En aquel a�o estaba bobito del todo, por la edad del pavo, la adolescencia.
Mis padres se empezaban a preocupar mucho. Pero m�s que mi actitud y
desobediencia, les preocupaba mi aproximaci�n exagerada hacia mi madre.

Siempre me arrimaba a ella, me achuchaba a ella, no me separaba de su piel.
Mi padre estaba celoso y mosqueado. Ten�a �l, creo yo, complejo de cornudo. Un
d�a, me ri�� po cualquier tonter�a y yo me puse hist�rico, le insult� y empec� a
abofetear a mi padre. �l, como era muy t�mido y educadito, s�lo se fue de la
habitaci�n y me castig�. Pero las cosas no iban bien. Y la gota que colm� el
vaso fue cuando mi madre lleg� a casa y estaba s�la conmigo, en la cocina. De
repente le dije:

- Mam�, est�s guap�sima.

- Gracias, tesoro.

Y sin mediar m�s palabra, la abrac� much�simo y le di un beso en sus labios.
Ella estaba aterrorizada, y s�lo me dijo:

- �Pero Rafa?

Y habl� muy seriamente con mi padre.

Los dos decidieron mandarme a una psic�loga, la t�pica que no es de la
Seguridad Social y por lo tanto s�lo atiende a familias pudientes.

Mi Padre tiene 45 y mi Madre, Ana Rosa, 41. Ella es alta, de 1.70, delgadita
y con un pecho muy adecuado a su figura, de 88 de talla, y un pelo muy sueve, de
media melena casta�o claro. Era muy guapa de cara, con rasgos muy finos, de
chica modelo.

La Psic�loga me parec�a de lo m�s cursi y bobo que vi en mi vida. Actualmente
vi a 6 diferentes, y todas con casi un calco. La pija esta no ten�a ni idea, la
verdad, y me pregunt� de repente:

- Vamos a ver, Rafa: �Te atrae sexualmente tu Madre?

- Pes la verdad es que si.

Y se qued� con una boca at�nita, de sorpresa.

Al d�a siguiente, se reuini� con mis padres y como no ten�a ni puta idea de
mi problema, para quedar de intelectual, les dijo que la mejor y m�s r�pida
soluci�n a mi problema era acceder a mis preticiones, porque as� se me pasar�a
la ansiedad luego de experimentar con los motivos de mi frustraci�n, o algo as�.
E incluso dijo ella que ser�a interesante permitir un acercamiento m�o m�s
f�sico con mi madre para ver si as� superaba esa frustraci�n. Hasta dijo que en
EEUU las madres de los ni�os con Complejo de Edipo acced�an a que su ni�o la
poseyera, para ver si as� superaba ese complejo.

Mi Padre se puso de morritos, pero esa noche o� c�mo mam� le convenc�a. �l
iba a ir a un congreso a Madrid y as� ella aprovechar�a la ocasi�n para
acercarse a m�. �l dijo que no quer�a saber nada. Se ir�a pero que no le parec�a
bien nada de esa idea de una se�ora cursi sin idea de las cosas de la vida.

Lleg� ese d�a. Lo despedimos y fuimos a casa. Mi madre se dej� comer el coco
por completo por la Psic�loga. Llegando a casa me dijo:

- Rafa, cari�o. Ahora t� eres como mi marido. �Eh?. A ver c�mo te portas,
para suplir a tu Padre y que no me sienta sola.

Lleg� la comida y comimos juntos. Ella se desabroch� tres botones de su blusa
y dejaban ver su sost�n blanco y la preciosa curvatura de su pecho, el pecho de
mi Madre, que era una maravilla. No le quitaba ojo de encima, y me dijo con una
inmensa sonrisa en sus labios:

- Rafa, porfavor, cambia de mirada que me voy a poner colorada.

- Perdona, Mam�.

- Bueno, no pasa nada, casi me agasajas.

