi
lugar...Marian, se acerc� a su joven amante y se acurruc� a su lado. Pedrito
pas� su brazo izquierdo por los hombros de ella y la atrajo hac�a si. Me
arrechaba el ver a mi mujer echada en la cama con este hombre joven... que la
deseaba.. Ella tom� la mano derecha de �l con sus dos manos y d�ndole breves
besitos sin soltarla la coloc� sobre su pecho. Ambos ve�an o por lo menos
aparentaban ver la pel�cula. De cuando en cuando, ambos se acomodaban mejor.
Pedrito se sent�a cada vez m�s c�modo en mi cama y Marian apret�ndose al pecho
de chico. Ella ten�a las piernas encogidas y el vestido le ca�a cubri�ndola,
pero conforme se acurrucaba a Pedrito el vestido fue subiendo, ahora el vestido
lo ten�a por la cintura y sus hermosas piernas, sus gloriosos muslos se exhib�an
sin ning�n pudor. El calzoncito estaba expuesto a las miradas del muchacho que
fue perdiendo el inter�s por el film y se concentr� en la exhibici�n que Marian
le estaba dando.



Ella, levant� su carita para mirarlo y �l se apodero de sus
labios. Marian abri� la boca y se entreg� a la caricia. Las manos de Pedrito
recorr�an por sobre el vestido las tetas de Marian que al sentir el contacto
empez� a friccionar sus piernas entre si. Pedrito se acomod� y sus manos
empezaron recorrer las piernas de Marian. Ella gem�a y temblaba y su boca segu�a
besando al joven con verdadera y arrebatadora pasi�n. Pedrito finalmente ten�a
sus manos en la entrepierna de mi mujer, le sobaba el dilatado conejito sobre la
fina tela del calzoncito y Marian abr�a sus exquisitas piernas disfrutando la
caricia. As�, �l result� montado entre las piernas de Marian, presionando con su
cuerpo la pelvis de mi mujercita y ella abriendo sus piernas las enrollaba a la
cintura del muchacho presionando con sus talones las nalgas de �l para que la
presi�n de su pene sobre su sexo hiciera se tornara m�s intenso.



Las manos de Pedrito empezaron a echar abajo el calzoncito de
mi mujer... cuando ella nuevamente reaccion� y se zaf� del abrazo del joven, que
sin saber c�mo ya no ten�a a mi mujer bajo su cuerpo.



" Pedrito.. no...no debemos... tu me haces perder la
cabeza...Si lo hacemos despu�s me voy a sentir culpable... no podr�a mirar a la
cara a nadie... por favor no me tortures.. Tu me has prometido que solo me
besar�s... por favor no me tientes...



" Disc�lpame Marian, disc�lpame. Tenerte junto a m�... ver tu
maravilloso cuerpo... sentir y disfrutar tus besos me enloquece.. pero
descuida.. ya no te molestar� m�s, creo que es mejor que me vaya... dijo
apenado.-



" No, No me dejes.- dijo ella suplicante.- necesito sentirte
cerca de mi... veamos la pel�cula, te va a gustar, yo la he visto mas de dos
veces. Mira, mientras est�n en la tanda comercial te la resumo para que no
pierdas ilaci�n".- dijo entusiasta mi mujer.-



Pedrito se acomod� nuevamente en mi lado y Marian volvi� a
acurrucarse junto a �l. Mientras le resum�a la parte de la pel�cula que se hab�a
perdido por la breve lucha amorosa que hab�an tenido, Pedrito nuevamente la
abraz� y ella como antes cogi� con sus dos manos, la mano derecha de Pedrito y
las coloc� sobre su pecho. Siguieron viendo la pel�cula y al rato Marian empez�
a dormirse... o mejor dicho a hacerse la dormida. Al darse cuenta Pedrito la
movi� y la llam� por su nombre, Marian "despert�" y el le dijo



" Marian, mejor me voy, tu ya te est�s durmiendo, es mejor
que te deje descansar.