- Mam�: �Dorm�s pap� y t� juntos la siesta?

- Claro, cari�o.

- Pues yo hoy soy el sustituto de Pap�.

- Tienes raz�n, cielo. �Qu� quieres, dormir conmigo?

- Huy, s�, me gustar�a mucho.

- Bueno, vale, ven a la cama conmigo, coraz�n.

Y subimos las escaleras hasta su dormitorio de la mano, mir�ndonos y
sonri�ndonos. Yo cre�a estar en un sue�o increible.

- No, Rafa, no te desnudes que s�lo es media horita y no vale la pena.

- Mam�: �C�mo te abraza pap�?

- Pues me coge de la cintura y pega su pecho con mi espalda.

- �Puedo hacerlo yo, porfavor?

- Si es lo que quieres, claro que s�.

Le acarici� su barriga, pero no me atrev� todav�a a hacer nada.

Y la tarde pas� r�pido. Mi madre se cambi� de ropa, y se puso un jersey negro
algo ce�ido y un pantal�n vaquero. Estaba muy juvenil.

Cenamos r�pido y fuimos al sal�n.

- O sea, Rafa, que hoy fuiste como mi novio, amante o esposo.

- Si, mam�, me ha gustado mucho.

- Pero no se lo digas nunca a tu Padre, que es muy celoso.

- Oye, Mam�: �Y me quieres hacer creer que en todo un d�a nunca besas a tu
marido?

- S�, supongo que s�. �Por qu�? �Quieres besarme?

- Claro, porque si no, el juego de hoy s�lo ser�a una farsa.

Recordando el consejo de la Psic�loga, y por amor a su hijo, mi madre dijo:

- Mis labios son tuyos, cielo.

Y dicho esto, le bes� sus labios carnosos, mientras me tom� la libertad de
acariciarle un pecho.

- �Rafa, cari�o, eso es trampa!.

- Mam�, hemos empezado a parecer realmente marido y mujer. Porfavor, ahora no
lo pares as� de secamente.

- No, cari�o.

Y le bes� otra vez con ardor.

Ven, subamos.

Ya en la habitaci�n, yo consider� normal que la mujer duerma con su marido, y
en ausencia de �ste, con su sustituto, o sea, yo. Y se fue poniendo su camis�n.
Yo me puse un pijama. Nos acostamos los dos en la cama doble.

- Bueno, Rafa, acu�state conmigo pues se ve que lo est�s deseando.

- Mam�: Siempre dese� estar as� contigo, en vez de pap�. T� y yo.

Mam� me iba acariciando el cuello y me mir�.

- �Y por qu�, Rafa? �Me deseas?

- Es algo que noto en mi interior, Mam�. Deseo que t� seas mi novia, mi
mujer. Te amo.

Y la bes� otra vez s�lo en sus labios.

- Mam�, siempre quise estar encima tuya, como lo hace Pap�.

Y me puse encima de ella. Ella puso una mueca como de que le pesaba un poco.
Yo, pese a estar en pijama, notaba su respiraci�n, su pecho contra el m�o, sus
costillas clav�ndoseme, y mi barriga empujando hacia su vientre.

- �Y qu� m�s hac�is pap� y t�?

- �T� qu� crees? (y me tocaba el flequillo).

Yo me puse m�s hacia el colch�n, poni�ndome mi muslo sobre su cadera, y s�lo
medio pecho m�o encima de su sost�n.

- Supongo que a estas horas de la noche os dar�is un beso, �No?

- �Te apetece de verdad d�rmelo?

- Mam�, es lo que llevo deseando desde hace tiempo, pero m�s apasionado que
el de antes, con m�s ardor.

- Ven aqu�, Rafa.

Y me dio ella un morreo tremendo mientras me sobaba el hombro y el cuello. Me
meti� mucho su lengua.

- �Contento, cari�o?

- No lo sabes bien, mam�, mi amor. Te amo. Siempre te dese�.

- Tranquilo, sigamos. M�s tarde comprender�s por qu� hago esto.

Me bes� otra vez y meti� su mano por debajo de la parte de arriba de mi
pijama, acarici�ndome a su gusto mi pecho.

- Ahora me toca a m�, Mam�.

Y empec� a desabrocharle su camis�n. Se lo saqu� y qued� en sost�n,
finalmente, y acarici� su piel, me detuve en la flacidez de su vientre y
acarici� su sost�n.

- �Sabes qu� le hago a pap� y qu� le voy a hacer a su sustituto?

Ella empez� a meter su mano por encima de mi calzoncillo, y me lami� con
cari�o, lentamente, mi nuez y mi cuello.

- Sigue, mam�, sigue.

Tom� el turno y le bes� en su cuello y le sob� con m�s fuerza sus pechos, que
casi se salen con la fuerza de mis caricias.

- Vale, Rafa, espera, poco a poco.

Se puso ella arriba, pues yo le pesaba un poco.

Su braga estaba pegada a mi calzoncillo, y su pelo ca�a por mi cara.

- Mam�, eres guap�sima. �Por qu� no habr�s hecho esto antes, cielo?

Y pude comprobar el peso y el tama�o de sus deliciosas tetas.

Ella suspiraba por el morbo y el placer.

Dej� de sobarle el pecho, subieron mis manos a sus hombros, se los acarici�.
Estaba muy tensa, baj� por la espalda, y le saqu� su sost�n. Sus pechos quedaron
al aire, bailando un poco por el vaib�n de nuestro fuego.

- �Puedo tocarlos ahora, Mam�?

- �No lo hace tu Padre tambi�n?

Clav� mis manos en sus pechos y di un leve quejido de dolor. Mi pene se hab�a
salido de mi calzoncillo y ella se quit� de encima para poder verlo.

- �Rafa!. Eres todo un hombre.

- Mam�, hoy soy tu hombre. te deseo, quiero ser tu marido. Quiero ser Pap�.

Ella me quit� del todo la ropa que me quedaba, y acarici� un poco mi pene
para quitarme el dolor.

- �Mejor as�, cari�o?

- Me duele un poco.

Y acto seguido, le cog� de su cabello y dirig� su cara a mi pene. Me dio
varias chupadas, y cre� estallar y desvanecerme. Era mi primer orgasmo, pero no
hab�a eyaculado.

- Ven, mam�. Ponte encima otra vez. Y qu�tate las bragas, porfavor, que me
pueden hacer da�o.

Ella obedeci� sumisamente.

Su pecho estaba en contacto con mi pecho y sus labios distaben mil�metros de
los m�os.

- �Qu� m�s haces con Pap�, Mam�?; Lo quiero todo, lo necesito todo.

- Est� bien, Rafa, est� bien. Lo hago por t�, para hacerte m�s hombre. Hoy
dejar�s de ser ni�o.

Cogi� mi pene con sus manos y se lo dirigi� a su cueva, que estaba totalmente
resvaladiza y h�meda. Le toqu� el culo a mi Madre y nos besamos suavemente.

Not� de repente como entraba mi pene en la cueva, h�meda y templada. Nos
juntamos cara con cara y la agarr� de la espalda. Sent� como un estir�n en todo
el cuerpo, y todos mis m�sculos se pusieron en tensi�n, hasta que eyacul�
mientras le besaba del cuello hasta su ment�n.

- Lo has hecho todo, rafa. Tu deseo se ha cumplido ya por fin.

La psic�loga no acert�, porque me convert� en un mimado y un caprichoso. Mi
padre se separ� enseguida. Yo seg� queriendo follar con Mam�, pero ella ya no
quiso hacerlo m�s y me mand� a un colegio interno.

Si tienes alguna idea muy morbosa y algo creible en el amor filial, y que sea
buena:

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