" No.... no te vayas... qu�date a dormir conmigo por favor...
no me dejes sola" .- esto realmente me trastorn�. No pod�a creer lo que
escuchaba... quer�a que se quedase a dormir con ella.. Mi pene ya no daba m�s...
estaba super parado y tanta tensi�n me ten�a con una arrechura empresionante.-



" Pero Mariana... que quieres de mi... yo quedarme a dormir
contigo... o me muero de un infarto o reviento por la tensi�n.- dijo con toda
raz�n Pedrito.-



" Mira mi amor... tu te metes a la cama conmigo.., si quieres
te presto un pijama de mi marido y dormimos abrazaditos... como si fu�ramos
hermanos... podemos besarnos, pero nada m�s OK?.. por favor.. di que s�, sabe
Dios hasta cuando no podremos tener un momento tan m�gico e incre�ble como el de
ahora.. por favor, duerme conmigo.".- realmente mi mujer me ten�a asombrado y
cada vez m�s arrecho.-



Las razones de Marian vencieron la d�bil negativa de Pedrito.



" Ok, Marian.....me quedo.. pero va a ser un calvario tenerte
as� y no poder hacerte m�a.. pero acepto... acepto todo lo que tu quieras.....



" Te saco un pijama de mi marido y nos metemos a la cama....



" No Marian... yo no estoy acostumbrado a usar pijama y si
estuviera... no s�, me dar�a verg�enza usar el de tu marido, prefiero dormir
como yo acostumbro, con mi camiseta blanca que ahora llevo debajo de mi camisa y
en calzoncillos." .- se franque� el chico.



" Bueno... ya que es tan f�cil... metete a la cama. .- urgi�
Marian.



Pedrito se sac� la camisa y qued� con una camiseta blanca,
ce�ida, que pon�a de relieve su amplio torax y musculosos brazos. Luego
lentamente se sac� los pantalones y qued� en slip blanco que evidenciaba la gran
erecci�n que ten�a. Marian, abri� el edred�n que cubr�a la cama y �l despu�s de
descalzarse entr� al lecho...



Marian, se puso en pie y coqueta comento:



"Bueno, yo s� tengo un ritual antes de dormir... quitarme el
maquillaje, los aretes, colocarme mi crema astringente.... mira la TV mientras
yo me preparo .- diciendo esto, entr� al ba�o. Conociendo a Marian, seguro ir�a
al inodoro a orinar y quiz�s a cambiarse de braguita, que a estas alturas deb�a
estar empapada con tanto flujo que habr�a destilado mi mujercita. Sent� que baj�
la palanca del inodoro y apareci� nuevamente en el cuarto. Se acerc� al espejo
del tocador y r�pidamente elimin� el maquillaje... sin �l, se le ve�a m�s joven,
m�s hermosa... pero sus gestos de arrecha.. la hac�an m�s deseable. Luego,
d�ndole la espalda a Pedrito, se sac� el vestido... �si se sac� el vestido!,
quedando en calzoncito y en sujetador. Abri� su closset y sac� una camisa de
dormir color rosado p�lido y antes de pon�rsela se quit� el sujetador,
conservando el calzoncito y se coloc� la camisa de dormir, que le quedaba a
medio muslo... todo lo hizo con una parsimonia y lentitud que tra�a boqueando a
Pedrito. Seguidamente se cepill� vigorosamente el cabello, �ste empez� a lucir
m�s bello y le daba al terminar su tarea un aspecto de leona, felino,,,
riqu�sima, finalmente se perfum� y lentamente se acerc� a la cama desde donde el
joven la miraba embobado.



Marian se meti� a la cama y se arrim� a Pedrito, clocando su
hermosa cabeza sobre el pecho del muchacho, cruzando su brazo izquierdo, de modo
que esa mano empez� a acariciar el hombro derecho de �l; elev� su lindo rostro y
ofreci� sus labios al rendido amante... Se besaron lenta y pausadamente, por el
bulto de las s�banas, las piernas de mi mujer estaban sobre las de Pedrito y el
pubis de Marian se adher�a al muslo derecho de su joven v�ctima. El beso se
alarg� y ella empez� a gemir cuando la mano derecha de Pedrito, empez� a
acariciar y a masajear la teta izquierda de mi mujer, por debajo de la
transparente camisa de dormir. Desde mi privilegiado ve�a como mi mujer se
apretaba m�s al muchacho. Ella volvi� a acomodarse y terminado el beso, cerr�
sus grandes ojos y qued� quieta... aparentemente dormida. Pedrito la dejo
descansar y tom� el control remoto y empez� a cambiar los canales sin encontrar
en los 100 canales de cable nada interesante que ver. Estaba en eso, cuando de
pronto Marian, sin abrir los ojos empez� a besar el pecho del chico, lentamente
lleg� a las tetillas y las acarici� lentamente con su lengua, chup�ndolas
suavemente. El cerro los ojos y se abandon� a la caricia. Marian lentamente
sigui� bajando, ahora besaba el ombligo del muchacho y met�a la punta de su
suave lengua en el peque�o hoyo.. sigui� besando las caderas del joven... De
pronto Marian empez� a bajar lentamente el slip de Pedrito y al hacerlo emergi�
duro y vanidoso el pene del muchacho. Mi mujer empez� a darle peque�os besitos
al rojo glande, lami�ndolo luego y despu�s introduci�ndolo en su bella y
armoniosa boca. Sin abrir los ojos, Marian empez� a chupar r�tmicamente el falo
de Pedrito, hasta que incorpor�ndose brevemente se acomod� y engull� toda la
herramienta, empezando una mamada de campeonato.



Cada recorrido de la boca de mi mujer en el pene de Pedrito
hac�an que �ste blanqueara los ojos, temblara y gimiera... el placer que estaba
recibiendo era in�dito para �l. Parec�a a punto de correrse cuando con voz casi
inaudible le dijo a mi mujer:



" Marian... detente... la voy a dar y no quiero darla as�...
quiero vaciarme dentro tuyo..."... por ffffavor.-



Al escuchar ese apremio mi mujer con una rapidez pasmosa, se
quit� el calzoncito blanco que vol� por los aires igual que la camisa de dormir
y terminando de bajar el slip de Pedrito se mont� sobre �l y sin miramientos se
sent� sobre el dilatado pene que presuroso ingres� violento en la mojada vagina
de Marian. Ella descontrolada empez� a cabalgar furiosamente sobre el muchacho
que en ese momento acariciaba las piernas y el culo de la preciosa hembra que le
estaba dando tanto placer. Mariana, mov�a a velocidad de v�rtigo sus fabulosas
caderas y empez� a gemir y gritar:



" C�chame Pedrito... c�chame... hazme tuya... dame fuerte...
mas ... masssss"



"Marian... Marian....- Gritaba �l.-



" Vamos.... Dame con todo.... Aqu� estoy... soy tuya
chiquito.... M�tame.... M�tame



A cada movimiento de Marian, tus hermosas tetas se
balanceaban como queriendo escapar de su cuerpo y m�s a�n cuando ella se elevaba
para que el pene del chico saliera hasta rozar sus labios vaginales para luego
dejarse caer y hacer desaparecer la dilatada herramienta en su ardiente grieta.
De pronto Pedrito empez� a gemir y lo tenso y r�gido de sus m�sculos anunciaron
que empezaba a eyacular. Mi mujer se segu�a moviendo pero conoci�ndola como la
conozco a�n no llegaba al orgasmo. La cantidad de semen que estaba expulsando el
muchacho era abundante, pues un grueso hilo de esperma empez� a deslizarse por
su entrepierna. Con la liberaci�n del n�ctar vital al parecer empez� a ceder su
erecci�n del muchacho. Marian segu�a movi�ndose hasta que sinti� que el pene de
Pedrito ya vencido se escurr�a de su vagina, entonces detuvo su galope y
abriendo los ojos... incr�dula.. dijo:



" Pedrito, cari�o.. qu� pas�?



" Marian, preciosa... has estado deliciosa... no sabes como
lo he disfrutado... eres grandiosa..



" Pero Pedrito... me vas a dejar as�?... yo todav�a no llego
al climax mi amor... anda... recup�rate papito... yo te voy a ayudar... quiero
que me metas esa rica pinga que la he sentido deliciosa...



Y diciendo eso, dirigi� su sensual boca al pene de Pedrito y
empez� a chuparlo primero suave y despu�s m�s fuerte... estuvo en ese empe�o
casi cinco minutos y el objeto de su atenci�n no respond�a... chup� los huevos
del muchacho, volvi� a apoderarse del ap�ndice y este sigui� sin reacci�n...
mir� al joven y este se hab�a desmadejado y dorm�a pl�cidamente, con los brazos
abiertos en cruz y con una ser�fica sonrisa de satisfacci�n en el rostro. Marian
esboz� una maldici�n entre dientes y se estir� a lo ancho en nuestro lecho
marital y empez� a acariciarse las tetas y una mano se dirigi� veloz a su
vagina. Dos dedos entraron a su inflamada cueva y entre gemidos y gritos de
placer, empez� a satisfacerse, solitaria y frustrada. Saciada en parte, se
coloc� la camisa de dormir y empez� a despertar a su frustrado amante



" Pedrito, Pedrito....despierta cari�o...



El muchacho abri� perezoso los ojos y al ver a mi mujer
estir� l�nguidamente su mano para acariciar la linda cara de mi mujer. Mariana
se dej� hacer y poniendo una cara de arrepentida le dijo:



" Pedrito... ha sucedido lo que no deb�a.... no me siento
bien por lo que ha pasado... jam�s le hab�a sido infiel a mi marido y ahora, en
esta noche loca... lo he hecho... Por favor quiero que te vayas... necesito
pensar y poner mis ideas en orden. Por favor vete.- Conozco a Marian y eso solo
era una excusa para deshacerse del chico. Este cay� en el juego y balbuceando
una disculpa se visti� r�pidamente. Marian, lo acompa�o hasta el primer piso,
abri� la puerta y con un fugaz beso en los labios lo despidi�.



Yo aproveche para tomar la escalera del fondo, ganar la
puerta del jard�n y retirarme tambi�n. Llegaba ya a abrir esa puerta, cuando
son� mi celular, respond� r�pidamente y adivinen qui�n era... si era Marian:



" Alo.. .- dije inocente.-



" Mi amor... te necesito...ven pronto a casa por favor... te
necesito mi amor....- su voz suplicante me anunciaba que la calentura estaba a
tope.-



" Si mi amor, en menos de lo que tu piensas estoy contigo .-
y colgu�



Di media vuelta y sub� a trancos por la escalera y al
instante estaba en la puerta de nuestra habitaci�n. All� estaba Marian,
terminando de cambiar las s�banas y se sorprendi� que a los diez segundos de
haberme llamado ya estuviera all�... asombrada me dijo:



" C�mo llegaste tan pronto..... no me digas que....



" Si te digo mi vida..... desde ese closset lo he visto
todo... y me tienes arrech�simo.- respond� acerc�ndome y abraz�ndola.-



" Tramposo, se supone que yo te contar�a....- protesto.-



" Mi morbo fue mayor preciosa y sabes... me has tenido
totalmente descontrolado.. dese�ndote, queriendo ser Pedrito para sentirte como
�l te sent�a....



" Si mi amor... pero el chico result� un fiasco... y sabes?,
yo no te cambio y no cambio esta rica herramienta tuya por nada ni nadie... .-
mientras me ofrec�a sus carnosos labios y sus manos se apoderaban de mi pene.-



No recuerdo y mi mujer tampoco haber tenido mejor sexo entre
nosotros que a partir de esa noche. Un glorioso 69 permiti� que mi lengua
liberara dos orgasmos seguidos de Marian, que los disfrut� con verdadero
deleite, mientras su boca recorr�a mi respetable falo. Pasamos am�ndonos de
todas formas y tanto la vagina como el culito e mi mujer fueron refugios de mi
deseoso pene que no se saciaba con una sola penetraci�n, sino que manteniendo al
tope mis deseos exacerbados por el magreo que Pedrito le hab�a dado a mi mujer,
pudimos llegar a infinidad de orgasmos continuos y maravillosamente
compartidos... rendidos nos dorm�amos abrazados y al despertar encontr�bamos la
forma de arrecharnos recordando los manoseos de Pedrito a mi mujer.... Esos nos
encend�a y empez�bamos a chuparnos y a darnos mutuo placer. La noche de amor se
prolongo hasta las doce del d�a del domingo, hora en que nos ba�amos, vestimos
con ropa casual y salimos al club a almorzar, demostrando a todo el mundo lo que
sent�amos.... que est�bamos tan enamorados como el primer d�a.....(CONTINUARA)




Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .



Número de votos: 0
Media de votos: 0


Relato: La Mujer del Portero (11)
Leida: 20969veces
Tiempo de lectura: 32minuto/s





Participa en la web








Contacto
Categorias
- Amor filial
- Autosatisfacci�n
- Bisexuales
- Confesiones
- Control Mental
- Dominaci�n
- Entrevistas / Info
- Erotismo y Amor
- Fantas�as Er�ticas
- Fetichismo
- Gays
- Grandes Relatos
- Grandes Series
- Hetero: General
- Hetero: Infidelidad
- Hetero: Primera vez
- Intercambios
- Interracial
- L�sbicos
- MicroRelatos
- No Consentido
- Org�as
- Parodias
- Poes�a Er�tica
- Sadomaso
- Sexo Anal
- Sexo con maduras
- Sexo con maduros
- Sexo Oral
- Sexo Virtual
- Textos de risa
- Transexuales
- Trios
- Voyerismo
- Zoofilia


Afiliados





























Relatos eroticos la señora del autolavadofollando con mi padreRelatos porno de amar filial abuelo aprovechado 2 bdlol.rucornudo sirviente relatoRelatos cojiendo con mama en el ranchoRelatos + veraneando con mi marido pero cogiendo con otrosenculada por mi ....relatos sexoRelatos sexo. Merida,yucatanRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatoel doctor meda s lechita mientras me examina relato pornoNo tan duro abuelo relatos eróticosrelatos de sexo forzado suegroniñera cogida por papi relato eroticooh dios me folle a mi tia relatospervirtiendo a una nena inocente Relatos Pornover relatos porno con mujeres embarazadasrelatos porno madre ninfomanajuegos porno de narutoRelatos papa cojemesexo relatos novia apuesta porno mortalRelatos gay con mi cuñadorelatos eróticos sexo sin tabúes amor filialrelatos de sexo caliente con mi primoel hermano de mi amiga relatosmadres e hijas follando gratisfollo a su madre drogada relatosrelatos porno mi huerfanaPrima puta relatos realesmis relatospornoq linda colita tenia el putito relatosrelatos porno de mi sobrinita de seis me chupa el peneRelatos porno amor filial bdlol.ruMi hermana mi prima y yo tenemos sexo relatosIncesto con la abuela relatadosRelatos cojiendo con mama en el ranchoRelatos eróticos desgarrando a mi hijaIncesto con la abuela relatadosrelatos eroticos primer intercambioHICE EL AMOR CON MI PRIMA , RELATOSme follo a mi tia relatogayçrelatos xxx yu gi oh. cogiendo con tearelatos porno mi familia liberalGay vibrador en pezon relatoIncesto con la abuela relatadosrelatosporno desvigue a mi.hermanitarelato mi madre mi puta ohhhh siiiiRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatobuscar historias eroticas de nenas de 11 gratismi hijita de 9 añitos relatorelato camionero maduro gayrelatos eroticos infiel con el zapaterorelatos eroticos papi porno me cogi a una colegiala de 13 relatoRelatos de sexo no consentido con misioneras americanasnenas pornosexo con el hermano historiasmirona relatos eroticosrelatos porno con el amigo de mi hijoCon mi hija 10 porno relatoRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos eroticos yo y mi amiga follamos a su padrastrorelatos cortos de sexoporno gordospadre follando a su hijaRelatos porno amor filial follando con mis pequeñas sobrinas bdlol.rurelatos eroticos belen analviolacion gay mi tio relato eroticorelatos eróticos de familiarelatos er�ticos mi mi�ERa en minifaldala vecina ardiente relatórelatos eroticos con mi tiarelatos erotico 8 nadandopornosalvajeduró del mundorelatos porno alquilando a mi hijaRelatos eróticos de madre e hijaputa lesbianafollando con la ancianaporno relatoa mi nenitarelatos pornografía de pene muy grandesrelato karen con don jorge y su amigo xxxrelato el culo de mi hijitarelatos zoo perrosrelatos eroticos Yo comense la bromastreptes pornoporno gratis penes grandesRelatos erótico abuelito aprovechadoRelatos porno una nietica lindarelatos porno de perdi mi.virginidadconfesiones eroticas de mujeres me gusta coger otras mujeres con arnesrelatos eroticos la ceduccion de adriana el finalIncesto con la abuela relatadosrelatos erotiços xxx madresxxx relatos amor filial mama en el campoguia de pornoMI HIJA RELATOS EROTICOSRelatos porno de mujeres gringarelato mi hermana sandra relatos pornos con bagabundo chupale la panocha a mi mujer